Lamento De Lykos

Cuando se marchitan las flores en primavera

Solo he encontrado los cadáveres tiernos y frágiles de las rosas que adornaron nuestro amor, estaban esparcidos, como si hasta ellas se distanciaran de sí mismas; así como nuestro amor se distanció en un suspiro ahogado y carente de vida.

Camino entre los marrones pétalos de nuestro amor; marrones, pues perdieron su color, murieron, se suicidaron hartos de creer que adornarían nuestras mañanas juntos; se suicidaron cuando yo más ardía por vos, se rindieron en la primavera, no esperaron, y renunciaron en el inicio de su vida, no dejaron aquel dulce aroma que liberaba los sentidos y aceleraba el corazón, solo se dejaron caer, se esparcieron en la hierba, me dejaron sin un lugar donde soñar, me abandonaron, me enviaron de la apacible primavera, al crudo invierno.

Sigo aquí buscando las rosas que se quedaron sin saber qué pasó, sin entender por qué solo mi llanto les regaba; llanto que les marchitó.

Ahora busco una señal que me haga pensar que las rosas de nuestro amor no se marchitaron en primavera.