Gedeon Korrat
La casa de Dimitri se ha vuelto el refugio para todos cuando llegó me recibe Olivia.
—Pasa adelante —tiene una voz tan suave, casi sumisa.
—Gracias, ¿Está Dimitri?
—Si, está con el señor Tadeo en la sala y Vegoña.
Asiento mientras nos dirigimos allí, al entrar al lugar Vegoña está junto a la esposa de Tadeo, quien tiene una niña cuyos ojos son idénticos a los de su padre, Tadeo y yo no somos muy intimos pero durante estos años nos hemos topado un par de veces.
—Gedeon que bueno verte —se levanta del sillón y me da un abrazo corto.
—Igual me alegro de verte, lastima que sea en estás circunstancias.
—Si, esto ha sido una mierda totalmente—Su esposa me saluda con un gesto una sonrisa que yo le devuelvo.
La castaña se siente que es alguien amable, tiene ese toque dulce que muy pocas personas dan a primera vista.
—¿Dónde está Varvyra ? —Vegoña está poneidnose cada vez más redonda y malumorada.
—No lo se ¿No está aquí? —toda esperanza se esfuma en mi, había albergado la esperanza de que esto fuera presión, Pero si no pasó la noche aquí, la paso con Silas.
—No pensábamos que estaba contigo.
—Seguro está con Silas.
—¿Quien es Silas?
—Un senador Tadeo que puede ser que nos ayude a sacar a Kanat y Dominic de la cárcel.
—Presentamelo, me gustaría poder ayudar Gedeon.
—No lo conozco lo suficiente para eso, pero podrías decirle a Varvyra cuando regrese a casa.
Digo mientras observo por el rabillo del ojo a Ámbar pasar hacia una habitación, Olivia a desaparecido que mujer más rara y Dimitri no está aquí.
—Si me disculpas necesito hablar un momento con Ámbar.
Digo sin esperar respuesta, corro a la habitación, tocó y espero que me dé permiso, cuando entro está recostada en la cama, sus ojos mirando al techo, y suavemente se escucha una melodía.
—Te traje esto —saco de mi chaqueta el chocolate que tiene un bebé en el envoltorio —. Se que te gustan mucho.
—Los amo, gracias Gedo —sus ojos grises están enrojecidos como si hubiera estado llorando antes.
—Pronto tendrás a Dom contigo Am.
—No lo se Gedo, tengo tanto miedo de que no pueda salir, no se que hacer sin el, lo extraño tanto, todos estos años hemos estado construyendo esto, sabes solíamos hacer todas las semanas una cena especial, en ese momento lo dedicamos a decirnos cosas que nos gustaron del uno al otro en la semana, solía abrazarme para dormir, me compraba de estos.
—Lo siento, yo solo quería ...
—No no te preocupes de verdad me alegraste el día, solo que lo extraño mucho.
—No pierdas la fé , ya tu cuñada está haciendo de todo para traerlos de vuelta incluso venderse.
—¿De que hablas?
—Varvyra se acostó con Silas el senador para traer a sus hermanos de regreso.
Ámbar se levanta de la cama y me queda mirando como si me hubiera salido otra cabeza.
—No ella no haría eso, no creeme la conozco —yo también pensaba que la conocía.
—El imbécil me envió una foto de ella en su cama y fui a verla, no lo negó, solo lo confirmo.
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Peligrosa Audacia
Teen FictionVarrvyra Chein ha pasado años amando cada parte de Gedeon Korrat, cada minúsculo gesto. Hasta que de repente el empieza alejarse de ella, tanto que incluso su mera presencia lo hace salir huyendo. Algunos corazones son fuertes y duros, otros son bla...