Extra 5: Escapar (4)

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Subestimar a Matthieu fue error de Roberto. El hombre, no por nada, era el secretario en jefe, y la sombra, detrás de Antares, quedando en claro al presentarse, impoluto, a su cita en la cafetería, atajando la intención del periodista de hablar y poner en la mesa lo ocurrido la noche anterior. Una jugada cuyo objetivo era que Matthieu le cediera, desde la diferencia que pretendía establecer en la vergüenza que vio en su rostro durante la madrugada, la ventaja.

Y el corte a su movimiento lo hizo con elegancia, deslizando bajo sus narices un contrato, en el que detallaba con una exactitud milimétrica los términos de su colusión frente a Bang Joel, agarrándolo del cuello con la amenaza de informar a Zixy sus actividades poco profesionales mientras él estaba en un estado inconveniente, lo cual era fácil de comprobar por las cámaras de vídeo del hotel, en las cuales se evidenciarían los tragos que Matthieu tomó y la ausencia (aparente) del mismo estado en Roberto.

La impresionante vuelta que le dio a la situación, dejó a Roberto fuera de combate, obligándolo a firmar en un estado de adormecimiento del que salió al marcharse el secretario, dejando en sus manos una copia del papeleo, con el que se cubrió el rostro y soltó una risa larga.

Tras preguntarse hasta el cansancio qué hacer acerca de "Girard", y pasar de la incomodidad a la malicia de arrinconar a Matthieu, ser ahora el atrapado por quien creyó sería su presa, y a quien originalmente se dispuso a ayudar para saldar una cuenta de la que ni siquiera el secretario era consciente, resultaba extrañamente refrescante.

Jalando aire aterrizo en la claridad de sus sentidos, leyendo con detenimiento lo firmado sin pensar, agradecido de haber escogido esa hora y ese café, que no tenía muchos ojos interesados en apuntar a un par de extranjeros, y menos a uno solo.

Los términos y condiciones del documento lo hicieron fruncir el ceño, lamentando su falta de compostura al aceptarlos.

Según lo estipulado, se verían durante las cenas publicas que Antares y Zixy ofrecerían en el Hotel Amabassador, que fungía de centro de operaciones para cerrar los primeros tratos, esos días. Compartirían mesa, se tomarían las manos, de ser ABSOLUTAMENTE necesario, sin besos, y ocuparían apodos cariñosos que se presentarían únicamente frente a Bang Joel. Hablando de Bang Joel, se anexaba un documento con los horarios acordados con K&B, para que Roberto hiciera de "corresponsal", aclarando que Matthieu habló con el representante de Zixy para permitirlo.

-Sí que es meticuloso -lo elogió con una ceja en arco, recogiendo sus cosas, repasando el resto en su mente.

El contacto físico debía ser mínimo y las interacciones posterior al horario laboral, estaban prohibidas. Las habitaciones estaban vetadas, y cualquier intento de Roberto por tratar de ir a buscarlo a su cuarto, incurriría en una falta que facultaría a Matthieu para enviar a Zixy su queja y las pruebas.

Sin embargo, aunque el contrato parecía hecho para proteger el secreto sobre su "desliz", Roberto se tuvo que pasar un trago de bilis, desenmascarada la realidad, en la última línea de las "prohibiciones".

Aceptar que se acostó con un hombre sí, era vergonzoso para Matthieu. No lo suficiente como para justificar la acción legal por un par de días de fachada. Lo que estaba haciendo el secretario con el contrato, no era mantener en secreto su noche apasionada, sino usar eso de excusa, para alejarlo de lo importante:

"No volverá a mencionar el nombre de Girard".

El orgullo de Matthieu no valía, contra su deseo de proteger...

Entrando al hotel, yendo a la sala de reuniones donde se reunirían Bang Joel y Matthieu, mostrando su identificación para que el encargado le diera acceso , Roberto se tuvo que corregir al abrirse la puerta.

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⏰ Última actualización: 5 days ago ⏰

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