En tu ausencia... Pen, vuelve a mi.

15. ¿Sarah que?

- ¡Ann! ¡Ann!

- Señorita Sarah, ella esta bien - el doctor le mostró que Penelope respiraba - ha tenido aproximadamente doce horas de contracciones, dolor y labor de parto, esta agotada y cansada, es mamá primeriza. Señora Phina con mucho cuidado limpie al bebé es un hermoso varón y después con mucha delicadeza y agua tibia pueden asear a la señora Ferlington.

- ¿Entonces todo esta bien?

- Todo esta bien, si me permiten quedarme en alguna habitación o algún lugarcito estaré bien, ya es muy tarde para regresar a mi casa, y por la mañana tengo que revisar a la señora.

- Claro doctor así será.

Pasados tres meses Penelope y Sarah tenían unas espantosas ojeras en sus rostros, el cansancio, el sueño eran su constante, pero no importaba siempre y cuando el bebé estuviera perfecto.

Penelope estaba orgullosa, por fin tenía entre sus brazos a su bebé al cual decidió llamar Tomas, el tenia unos ojos azules hermosos como la intensidad del océano, el tono cafe en los cabellos que caracteriza a los Bridgerton y en el tono de piel se reflejaba la blancura de ella, era inconfundible. Ese bebé era un Bridgerton Featherington y se podía ver a kilómetros de distancia.

- Es hermoso Penelope y es tuyo. - Ella sonrió. - le escribí a la señorita Genevieve y llego correo desde hace unos días, pero con lo del bebé no te quise entretener.

- Me encantará leer que dice Genevieve.

- De nueva cuenta a mandado un baúl, dentro de el podrás encontrar otra caja, no la abrí supongo que es algo para ti. Puedes ir al despacho, yo cuidare de Tomas.

- Gracias Sarah.

- Ve despacio, el doctor dijo que debes caminar pero no distancias lejanas. - Penelope asintio y con mucho cuidado salió de la habitación del bebé.

Bajo muy despacio para su gusto hasta llegar al despacho reviso la correspondencia, una carta del periódico el dominical, una carta de la junta mensual de los campesinos a la cuál asiste el señor Richard, una carta de madame Delacroix y un baúl donde se encontraba una caja, le quito la cinta y la abrió. - ¿Qué es esto? - Penelope abrió la carta de Genevieve.

Querida señora Ann Ferlington.

Espero que la llegada del nuevo inquilino a la mansión sea de lo más agradable, supongo que las noches deben ser duras pero todo vale la pena.

Como podrá ver esta vez le mando unos panfletos de "Lady Wishtledow" para que se ponga al corriente de lo que va pasando en la temporada, ahí podrá leer como se expresa la Wishtledow, he intentado mover mis influciencias para saber más, pero corro el riesgo de salir en ellos. - Penelope miro los panfletos. - No hay novedad de la colmena, muchos han regresado a Mayfair pues la temporada ya inició. Tengo trabajo de sobra pero siempre tengo tiempo para escribirle a mi amiga, le envío unos vestidos a la señorita Sarah y unos cuantos a usted.

¿Usted tiene idea de quién podría ser?

Con mucho cariño,

Genevieve Delacroix.

Penelope tomo asiento en su silla de cuero y empezó a leer los folletos, estaba furiosa alguien estaba usando su nombre, su folleto, su seudónimo para beneficio propio y eso es lo que ella temía, alguien la estaba usurpando.

Eran unos seis folletos, Penelope estudio las fechas, fueron lanzados un mes después de iniciar la temporada, estaba muy molesta y no podía hacer nada. Tenia un bebé de tres meses, una mansión, empleados y más cosas que atender.

Ella ahora tenia otras prioridades y pensando con la cabeza fría, la persona que se hacia pasar por ella, podía ser descubierta y ella ya no se vería envuelta en nada que tenga que ver con "Wishtledow" pero no era justo que alguien se beneficiará de lo que ella construyo por años.