Capítulo Once.

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25 de diciembre, 2015.

Empujé la puerta de la habitación de la pequeña con cuidado, detrás de mí venía Alex, mi hermana, Emma y Kyle. Richard y Naomi, junto a mi madre en el piso de abajo esperando a que nosotros bajáramos.

Kyle se acercó al borde de la cama de Lucy y se sentí para inclinarse y presionar sus labios en la frente de la niña.

– ¡Feliz cumpleaños, princesa! – la pequeña abrió sus ojos y saltó de una a los brazos de su padre. Vio a Emma sobre el hombro de Kyle y salió del agarre de él para correr hacia la rubia.

¡Ma! – chilló a lo que Emma la alzó y comenzó a dejar miles de besos en el rostro de la pequeña.

– Vale, a mí ni me vuelve a ver. – se quejó Alex con los brazos cruzados. Su sobrina le dio una sonrisa antes de correr sobre su cama para acercarse a su tío.

Alex no tardó tres segundos en alzarla, llenarla de besos y cosquillas, las carcajadas de Lucy resonaban por toda la habitación, Emma tomó el celular que tenía Kyle para seguir grabando el momento.

La pequeña nos atacó a besos a los que estábamos ahí antes de correr escaleras abajo mientras gritaba que quería abrir los regalos. Seguimos los pasos de Lucy, aunque el sonido de un sollozo nos alertó a todos, Kyle apresuró su paso.

Cuando logré llegar a la sala Emma estaba sentada en el sillón con Lucy en su regazo abrazada a ella. La pequeña estaba llorando y balbuceando algo, la rubia acariciaba el cabello revoltoso de la princesa para que se calmara. En ese momento noté que los pijamas de ambas eran iguales.

– Yo no quise hacerla llorar. – vi a Alex acercarse a su madre y abrazarla, Naomi tenía su mirada fija en su nieta. – Solo le dije que desayunáramos primero y luego abríamos los regalos. Quizás el tono de voz que usé no fue el correcto.

Alex rió por lo bajo y besó la cabeza de su madre.

– Sabes lo consentida que es Lucy, mamá. – le dijo Alex aun riendo. Ella asintió sin quitar su puchero.

– Naomi no hagas un drama de esto. ¡Hay crepas para desayunar! – Lucy levantó su mirada, Emma limpió el rastro de lágrimas de las mejillas de la pequeña y la ayudó a bajar de su regazo. – Sí, princesa. Tus favoritas.

La castaña agrandó su sonrisa, en sus pestañas aún había algunas lágrimas por lo que se veían brillantes.

Naomi se agachó para abrazar a la pequeña, por un momento la niña la ignoró hasta que Kyle la riñó con que si no disculpaba a su abuela no habría regalos.

***

– ¡A poner la estrella! – Lucy chilló emocionada y levantó sus manitas para que su padre la alzara.

Kyle levantó a su pequeña hasta lo más alto del gran árbol, la niña se estiró para llegar a la punta y colocar la estrella, aplaudió emocionada una vez que lo logró, su padre la volvió a dejar en el suelo después de besar sonoramente la mejilla de Lucy.

¡Regalos! – sentí una mano pasar por mi cintura y de un tirón hizo que quedara sentada en su regazo. Emma y Clarie se sentaron en el suelo al lado de Lucy para pasarle los regalos a la pequeña y que ella los repartiera. – ¿Tía?

Los ojos claros de la pequeña se entrecerraron al notar que Alex me tenía abrazada y sobre sus piernas, la carcajada de Kyle resonó en toda la sala.

¿Santa vino? – ladeé mi sonrisa y asentí.

– Sí, pequeña. Pero ambas nos dormimos antes de verlo, tendremos que esperar al próximo año. – la niña asintió con su cabecita y volvió su atención a Emma para tomar el primer regalo. D

Recuperando El Pasado.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora