The love not always is easy - Zayn Malik y tu (NOVELA GAY)

Capitulo 15 Parte 3

  *Recuerdan a Jeremaya el ex del suricato, ahora se llama Kurt*

  El rulos subió las escaleras y entro en la habitación del morocho.
Zayn estaba sentado sobre su cama, jugueteando con el collar de __ entre las manos. No se molesto en levantar la vista para ver quién era.
Harry se sentó a su lado. Todavía no lograba superar del todo el shock de ser empujado por su mejor amigo.
- ¿Qué te dijo? – pregunto en voz baja.
- Que quería terminar conmigo.
Harry se mordió el labio, y se acercó más a su amigo.
- ¿Por qué lo hiciste?
- Ya no tiene importancia el por qué lo hice, ___ se alejó de todas formas.
- Dale tiempo, no puede odiarte para siempre. – Zayn rodó los ojos, con un nudo en la garganta. – Es verdad – se defendió Harry. – ___ no puede odiarte para siempre. ¿Qué estoy diciendo? Ni siquiera puede odiarte. Zayn, estoy completamente seguro que ___ te ama.
- No después de esto. - Dejó el collar al lado de la cajita roja, y se acostó dándole la espalda a Harry. – Déjame solo.

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8:00 A.M viernes.
El morocho entró a la escuela y tuvo mucho cuidado de que no lo viera su sobrina, Blaine o __. Fue hasta la oficina del director con aire decidido.
Tal vez __ no fuera más su novio, tal vez el castaño no lo quisiera más. Pero él lo amaba, y no iba a permitir que le hicieran daño.
- Señor Malik. – Figins le estrecho la mano. Lo había conocido la vez en que Santana le había pegado a Dave. - ¿Qué lo trae por aquí? Su sobrina está bien.
- Lo sé. – dijo sentándose en una de las sillas frente al escritorio. – No vengo por Santana. En realidad estoy aquí por ___ ___. – El hombre hizo un gesto de no entender. – Mire, yo soy...- tragó el nudo en la garganta. – soy su tutor de matemática, y últimamente he notado un comportamiento extraño en ___. Él es el mejor amigo de mi sobrina y lo aprecio mucho, además creo que ___ no le dijo a su padre, y sé que no debería meterme en su vida, pero yo pase por lo mismo y no quiero que nadie, en especial ___, sufra acoso por como es.
- Explíquese. – dijo el hombre repentinamente serio.

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- ¿Qué te parece si vamos al Shopping luego? – pregunto Blaine con ánimo.
__ le sonrió con falsedad, y siguió con la vista clavada en su comida. El pelinegro se dio por vencido en su trabajo de animar al castaño. Miro al otro lado de la mesa, y vio como Santana miraba su amigo de reojo y después volvía su atención hacia Brittany.
__ y Santana se habían peleado, por Zayn. La morocha creía que lo que había hecho su tío era difícil de perdonar y entendía que __ esté de esa manera, pero en cuanto había tratado de hablar con Zayn, el morocho le había negado la entrada a su habitación y Zayn nunca le decía que no a su sobrina. Luego se había enterado que había empujado a Harry, y que ni siquiera quería mantener una conversación de dos palabras con él. En cuanto fue a hablar con Thad, el chico le había contado que Zayn lo había hecho por algo pero que no pensaba contárselo a nadie, a nadie excepto a __.
La pelea se había basado en que Santana le pedía que deje a su tío hablar y __ se lo negaba.
Y por más que quisiera, el castaño no se podía sacar de la cabeza las palabras de su amiga.
"No sabes como está, no sale del estudio, apenas lo veo. No quiere que se le acerque nadie, ni siquiera Harry..."
- ___. – el castaño se dio vuelta, y se encontró con el profesor Shue. – Ven conmigo. – el hombre parecía serio.
El castaño se levanto, todas las miradas del club Glee estaban clavadas en él. Siguió a Shue hasta la oficina del director, con el seño fruncido. Él no había hecho nada.
Se sentó frente al director. No entendía que diablos estaba haciendo allí Sue.
- Muéstrame tu espalda porcelana.
El castaño tembló levemente, y no hizo ningún ademán de moverse.
Los tres lo observaron con seriedad, y __ suspiro resignado. Se colocó de espaldas a su entrenadora, y se levantó la remera de animador. Shue y Figins dejaron salir una exclamación, y Sue susurró algo por lo bajo que parecía un amenaza.
- ¿Por qué no nos lo dijiste? – pregunto su profesor de español.
__ permaneció en silencio con la mirada baja. Figins mandó a Sue a buscar a Karofsky, y a Shue a llamar al padre. Le dijo a __ que tal vez era mejor que no se cruzara con Dave. __ asintió y se puso en pie, pero una duda lo hizo detenerse.
- ¿Cómo se enteraron?
- Tu tutor vino a hablar conmigo. No deberías haber escondido algo como esto ___.
El castaño se había paralizado.
«Zayn».
Después de todo, después de que él le cortara, después de que le pidiera que se alejara de él, de que le dijera que no lo quería volver a ver, aún así él había venido a hablar para que dejen de lastimarlo.
Su estómago dio un vuelco involuntario, y esa pequeña flamita de esperanza se hizo más grande.
El castaño se regañó mentalmente y salió del despacho de Figins, directo a su clase de francés.

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Zayn vio salir a __ de la oficina, y podría jurar haberlo visto sonreír por unos segundos.
Suspiró, y se alejó de allí, no quería cruzarse con Karofsky, si lo veía solo una vez más, estaba seguro de que nadie sería capaz de detenerlo.
- Te dijo que te alejaras de él.
Zayn salió de sus cavilaciones y sus ojos se clavaron en Blaine. Abrió la boca, pero sacudió la cabeza, si __ quería estar con el, no se iba a interponer. Siguió caminando hacia la salida, ignorando al otro.
- ¿Qué más quieres de él? Ya lo usaste y lo lastimaste ¿ahora qué?
El morocho estampo al chico contra una pared.
- Yo no use a ___, jamás sería capaz de usarlo. Lo quiero como no sabes cuánto. No me importa si él no me quiere, si me odia, si está saliendo con vos, si tú eres el primero en hacerle el amor, si se casan o si adoptan tres hijos, nunca voy a dejar de quererlo, no importa lo que hagas, no importa lo que digas. Y ten por seguro que ___ nunca va a olvidarme. – lo soltó con un movimiento brusco. - ¿Querías saber que hago acá? Algo que vos no tuviste el valor de hacer por él, aún sabiendo que sucedía. – Blaine frunció el seño, sin dejar su estado de sorpresa. – Fui a hablar con el director para que pare a Karofsky. Tal vez no pueda acariciarlo para que le dejen de doler los golpes, pero sí puedo hacer que desaparezcan.
Se alejó de Blaine, quien no se podía sacar los llorosos ojos mieles de la cabeza.

