Harry
Cajas, valijas, ropa en el sofá, en el piso, en la mesa... Mi departamento se ha convertido en un verdadero desastre.
Al finalizar el partido de fútbol, le he pedido a Louis que se mude en ese instante, porque no quiero esperar ni un segundo más. Fuimos a su casa y recogimos todo lo importante, pero resulto ser que no entraba nada en el coche de Liam, así que tuvimos que pedir refuerzos. Su amiga Lydia llegó al rescate con su auto y logró guardar la mayoría de las cosas. Pero era tanto que realizamos tres viajes para poder recoger absolutamente todo.
Colorada, llena de gracia y vida, con una sonrisa contagiosa y brillante, no le dio más remedio a Niall que dejarlo estúpido. Apenas la vio su mandíbula cayó al suelo. Se acercó a ella y no volvió a separarse. En todos los viajes a la casa de Louis para recoger cosas, se metió en el auto de Lydia sin pedir permiso, pero la chica no parecía para nada disgustada.
Observo la situación que se está llevando a cabo en este preciso momento, y no puedo evitar reír. Liam desarma las cajas muy entusiasmado, Louis a su lado dobla la ropa de manera desprolija y los otro dos no hacen absolutamente nada. Lydia está sentada en el piso con sus piernas cruzadas y una taza de té en la mano. Niall, acosador, sentado a unos centímetros de ella, observa embobado como habla y da pequeños sorbos a la taza. Me acercaría, le daría un golpe en la cara a Niall y rescataría a la pobre chica, pero parece que ella está disfrutando de la situación. La verdad es que hacen una muy linda pareja.
—Harry, podrías ayudar, ¿no?— dice Louis observando mi posición. El piso frío está cómodo y no tengo intención de levantarme. Recostado contra la pared, niego con la cabeza y me muestra su dedo del medio.
—Estoy cansado— respondo mirándolo.
—¡Pero si no has hecho nada!
—¿Cómo que no? Trabajé la mitad del día y fui a un aburrido partido, estoy agotado.
—Bueno, si esto te jode tanto ¿por qué me pides que viva contigo?
—No dije que me joda, vamos Louis, no seas un idiota. Simplemente estoy cansado. Dile a esos dos que ayuden, tampoco están haciendo nada— hablo señalando al rubio y a la pelirroja.
—Pero tú eres el dueño del departamento, aunque sea podrías...
—¿No llevan ni dos horas viviendo juntos y ya pelean?— interrumpe Liam tirándole un pantalón en la cara a Louis. —Si serán idiotas.
Louis lo mira enojado haciendo un bollo con la prenda de ropa. Lanzo una carcajada y me mira con odio.
—Deja de mirarme con esa cara, pareces un enano diabólico.
—Cierra la boca— dice mientras se levanta del piso con rapidez. No se tambalea ni demuestra esfuerzo alguno. Lo observo sorprendido por su acción. Es increíble que ya sea capaz de caminar, sólo depende de él el soltar las muletas para siempre.
Observa sus piernas y esta vez no pierde su seguridad, al contrario. Comienza a caminar sin las muletas ni el apoyo de ningún objeto. Sus pies resuenan contra el piso y parece un niño aprendiendo a caminar por primera vez. La sala queda en completo silencio y todos lo observan, mientras él se acerca a mí.
—Oh por Dios— dice Lydia sorprendida. Niall asiente hacia ella como asegurándole que lo que está viendo es real.
Incrementa la velocidad de sus pasos y yo no me muevo. Lo observo desde el piso y no puedo evitar sonreír. Mis ojos se humedecen por la emoción, porque por fin mi amor está caminando sin ayuda. Se acerca a mí y queda parado a unos centímetros, observándome desde arriba. Me pongo de pie con rapidez y, cuando estoy por darle un abrazo, me pega una cachetada muy sonora.
ESTÁS LEYENDO
Keep me safely | Larry Stylinson
FanfictionUno crece escuchando "debes perseguir tus sueños" pero... ¿Eso asegura la felicidad absoluta? Un trágico accidente nos unió, pero nuestros sueños terminaron con todo. Yo no me había dado cuenta que en realidad él siempre fue mi sueño. El destino fue...