NEVER SAY NEVER (Nunca Digas Nunca)

Capitulo 3.

Llego a donde Seattle Hell y me adentro a donde la gente.

Comienzo a quemar rueda contra el suelo.

-HEYY!chicos, la rubia está aquí.- gritó Alexia.-¿Viniste eh?- Se acercó a mí.
-Claro , quise traer a Britanny pero dijo que pasaba. No sabe lo que se pierde.-rei, mientras me quitaba el casco.
-Si la verdad- Rió.- Que...¿Te apuntas a la carrera de hoy?- Me guiñó un ojo.
-Pues...-pero alguien me cortó.
-Hombre...la rubia está por aquí, cuanto tiempo- Dijo Aaron acercándose  a mí.
-Venga ya, hace que no vengo un día solo, no arruines el momento Aaron.-le di un beso en la mejilla.
-Hoy repetimos?- dijo coqueto.
-No, la verdad me duele la cabeza- Ice como si me dolía poniendo la mano en ella.- ¿Corres hoy?- me reí.
- Si, tú?
-No se , que se apuesta?- Pregunté.
-Eso lo arreglo yo ahora.- Saltó Alexia.

Se dirigió a donde estaban todos.

-Chicos, que apostais hoy por la carrera? Participantes Ashley, Aaron, Jon y Bea.

*¿Solo los cuatro? Esto está pan comido*- pensé.

Le guiñé un ojo a Aaron y este me devolvió una sonrisa.

Aaron, un chico moreno de 17 años. Era gracioso, divertido, y era el mas juguetón. Era guapo, y mas cuando se ponía coqueto.
Por si lo preguntáis, si, me he acostado con él pero solo una noche. Estábamos de fiesta y yo me aburría. Así de sencillo.

-Yo apuesto por Ashley.- Gritaba un chico.
-Yo por Jon- gritaba otra.

-Yo por la rubia mas mala del planeta- esa voz...la recuerdo...era...
-Steven!-Reí.

Steven era un chico rubio muy guapo de 18 años y la verdad era el mejor amigo que había tenido y luego llegó Aaron. Yo siempre le acompañaba en las carreras de parejas. Ya que éramos por así decirlo...los mejores.

-Hoy no corres tú?- le pregunté abrazándole.
-No, bueno ya corrí, y ¿A que no sabes qué?
-¿Que?-me reí cuando me tocaba la mejilla.
-Gané, te lo puedes creer?
-Reí- No me digas...que raro. Y no me acaricies la mejilla, sabes que no me gusta.
-Pero si te gusta otras cosas que te hago...-me susurró en el oido.

Yo le empujé y reí.

-Bueno que empiece la carrera.- Gritó Alexia.- Quien gane, se queda con el dinero que la gente haya apostado.

*Dinero...siempre dinero...ya cansaba. ¿Porque no decían que quien ganase se podía tirar a quien quisiera?*-pensé.
Me dirigí a la moto me monté encima y conduje hasta la zona de salida.

-Preparados?

Arranqué la moto y me coloco el casco.

-Listos?

Puse la marcha.

-Ya!

Empecé a correr. Delante mio estaba Jon y detras Aaron y Bea.
Tenía que adelantar a Jon como pudiese.
Llegamos a la primera vuelta y no lo conseguí pero a la segunda lo hice. Lo pasé. Estaba la meta a pocos metros.

-Ashley!! bien!!- Gritaba la gente que había apostado por mí, y la demás se quejaba.

Bajé de la moto y reí. Me acerqué a Alexia.

-No quiero el dinero.-le susurre.-Ya estoy algo cansada de siempre ganarlo.
-¿Que?-abrió los ojos- ¿y que hacemos?
-Gastalos para comprar flores y velas para los muertos. Todavía hecho de menos a Susan.
-Ya, todos la hechamos de menos...-Agachó la cabeza.-Pero bueno, ahora has ganado, y vamos a celebrarlo.

Asentí y me encaminé hacia Steven.

Susan fue una de mis mejores amigas, ella ya hacía 5 años que competía en las carreras, hasta una noche que se le giró la rueda y cayó dándose en la cabeza hasta matarse. Esa muerte me hizo cada vez más seguir aquí. Diréis... ¿Eres tonta?¿ya sabes que puedes morir y aun así vas?
Pues si, me siento segura allí. Ya había muerto mucha gente por culpa de las carreras y les teníamos en una parte del terreno como un muro con sus fotos y objetos personales, donde poníamos velas y flores.

-¿Quienes son los mejores?-le sonreí a Steven y éste me devolvió la sonrisa.
-Quienes van a ser...- se río y me cogió por la cintura y me levantó.
-Por la reina de Seattle Hell!!-Gritó.

Hacía ya 3 años que había entrado aquí y es que las motos y las carreras clandestinas formaban parte de mi vida. Así que me pusieron ese mote de "reina de Seattle Hell" porque pude derrotar en una carrera a Logan, el mejor hasta ese momento.

Se oía la música y la gente bailando, bebiendo, fumando...
Siempre celebrábamos así los días que se celebraban carreras. Bueno eran casi todos los días.
Yo estaba bailando con Aaron, Alexia y Steven.

-Aslhey vas a ir a acabar el año?-preguntó Aaron.
-Si, me obligan. Aunque bueno alguna vez me iré. Paso de aguantar a profesores toca huevos, que dan mierda en vez de enseñanza educativa.¿Tú?
-Yo si, quiero acabar para ir a hacer un modulo de electrónica.-me contestó.
-Yo a ver si monto el salón de Tatuajes.- Otro vicio mío, los tatoos. Tenía ya 5, uno en la muñeca, otro en la ingle, otro en el cuello, en el tobillo, y el último en zona secreta...- Porque paso de ser una empresaria como mis padres.
-Ya , tienes suerte de tener tanto dinero.-dijo Alexia.
-Eso es mentira, es una mierda. Mis padres nunca están en casa , y no te quieren lo suficiente.

Saqué el móvil del bolsillo y vi la hora, las 21:40 debería llamar a casa...y avisar. Pero unas manos me lo prohibieron y sentí como unos labios chocaban contra los míos.

Nos separamos y vi que era Steven que me miraba juguetón.

Ya me había acostado varias veces con él. A mi me gustaba como me hacía sentir y a él lo mismo.
Motos, alcohol, sexo...era lo que hacía.