35. A la luz de una vela.

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- ¿Me va a permitir un baile señora Ferlington? - Vicente.

- Sería de muy mala educación negarle un baile al anfitrión de la fiesta. - Caminaron al centro de la pista y empezaron a bailar, Vicente no dejaba de ver su rostro, era un ángel que tenia a su alcance, la quería solo para el. Nadie se merecía a Penelope, los planes eran claros, mandar a Micka y Colin muy lejos, mandar a Sarah y a Alexandra a París y Adam bueno ese le daba igual. Se quedaría con Penelope, los planes iban perfecto. Trabajarían en ese libro, la cortejaría, se casaría con ella y le haría tener muchos hijos, un varón primero para seguir con la herencia Lennox. Le dió una vuelta a Penelope y quedaron de frente, el vals termino y salieron de la pista.

- ¡Colin! Disculpa que no te pueda dedicar la noche completa, no creí que un baile requiera de tanta atención.

- Esta bien. - mientras quitaba la mirada de la pista para verla.

- ¿Cómo que está bien? No lo está, solo hemos hablado dos veces en toda la noche y ya estamos comprometidos. - Colin estaba serio, ¿de verdad esto es lo que quiero? se preguntaba una y otra vez. - Además no me dijiste que ibas a tener invitados, eso es un poco descortés de tu parte. - Mientras lo miraba acusatoriamente.

- ¿Un poco descortés?

- Si, me debiste decir. Cuando tu y yo estemos juntos tendrás que dejar ese tipo de amistades. - Colin se acerco a Micka y le susurro algo al oído, ella lo miró, trago saliva, el miró a otro lado. - Te lo puedo explicar.

- No. Ya me retiro. - Colin se dio media vuelta y se acercó a su familia. - ¿Nos vamos? - Violet lo miro.

- ¿Ya te quieres ir? Espera, aún no le he podido preguntar a la señorita Lennox sobre la fecha y el lugar para llevar a cabo la fiesta...

- Lo harás luego, ¿nos vamos?

- Anthony, Benedict, Eloise, Kate nos vamos. - Ordenó la matriarca y los Bridgerton salieron de esa fiesta, esperaban el carruaje.

- ¿Qué te ocurre? - Pregunto Penelope, mientras caminaban a la puerta de la fiesta.

- Vamos, por favor vamos a casa. - suplicó Sarah.

- Si pero me tien... - Los Bridgerton miraban a las dos mujeres. - ¿Se, se van? - Pregunto Penelope, Sarah ordenó el carruaje de la señora Ferlington.

- ¿Tú también Penelope? - Pregunto Kate.

- Si, ha sido un día muy agotador. - Colin la miro de arriba a abajo.

- El señor Lennox parece estar seguro de lo que quiere. - Benedict.

- Yo también, estoy segura de lo que quiero señor Benedict. - Respondió Penelope y Benedict asintió.

- Madre, ¿puedo invitar a Penelope al té? - Eloise.

- No veo porque no, siempre y cuando Penelope y la señorita Sarah quieran y puedan asistir.

- Llego el carruaje. - Colin camino hacia el carruaje de ellos y se detuvo para esperar que las damas suban.

- Si, Pen, ven a visitarnos. - Kate.

- Les avisaré, muchas gracias por la invitación.

- Señora Ann Ferlington si usted no asiste mañana a tomar el té con las damas Bridgerton y mi casa se vuelve un caos, - Anthony le apunto con el dedo indice. - usted será la culpable. - Anthony le guiño el ojo a Penelope y le sonrió de oreja a oreja, todos los Bridgerton caminaron al carruaje.

- Vizconde Bridgerton - dijo Penelope pero ninguno volteó. -¡Acepto su invitación! ¡Aceptamos! No vemos mañana. - Todos los Bridgerton rieron en silencio, el carruaje de ellas llego y subieron.

En tu ausencia... Pen, vuelve a mi.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora