Harry
Los rayos de sol pegan sobre mi piel y siento el calor atravesarme. Sonrío hacia nada ni nadie, por el simple hecho de sentirme un poco vivo.
Mientras camino hacia el hotel, intento con todas mis fuerzas no mirar hacia mis costados. Trato de hacerme entender a mí mismo que no importa cuantas veces busque su presencia, él no está y no aparecerá por arte de magia.
No debería pretender acostumbrarme a que su cuerpo se encuentre fuera de mi habitación cada vez que salgo de ella. Desearía creer que no me importa pasar el tiempo con él, pero de esa manera no podría explicar el vacío dentro de mi pecho cuando salí del hotel minutos atrás.
Con una alita de pollo en la mano, decido que no puedo estar por las calles de Nueva York sin compañía, no lo encuentro entretenido.
La tarde en el Central Park fue algo que repetiría cada día de mi vida. No importa lo enojado que esté y el rencor que sienta dentro mío, el hecho de escuchar el lado de su historia me ayudó a unir algunas piezas del desordenado rompecabezas.
Intentó hacerme creer que el amor que me tiene no disminuyó en este tiempo, y sinceramente quiero creerlo. Porque aunque no lo quiera perdonar y trate cada noche de amarlo un poco menos, me hace bien saber que el sentimiento es mutuo.
Visualizo el hotel a lo lejos y la velocidad de mis pasos incrementan. Creo que el mejor plan para mi sábado será ver películas en Netflix en plena oscuridad, tratando de olvidar que afuera hay un mundo y existen personas con una vida social activa.
De pronto, como si el mundo se hubiera puesto en pausa, me quedo petrificado observando a quien no esperaba encontrarme jamás en este lugar. Mis piernas no se mueven y, cuando parece que van a funcionar para salir corriendo y esconderme, sus ojos se posan sobre los míos y me sonríe abiertamente. Mierda, no sé enfrentar esta situación.
—¡Harry!— chilla alegremente mientras corre hacia mí. Todavía no logro moverme.
No emito palabra alguna, pero no porque no deba hacerlo, sino porque no sé qué decir.
—¿Cómo estás?— pregunta y segundos después se percata de mi silencio. —Oh, perdón, que idiota. Me había olvidado de que no puedes hablar. ¡Se te ve bien!
Sí, bien, no sabes lo bien que estoy...
—Supongo que te sorprenderá verme aquí, pero necesitaba que hablemos. No tengo amigos y eres lo más cercano a eso que tengo. ¿Te importaría que tomemos algo?
Me encojo de hombros sin saber que responder. Si viajó desde Londres hasta aquí simplemente para verme, lo internaría en un manicomio por desquiciado.
—Traje una botella de vodka, vayamos a tu habitación.
Y sin dejarme responder, comienza a caminar hacia el hotel. ¿Cómo supo que estaba hospedándome aquí?
Dudoso, sigo sus pasos e ingresamos al lugar. Ambos en silencio tomamos el elevador y nos dirigimos a mi cuarto. Siento un nudo en mi estómago, los nervios carcomiéndome.
No puedo lidiar con Louis y ahora se presenta Derek en la puerta del hotel... Me quieren volver loco.
—Sabes, hay muchas cosas que quedaron pendientes entre nosotros... Creo que ya es momento de tener "la charla".
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Keep me safely | Larry Stylinson
FanfictionUno crece escuchando "debes perseguir tus sueños" pero... ¿Eso asegura la felicidad absoluta? Un trágico accidente nos unió, pero nuestros sueños terminaron con todo. Yo no me había dado cuenta que en realidad él siempre fue mi sueño. El destino fue...