Cap 57 Situación Fuera de Control.

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Dos días después:

Reportero: —Muy buenas tardes. Estamos aquí presentes en el noticiero global. Natty vamos contigo.

Reportera: —Gracias Gabriel. En vivió y directo desde el "almacén Caribe" Donde se ha reportado el aparente asesinato de dos víctimas. Y es que debido al descontrol en las calles últimamente, es recomendado salir protegidos de casa. Vamos contigo Gabriel.

—Últimamente han sucedido muchas cosas en el país. Hay que recordar el tiroteo que hubo hace unas semanas. El caso en la iglesia padre de dios. El imprudente movimiento extraño reportado en las afueras del país es un momento de tensión que ha dejado preocupado a la ciudadanía.

Reportero dos: —Así es Gabriel. También han sucedido muchas cosas desde hace tiempo. Las bandas de la mafia han vuelto al territorio californiano. Usted familia que está viendo esto en estos momento, por favor resguárdese en su casa. Y no se alteren, la policía y la FBI están resolviendo este caso nuevamente.

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Pamela toma el control y apaga la TV. Toma asiento junto a Christopher y Santiago.

—Habla ya. ¿Qué hiciste?

—. La mate—confieso.

...

—¿Qué? —suelta.

—La mate. Ya me oíste... Y sí, lo disfrute.

Santiago se levanta de golpe y camina hacia mí. Sus ojos emanaban una oscuridad, un enojo como nunca antes. El brillo en ellos era notorio, pero de dolor—. ¡¿Por qué?! —pregunta entre dientes.

Me pongo en pie y lo miro fijo a los ojos sin sentir remordimiento—Te dije que cuando te hiciera daño. No me quedaría de brazos cruzados.

Santiago la toma con firmeza de los hombros a su hermana—Yo pude encargarme de ella. No tenías por qué matarla.

—Tuve muchas opciones para hacerlo. No solo aparentaron ser algo más. Se metieron con lo que de verdad aborrezco que lo hagan. Mi familia.

Él se da la vuelta, pero antes la suelta un poco brusco, haciendo que pierda el equilibrio y casi caiga.

Christopher se apresura y evita que se haga daño. La sienta en el sofá y se acerca a Santiago.

Coloca su mano en su hombro y este se da la vuelta—. Es tu hermana con la que estás hablando, no una extraña. Así que bájale a tu ira si no quieres que te parta la cara de inmediato.

Santiago lo mira serio sin decir nada y aparta la mano de Christopher. —¿Dónde está?

Me encojo de hombros—No sé.

—¿Cómo que no sabes? En las noticias no sacan ningún cadáver pero si mencionan el asesinato.

—Alguien se encargó de desaparecerla. Ya no es mi problema.

—No tenías que hacer eso. Tú no puedes convertirte en una asesina como él—señala a Christopher.

Me levanto y lo enfrento—Si es necesario mancharme las manos de sangre. Lo haré—lo tomo del cuello de la camisa—Si es por mantener el orden y el honor de mi familia.

Lo miro sin despegar la mirada de sus ojos oscuros. Él me toma de los hombros. Siento como me lastima por lo fuerte que sus dedos apretaban mi piel—Ya te volviste loca—mira a Christopher—¡¿Qué mierda le metiste en la cabeza?!

Christopher noto el fuerte agarre que tenía Santiago en mí. El coloco su mano en la de él—. Suéltala.

—No te metas.

—Suéltame Santiago me estas lastimando.

—Te vienes conmigo Pamela. No te dejare con este tipo.

Christopher dio un apretón a la muñeca de Santiago y en un movimiento rápido la doblo causándole un dolor.

Esta suelta a Pamela y Christopher sin más llevo su mano a su cuello, lleno de furia.

—Es la última vez que la maltratas—lo suelta y le da una cachetada.

Pero Santiago no se queda de brazos cruzados y decide devolverle el golpe.

Solo que. De pronto me miro y bajo el brazo. Se acerca y me lleva con él a la fuerza.

Christopher la sostiene del otro brazo. Da un leve tirón hacia él—Ella se queda conmigo.

El hermano la suelta y se acerca a Christopher desafiándolo. Le da un empujón en el hombro.

—¿Sino que? Ella no te pertenece. No es un objeto. Es mi hermana y si pienso que eres una mala influencia para ella es porque lo eres.

Christopher se carcajea un poco—No tienes idea de lo que pasa por esa cabeza perversa. Se ve tierna... Sí, porque no. Pero ella piensa incluso peor que yo.

Le devuelve el empujón sin dejar de mirarlo.

Tomo la camisa de él. Me mira de reojo—Déjalo, no sabe lo que hace—le digo para que baje la guardia.

Pero eso no le importo a Christopher—Sabes muy bien lo que haces. No eres un niño. Sé que piensas que yo fui la cabeza del plan de tu novia. Sé que me odias... Pero si algo no tolero, es que toquen "ce qui est à moi" (lo que es mío).

Me meto entre Christopher para intentar detenerlo, porque si algo no me daba buen presentimiento. Era que estuviese tan tranquilo—Ya. No le tomes importancia, sí.

El coloca su mano en mi hombro y con su pulgar acaricia un poco mi cuello—"Mon amou"—(Mi amor).

—¿Qué babosadas ahora está diciendo?

Christopher deja de mirar a Pamela para dirigirse a Santiago y darle un golpe a puño cerrado en la cara—No la vuelvas a tocar.

—¡Christopher!

El me mira serio sin decir nada. Voltea a ver a Santiago quien quedó atónito del golpe.

—. ¿Qué paso aquí? —interroga Cristián entrando a la casa—Ha y la puerta estaba abierta.

Salgo de la casa y llamo a papá. El entra y lo llevo a la sala.

—Puedes llevártelo antes de que salga muerto de aquí—le digo, refiriéndome a Santiago.

—¿Qué paso? —interroga el padre.

—. Se enojó y le hizo daño—me toma el brazo y señala la sombra un poco rojiza—Solo la protegí, que agradezca que sigue vivo.

—¿Por qué no tratan de llevarse bien? —aconseja Jonathan un tanto estresado.

—Eso será difícil—comenta Cristián.

—Ambos se detestan. Es algo que tendremos que evitar—le doy un beso en la mejilla para que se le baje el enojo.

Me acerco a papá y lo abrazo y luego a Santiago. El... No me abraza pues sigue enojado, pero ya se le pasara.

—Cuando estés libre de enojo hablamos—le digo.

Ellos salen de la casa y solo se escucha el arranque del auto cuando se marchan.

Miro a Christopher y luego a Cristián... —Perdón por eso, él es... Un poco... ¿Cómo estas Cristián? —cambio de tema.

—Bien. Vine a ver si las cosas estaban en orden y ya veo que sí y no—sonríe...

LA MAFIA A MIS PIESDonde viven las historias. Descúbrelo ahora