Parte 144

12 2 5
                                    


4 de agosto, 08:05 AM

El día finalmente ha llegado. No esperaba que fuera tan pronto.

Radio Apocalipsis se ha puesto en marcha de nuevo. Al igual que nosotros.

Mentiría si dijera que no me ha dolido despedirme, sobre todo de Sam.

Le gusta complicarlo hasta el último momento. (Sonrisa cariñosa).

Cuando nos reunimos todos para el amargo momento, parecía una reunión familiar y de amigos que se despiden normalmente.

Bromas, abrazos, apretones de mano, algún intercambio de regalos... Lo típico.

Pero con ella... (Suspiro añorado).

Ella es puro fuego, pasión autentica.

Nunca pensé que volvería a escribir algo así de otra persona, y menos en estos tiempos.

Cuando todos se dirigían a sus vehículos, y nosotros a nuestras monturas. Sam me agarró suavemente de espalda de la camiseta.

Me giré sorprendido para ver su rostro, dibujado con una mezcla de timidez y tristeza.

—¿Sí? —Le pregunte intrigado.

Mordiéndose con gracia el labio inferior, se lanzó hacia mi repentinamente fundiéndonos en un último beso delante de todos, que nos miraban boquiabiertos y sorprendidos.

Al separarnos ella sonrió con fuerza apoyando su frente contra la mía mientras sus brazos rodeaban mi cuello.

—Cuídate. —Me susurró.

Y antes de salir corriendo hacia una de las camionetas, sus labios volvieron a rozar fugazmente los míos con un último beso de apenas una fracción de segundo.

Me quedé ahí de pie mirando como se iban mientras mis compañeros esperaban detrás mío.

—Vamos muchacho. Nosotros también nos vamos. —La voz de Claus me saco enseguida de mi trance.

Con una última mirada hacia atrás, monte sobre Trueno, y a paso lento pero decidido abandonamos el castillo de Burgos.

Estos tres cotillas no han parado de preguntar que pasaba con Sam. No les he querido contar mucho.

Que sigan pensando que soy un sieso. (Me rio para mis adentros).

(Suspiro profundo). Pero ahora enserio, de toda la conversación hay una pregunta que Claus me ha hecho y a la que no he podido evitarte dar vueltas.

—¿No te sentiste tentado de quedarte con ella?

Mi respuesta solo fue encogerme de hombros, pero en verdad...

Para ser honesto en otra época no me hubiera importado salir tras ella a lomos de Trueno sin importarme el resto. Solo ella y yo. Puede que todavía lo desee.

.... ............. ..................................

Joder, que cursi suena eso.

Siendo sincero conmigo mismo, sé que este puede ser el error más grabe que he cometido, de esos de los que quizás no vivas lo suficiente como para enmendarlo. Pero aun así lo asumo.

Sam, ojalá volvamos a vernos.

Apocalipsis Z: CaosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora