Indiferencia

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He buscado tu mirada en el anaquel de mis sueños, he invocado tu ausente presencia esta noche, he comprado el deseo de explorar con tu ser las praderas de la ilusión, que me produce tu reflejo, estacionado en mi habitación. He alimentado el prólogo de mis sueños con el deseo de encontrarte protagonizando cada uno de ellos. He entregado mi eternidad a los instantes en los que mi inmortalidad, se afirmó en tu sonrisa. He escrito cada silencio y he callado cada palabra, que flotaba en la mitad de los dos. He soñado con tu voz desde que se pausó en aquella despedida. He esclavizado mi vida, en la prisión que ha engendrado tu figura y la piel que la tapiza. 

He murmurado tu nombre al vacío de mi vida, y me he extasiado con el eco de tus recuerdos. He torturado mi cabeza con cada frontera que limita cruelmente la unión entre los dos. He alimentado esta ilusión con la ternura de cada palabra, que se desprende de tus labios, encarnados de pasión. He razonado con la locura que produce verte y hablarte, pero he terminado aniquilando mi cordura con la estela de fantasía, que deja tu caminar. He dejado de existir para el mundo, para simplemente ser para vos, y ahora sólo me entrego al escozor de la realidad, observando tu muy elegante indiferencia. 

Lamento De LykosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora