En tu ausencia... Pen, vuelve a mi.

19. La joven, viuda, señora Ann Ferlington.

Mientras tanto el señor Adam Lennox estaba viajando a la mansión de la señora Ann Ferlington en carruaje, se preguntaba si realmente valía la pena viajar hasta ahí para recuperar el afectó de su prima.

Ella lo rechazaba y lo detestaba, lo culpaba de que lord Félix Carter cancelará su compromiso con ella.

La historia comienza cuando Félix y Adam regresaron de Oxford ellos se conocieron ahí y se volvieron grandes amigos, Adam estaba convencido de que quería ser un escritor de primera, había escrito muchísimas historias, pero sus padres no tenían el dinero suficiente para mandarlo a estudiar a esa prestigiosa escuela pero su tío el señor Enrique Vicente Lennox, si tenia el dinero y confiaba en la inteligencia de su sobrino, lo apoyo con sus estudios y no se equivoco pues Adam salió con honores en literatura y letras.

Mientras que Félix regresaba a vivir la vida y despilfarrar todo lo que sus padres habían logrado sobretodo teniendo un titulo, pero conoció a la prima de su mejor amigo, Micka Lennox y el mundo se detuvo. La empezó a cortejar hasta estar comprometidos, el ya se había hecho cargo de las encomiendas de su padre y todo estaba perfecto hasta que llego Camila.

Camila era la prima de Félix, Adam se enamoró de ella y también la empezó a cortejar, la iba a visitar, le llevaba flores, salían a dar el paseo al parque, pero una noche horas antes de que Adam pidiera la mano de Camila la descubrió con un soldado, el se puso furioso y canceló todo.

Adam hablo con Félix y le explico los motivos de la cancelación del matrimonio pero no le creyó nada, lo llamo cobarde por no querer hacerse cargo del hijo que Camila esperaba. Adam le dijo que ellos nunca habían tenido intimidad, pues respetaba a la dama, pero Félix no le creyó una vez más y la gente empezó a hablar, así que para evitar más habladurías Félix canceló el compromiso con Micka.

Adam se embarcó al continente Américano para calmar las aguas, fue cuando aprovecho para escribir, mucho, pues ya cuenta con ocho libros en el mercado y próximamente lanzará uno de poemas. Adam era un buen escritor, pero no le gustaba andar de fanfarrón con sus logros personales, si algo lo caracterizaba era su sencillez. El carruaje en el que viajaba se detuvo.

- Señor hemos llegado a la posada, es de noche descansaremos y partiremos mañana. - Le comunicó el cochero, mientras Adam bajaba del carruaje y estiraba las piernas.

- Pediré las habitaciones, nos vemos para cenar.

Al otro día, después de desayunar volvió a entrar al carruaje y de nueva cuenta empezó a divagar, habia olvidado tomar un libro de la estantería y se la estaba pasando de lo más aburrido. Doce horas después le avisaron que habían llegado al pueblo que comunicaba con varias fincas, pero por la hora decidió volver a quedarse en una posada.

- ¿Usted visitará a alguien? - El hombre que tenía sentado a su lado en el comedor lo miro de arriba abajo.

- ¿Es muy obvio?

- No se ve gente tan pomposa por aquí, - miro su ropa. - las personas que viven por estos lugares son campesinos que trabajan las tierras y no se ven vestidos así.

- Claro, entiendo su comentario. - Respondió por educación.

- Entonces... ¿Usted visitará a alguien? porque la fiesta del pueblo fue hace mucho.

- ¿Ah sí? Cuénteme cómo es la fiesta.

- Es agradable, pero usted no ha respondido mi pregunta ¿usted visitará a alguien? - Adam irritado por la pregunta respondió.

- Si, busco a la Señora Ferlington.

- ¿A la viuda?

- ¡Pues supongo que es viuda! - Respondió Adam poniéndose de pie. Ese hombre alzo la mano y le iba decir algo. Pero Adam lo corto. - Supongo es una señora con muchos años, claro que debe ser viuda por todo lo que cuenta, debió aburrir a su esposo hasta matarlo, seguro ni lo dejaba hablar, que pase buena noche, - Adam se giro irritado y murmuro. - Gracias por arruinarme la cena... - Subió a su habitación se dio un baño y se tumbo en la cama, a las diez antes meridiano, salio de su habitación y se puso en marcha hacía la mansión de la señora viuda Ann Ferlington.