Recuperando El Pasado.

Capítulo Veintiuno.

24 de enero, 2016.

Escuché dos toques en la puerta, aunque no di una respuesta. Me abracé aún más a la almohada que tenía entre mis brazos y acomodé la mantita que Alex me había regalado para navidad. Cerré mis ojos e intenté ignorar a la persona que estaba a punto de interferir en mi habitación.

– ¿Estás despierta? – de nuevo omití respuesta alguna.

– ¡Obvio que está despierta! – cerré mis ojos con mayor fuerza.

– ¡Scarlette, cállate! – sentí el espacio a mi lado hundirse y una caricia pasar por mi cabello.

– ¡Es que a este paso va a quedar solterona! – Hill susurró algo haciendo que Scar se callara.

Se creó un silencio un tanto incómodo y por mera estupidez mía, abrí los ojos. Me encontré con la mirada de Scar sobre mí, di un bufido, mas no me incorporé. Hill volvió a pasar su mano por mi cabello.

– Cariño, no todo está mal. Solo te espantaste, a todos nos pasa. – Hill mantenía el volumen de su voz bajo. – Sabes que te comprendo completamente, digo, hui cuando me enteré de Hansel. Y toda mi vida he intentado escapar de cualquier tipo de compromiso. Me aterra, es... terrorífico.

– Pero ninguna de las dos puede seguir huyendo, van a estar a los sesenta con cien gatos. – Scar se cruzó de brazos. – Sabes que te adoro, Lauren. Comprendo que dijeras que no, pero sinceramente estoy segura que en este mundo no hay otra persona que logre soportarte de la manera en la que él lo hace. Él siguió contigo aun después de que le fallaras sin ser nada oficialmente y para que conste no lo estoy sacando en cara.

Me incorporé y me recosté al respaldar de mi cama. Debo verme terriblemente mal, no he salido de mi habitación en tres días, y no me levanto de la cama para nada más que ir al baño. Mis almohadas son más mocos que plumas por lo que estoy segura de que tengo el rostro rojo.

Vi a Scar levantarse y caminar al otro lado de mí, se sentó dejando en el medio de ella y Hill. No tengo fuerza ni para mantener mi cabeza recta por lo que por inercia termine recostándome al hombro de Hillary.

– Acepto cualquiera que sea tu decisión, ya sea hablar con él o dejar la relación hasta acá, y si es la segunda opción estaré junto a ti para ayudarte a reunir todos los pedazos de tu corazón destruidos y unirlos. – hice una mueca por lo cursi haciéndolas reír. – Pero si es lo primero... estaré feliz de ser tu dama de honor.

Le di una sonrisa sincera a Scar, la verdad no tengo ganas de hablar nada.

– Lauren, piénsalo. No dejes que tu pasado afecte tu presente ni tu futuro.

El nudo en mi garganta se volvió a formular al recordar las palabras de Alex dos años atrás.

– Él aceptó tu pasado, estuvo en tu presente y de todas maneras te quiso en su futuro sin dudarlo. – La vi levantarse, se inclinó y besó mi cabeza. – Debo ayudar a Hannah con una tarea. – rodó sus ojos y salió de mi habitación.

Di un suspiro cansado, quiero seguir durmiendo, comiendo en helado y viendo películas deprimentes.

– ¿Y tú me regañarás? – pregunté sin voltear a ver a Hill.

– Sería completa hipocresía regañarte. – reí por lo bajo y asentí. – Tampoco planeo meterme en tus decisiones, sé lo complicado que es para nosotras las que amamos huir de estos asuntos, pero también sé lo maravilloso que es encontrar a esa persona que, aunque tengas la idea de querer escapar te da más razones para quedarte. – ladeé mi sonrisa por inercia.