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18:00 P.M.
Se detuvieron frente a una de las vidrieras. El pelinegro no paraba de mirar de reojo a __, que parecía algo ido. Blaine lo miraba sonreír repentinamente, y negar con la cabeza para volver a su estado de tristeza.
Sabía que tenía que ver con Zayn. Ni siquiera Blaine podía sacarse las palabras del morocho de la mente. Se repetían una y otra vez, como queriéndole decir algo.
- ¿Qué sucedió con Karofsky? – El castaño le había contado para qué lo habían llamado a la oficina del director.
- No pueden hacer más que suspenderlo, hasta que la junta escolar analice todo. Está suspendido por una semana, por lo tanto el lunes vuelve otra vez.
- ¿Le avisaron a tu padre?
- No quiero que se preocupe, por su salud es mejor que no se entere hasta que sea estrictamente necesario.
- ¿Y cuándo va a ser estrictamente necesario ___? ¿Cuándo los moretones se conviertan en cortes?
El castaño hizo una mueca de dolor.
- No, el no lo permitiría.... – murmuro por lo bajo.
- ¿Él quién? ¿Tú padre?
__ se mordió el labio y guardo silencio. Blaine lo observó por unos instantes. No, el castaño no estaba hablando de su padre.
«Zayn».
Otra vez Zayn, siempre ese chico. ¿Qué tenía de especial, además de unos ojos bonitos?
Pero ahora Blaine estaba empezando a dudar de si __ tendría razón o no. Antes lo hubiera negado profundamente. Pero ahora...ahora no lo sabía. En realidad estaba completamente seguro de que Zayn no permitiría que Karofsky llegue a siquiera rasguñar a __, pero sus celos le instaban a negarlo.
- ¿___? – ambos jóvenes se dieron vuelta ante la voz.
Un chico castaño rubión de pelo largo hasta los hombros les sonreía. Blaine frunció el seño, pero __ pareció reconocerlo.
- Kurt.- Dijo con la voz un poco más animada.
El chico avanzó hasta él y lo abrazó fugazmente, __ le devolvió el gesto algo distraído.
- Kurt este es Blaine, un amigo. Blaine este es Kurt, otro amigo, lo conocí hace poco en una tienda de GAP.
La diminuta sonrisa que se había formado en el rostro de __ desapareció por completo. Recordó cuando lo había conocido. Había sido el día en que Zayn le había pedido que fueran novios, fue el día en que Kurt había terminado con Sebastian por teléfono.
«Esa ardilla mal parida no hacía más que arruinarles la vida a las personas».
- ¿Estás bien? – los ojos de Kurt, que hasta entonces habían estado fijos en Blaine, se movieron hacia __.
El castaño salió de su nube y asintió. El pelinegro vio como se le aguaban los ojos al ojiazul y le embargó un odio tremendo.
El chico de GAP no parecía muy convencido, pero guardó silencio. Se fueron los tres a tomar un café a una de las cafeterías del Shopping. Estuvieron hablando de asuntos sin importancia por un rato.
- Dime ¿Cómo estas con Zayn? – pregunto con una suave sonrisa.
El castaño se tensó y apartó la mirada del chico.
- Cortamos.
Kurt levantó las cejas.
- ¿Por qué? – parecía realmente sorprendido.
- Me engaño. – fue la respuesta cortante del castaño.
- ¿Con quién?
__ parecía reacio a contestar.
- Sebastian, no creo que lo conozcas... - dijo Blaine.
Kurt se puso rojo de furia, pero cambió de tema rápidamente. Una media hora después los ánimos se habían calmado un poco.
- Ahora tenemos más trabajo. Hay un puesto disponible en GAP desde hace unas semanas y todavía no conseguimos nadie que cubra el puesto.
Los ojos de __ parecieron chispear por unos segundos.
- ¿Es estrictamente necesario ser mayor de edad para trabajar en la tienda?
- No lo sé.- se encogió de hombros. – Eso tendrías que hablarlo con la dueña del local. Es la que está entrevistando a las personas para el puesto.
- ¿Cuándo puedo ir?
Kurt le sonrió ampliamente.
- Le voy a hablar y luego te aviso. Espero que puedas entrar.
Siguieron hablando con más ánimo. __ no se perdía ningún detalle de las facciones de Kurt, el cual parecía estar encantado con Blaine.

