CAP. 61. MI PEQUEÑA.

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El avión por fin había aterrizado, todo bajamos rápidamente de él, tomamos nuestro equipaje y tomamos un taxi.

Seguía sin dirigirle la palabra a ninguno de los chicos, mi enojo ya había pasado, medite la situación y estoy dispuesto a perdonarlos pero todo a su tiempo.

Y entonces por fin llegamos, a un hospital, sí un hospital de lujo, me hubiera gustado ir directo a casa de ______ y llenarla de besos y caricias pero mi realidad era otra, ella en estos momentos está... está bueno eso no importa pronto todo estará bien.

Baje del taxi como alma que lleva el diablo y justo cuando estaba por poner un pie dentro, una mano dura y fuerte me lo impidió.

Bill: ¡¡¿Qué?!! Pregunte molesto.

Tom: Espera... Los papás de ______ no saben nada.

Bill: A mí eso no me importa, ya no más mentiras ni nada, cuando llegue el momento diré toda la verdad.

Tom: Si pero Bill...

No deje que me explicara nada, me zafe de su agarre y entre al hospital, una vez ahí me dirigí a la recepción y me encontré con una chica de mediana edad. Me quede ahí un momento para ver si ella se percataba de mi presencia pero seguía con la mirada fija en su computador.

X: Si joven, buenas tardes.

Y entonces por primera vez dejo lo que fuese que estaba haciendo para toparse con mi rostro.

Escuche un wow por parte de ella y yo sonreí ligeramente.

X: Usted, usted es.

Bill: Hola, Si soy Bill Kaulitz, extendí mi mano y ella automáticamente se puso colorada.

X: Hola me llamo Cinthia.

Bill: Mucho gusto, disculpe estoy buscando a ______.

Cinthia: Ah! La chica del bebé.

Bill: Sí, eso parece.

Cinthia: Sí, ella se encuentro en la habitación 8, al fondo a la derecha.

Bill: Muchas gracias.

Dirigí mi pasos hacia esa dirección y cuando pase por la sala de espera una familia que supongo es la de mi pequeña me miraba atónita, claro no me detuve a saludar, mi objetivo era entrar a verla.

Antes de abrir la puerta el doctor apareció.

Doctor: Buenas tardes joven.

Ah genial porque no podía solo pasar.

Bill: Buenas Tardes.

Doctor: ¿A quién busca perdón?

Bill: A ______.

Doctor: Y usted es?

Bill: Soy su novio.

Doctor: Un segundo debo informar a la familia.

El doctor se dirigió a la sala de espera, pero yo no estaba dispuesto a esperar, así que me introduje en la habitación sin permiso.

Entre con paso lento, mi respiración estaba entrecortada, mis piernas me temblaban y una sonrisa boba apareció en mi rostro, todo esto es lo que provocaba aquella chica, hermosa, única y muy especial.

Esto me recordaba a la primera vez que la vi, cuando fui yo quien la mando al hospital, de ahí partió nuestra historia.

Entonces me topé con su rostro, estaba igual de hermosa como la recordaba, hace tanto tiempo que soñé con este momento, su rostro estaba un poco pálido, pero sus labios gruesos, rojos y carnosos estaban resplandecientes, sus ojos cerrados, su cabello despeinado caía en la almohada y sus manos estaban relajadas a cada extremo de su cuerpo. Recordé los días a su lado, cuando al despertar ella se encontraba a mi lado, hermosa y con su respiración tranquila, sus manos posadas en mi pecho. No pude más volví a romper en llanto, ¿Cómo es que todo eso se había esfumado? La extrañaba tanto y en este momento ella era todo lo que necesitaba, aquel vació en mi pecho por fin sano al verla.

Toque su rostro como si fuera una rosa frágil que estuviera a punto de marchitarse, volver a sentirla hacía que mi corazón palpitara como un loco, mis lágrimas caían en su rostro.

Pequeña, mi pequeña ______, amor, no sabes lo mucho que te eche de menos, te amo tanto, cariño, ya estoy aquí, tranquila, todo estará bien le susurraba con voz entrecortada.

Tome su rostro en mis manos y por fin después de mucho tiempo uní nuestros labios en un beso, no me importo que ella no me lo correspondiera, solo quería que este momento no fuera un sueño y deseaba, anhelaba que ella despertara.

Cuando me separe de ella, sentí remordimiento al recordar que estuve a punto de tener sexo con Saray pero pensé que todo esto jamás llegaría, si tan solo los chicos me lo hubieran dicho, pero eso ya paso, y por suerte Tom llego justo a tiempo.

Me senté al borde de la cama sostenido su mano en la mía, y enlazando nuestras dedos como solíamos hacerlo.

Escuche la puerta abrirse y unos pasos dirigiéndose a mi encuentro.

X: Joven debió esperar afuera, ya he hablado con la familia y al parecer ellos no saben por qué está aquí.

Giré mi rostro para encontrarme con aquel hombre que amenazaba con sacarme a patadas de aquí, pero hiciera lo que hiciera no lo iba a conseguir, no estaba dispuesto a dejar a mi pequeña.

Bill: No claro que no, ellos no saben nada aún.

Doctor: Por esa razón debe ir y explicar la situación tengo órdenes estrictas de prohibir las visitas a extraños comprende?

Bill: No pienso moverme de aquí comprende?

Doctor: Esto se está volviendo complicado joven y me veré en la penosa situación de llamar a seguridad.

Bill: Haga lo que quiera me importa una mierda.

Doctor: Joven!! Ese vocabulario no está permitido.

Solo lo ignore y volví a toparme con el rostro dormido y tranquila de mi chica.

Escuche como el Doctor avanzaba hacia mí, y seguido tomo mi brazo y jalo de él.

Doctor: Por última vez salga de aquí.

X: Esta bien Doctor él viene con nosotros.

Voltee mi rostro pues esa voz me resultaba familiar, y entonces me topé con la mirada de Lizy, ella también me debía muchas explicaciones.

Doctor: Elizabeth, sé que tú eres amiga de ______ pero este joven.

Liz: Si le repito él y los otros 3 chicos vienen conmigo.

Doctor: Cuales 3 chicos?

Llegaron entonces Tom, Gustav y Georg detrás de Liz.

Doctor: Y estos quiénes son? No recuerdo haberlos visto antes.

Tom: Somos amigos de ______.

Doctor: A ustedes no los recuerdo, solo a otros tres chicos pero ellos, lucían diferentes.

Tom: Mire Doctor cómo le explico.

Entonces el doctor hizo una mueca y comprendió la situación.

Doctor: Ustedes son los otros chicos cierto, venían disfrazados?

Tom: Sí así es.

Doctor: Y por qué?

Tom: No hay tiempo de explicaciones de acuerdo.

Doctor: Bien, entonces ese chico es novio de la paciente?

Tom: Correcto.

Doctor: De acuerdo.

El doctor salió de la habitación y el silencio volvió.

Bill: Les pido a todos que por favor me dejen a solas con ______.

Ninguno contesto solo escuche como los pasos se perdían conforme avanzaban y después el ruido de la puerta al cerrarse.


Un Sueño InalcanzableDonde viven las historias. Descúbrelo ahora