Keep me safely | Larry Stylinson

Capítulo 28

Harry

El piso es un mar de ropa. Remeras de todos los colores y camisas de todos los tamaños. Zapatos míos demasiado grandes para él, y zapatillas Adidas demasiado informales para la ocasión. Ya es sábado y tenemos que asistir a la presentación del libro de Liam. Recostado en nuestra cama observo la desesperación de Louis.

—No puede ser que no tenga un puto traje— grita por décima vez y me río de nuevo.

—Aunque sigas metiendo la mano dentro del armario, no vas a conseguir que aparezca uno mágicamente— hablo mirándolo revolver todo el ropero como un loco.

En la mesa de luz vibra mi teléfono. Lo tomo y veo un mensaje de Niall.

"¿Qué se van a poner?"

A veces pienso en si Niall tendrá una cámara en mi habitación.

"No lo sé. Louis está en crisis y yo también debería estarlo. No tenemos un puto traje"

Tipeo con rapidez y espero una respuesta que nunca llega.

—Harry, ¿en dónde podré conseguir ropa elegante a esta hora?— pregunta mientras se voltea con sus manos en el pelo.

—En algún shopping. Pero se hará tarde, no hay manera de que podamos comprar y llegar a tiempo.

Suspira y camina enojado hacia la cama. Se tira con fuerza arriba mío y me roba el aire cuando golpea mi estómago.

—Liam me matará. Si voy mal vestido me va a acuchillar y si no voy jamás volverá a hablarme— dice con su rostro hundido en mi pecho. Subo una mano hacia su pelo y comienzo a acariciarlo.

—Tranquilo, ya encontraremos una solución.

La puerta de nuestro departamento suena y unos pequeños pasos se acercan a la habitación. Frunzo el ceño ante la sorpresa. Sólo Niall tiene mis llaves, pero claramente esos pasos no son suyos. Tres golpes delicados suenan en la puerta y Louis me mira extrañado, llevando la vista hacia donde proviene el sonido.

—Chicos, soy Lydia. Si están desnudos pónganse la ropa ahora porque entro en tres, dos, uno...

La pequeña colorada entra a la habitación con dos bolsas gigantes de color negro. Para su suerte, ambos tenemos nuestros bóxers puesto. Louis sale de arriba mío con rapidez y se sienta en el borde de la cama.

—¿Qué haces aquí? ¿Cómo entraste?— pregunta Louis.

—Ayer alquilé unos trajes para ustedes porque supuse que no tendrían. No me pregunten cómo, simplemente intuición femenina. Le dije a Niall y me aseguró que ya tendrían que ponerse, pero lo obligué a que les envíe un mensaje. Por supuesto, yo tenía razón— habla con rapidez mientras cuelga las perchas de las bolsas en el ropero y comienza a desabrochar el plástico.

—Y supongo que Niall te dio su juego de llaves— afirmo.

—Sip— contesta mientras termina de sacar la bolsa. Un traje celeste brillante, pero algo pequeño, aparece ante nuestros ojos. Lanzo una carcajada cuando Louis lo observa y niega con la cabeza.

—¿Es para Harry ese? Le irá un poco corto— pregunta Louis esperanzado por que la respuesta sea un sí.

—No, es para ti. Combina con el color de tus ojos.

Termina de sacar la segunda bolsa y es un traje negro con una camisa blanca. Louis abre su boca indignado y la observa enfadado.

—¿Por qué el de él no es verde? Mierda Lydia, no me pondré un traje celeste, no soy un puto muñequito de torta.