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16:00 P.M Domingo.
__ se paso las manos por la cabeza en gesto de desesperación. Blaine había estado tratando de que entienda el tema nuevo de matemática, sin resultados.
-¿Cómo te pudiste sacar un diez en el último examen?
-No lo sé, con Zayn era diferente...él...- se cayó la boca repentinamente.
Blaine bajó la mirada hacia las hojas. Sí, con Zayn __ era diferente. Estaba más feliz, tenía ese brillo en los ojos que tanto lo caracterizaba, era un excelente estudiante, y sonreía, todo el tiempo. El pelinegro soltó un suspiro, __ enterró la cara en sus manos.
Sonó el timbre de la casa sobresaltando a ambos.
El castaño se puso en pie y abrió la puerta. Se quedó quieto con el seño fruncido.
- Hola. – el menor le cabeceo en respuesta.
- ¿Qué haces aquí?
Blaine apareció en el umbral junto a él. La sonrisa se esfumo al ver al morocho.
- Ten. –Thad le extendió el collar al ojiazul. – Zayn me dijo que te lo dé, es tuyo después de todo. –los ojos azules se fijaron en la Z rodeaba por las alas de oro. El menor no hizo ningún ademán de agarrarlo.- Zayn en verdad quiere que lo tengas.
- No lo quiero. – contesto cortante.
Thad lo miró por unos minutos.
- Solo agárralo. – insistió.
- No quiero nada de él.
El morocho apretó las mandíbulas.
- ¿Sabes cuánto tiempo estuvo Zayn ideando que te podía regalar? ¿Sabes que él mismo hizo los bocetos para el collar? – __ abrió más los ojos. – No, no lo sabes. No sabes lo mucho que significa para Zayn que lo tengas... - se lo tendió una vez más, pero __ se limito a morderse el labio. – ¿Sabes algo? En verdad admiro a mi amigo, yo creo que no sería capaz de AMAR a una persona que no me perdona un error del cual me arrepiento.
El morocho le tiro el collar y __ lo agarró como un acto reflejo. Thad se dio vuelta y sonrió para sí, antes de alejarse de la casa con grandes zancadas.
__ estaba petrificado, todavía sin reaccionar.
«Amar».
- ¿___? –lo llamó Blaine.
El castaño apretó el collar contra su estómago. El pelinegro trató de llamarle la tención nuevamente.
- Creo que deberíamos seguir otro día.-dijo finalmente el castaño, con voz baja.
Blaine bajó los ojos y los posó en el collar. El castaño lo sostenía con fuerzas, como si fuera su salvavidas, pero también con delicadeza, como si no hubiera nada más valioso en el mundo.
El pelinegro le besó la mejilla, y se fue. __ entró en la casa y bajó directo hasta su habitación. Se tiró en la cama y cerró los ojos.
«¿Me ama? ¿En verdad me ama?».
Si lo amara no lo hubiese engañado. Pero lo que le había dicho Thad le hacía replantearse sus propios sentimientos.
«¿Yo lo amo?».
De inmediato se le vino a la mente una imagen de Zayn sentado en la mesa de su antigua casa, con el cabello despeinados y una manchita de crema en la comisura de los labios. Recordaba que lo había visto tratar de limpiársela con la lengua, haciendo muecas extrañas, y no pudo evitar sonreír.
Recordó cómo se mordía los labios cada vez que lo miraba. Recordó su forma de sonreír, como si no hubiera nada más lindo que respirar el mismo aire. Recordó los intentos fallidos de levantar una sola ceja frente al espejo del baño. Recordó su risa suave, melodiosa, dulce. Sintió su aliento caliente contra su cuello, sus susurros gruesos contra su oído. La forma en que su lengua lo acariciaba, en cómo sus labios lo rozaban. Vio las cejas triangulares que tanto le gustaban fruncirse en un gesto de concentración. Sonrió ante la imagen del joven de veinticuatro años saltando emocionado como un crío. Sintió sus brazos abrazarlo con cuidado. Lo escucho con la voz rota por el llanto... Recordó el tacto de sus huellas dactilares... Pero por sobre todo recordó la forma en que lo miraba, con esos ojos mieles, en cómo estos se oscurecían hasta llegar al marrón y en cómo brillaban casi dorados cuando les daba el sol.
El castaño se abrazó a sí mismo, llevándose el collar hacia su pecho.
- Te amo Zayn....