The love not always is easy - Zayn Malik y tu (NOVELA GAY)

Capitulo 20 Parte 3

13:00 P.M. Miércoles.
El castaño se despertó y se despatarró por toda la cama. Zayn se removió y abrió ligeramente los ojos, sonriendo al ver a su castaño tan despeinado. El menor le devolvió el gesto y pasó su mano por la mejilla de su novio, que estaba ligeramente rasposa.
- ¿Sabes? Me podría acostumbrar a despertarme todos los días así.
Zayn lo abrazó por las caderas, acercándolo a su cuerpo, y apoyó su frente en la del menor.
- Yo también.
Estuvieron solo mirándose, y acariciando la piel del otro con lentitud, o uniendo sus labios en besos castos por más de una hora, antes de que sus estómagos se quejaran. En cuanto bajaron Zayn lanzó un gruñido de protesta al ver el desorden que había quedado la noche anterior.
- Por lo menos Harry y Louis no están tirados en el sillón. – se río el castaño.
Zayn tuvo que concederle la razón. Desayunaron, y limpiaron el departamento mientras escuchaban música. Luego se metieron en el baño, y compartieron una larga sección de enjabonamiento, intercalado con besos pasionales, y uno que otro gemido.
El menor estaba recostado sobre el sillón, que le había encantado, con el cuaderno de dibujo sobre las rodillas flexionadas mientras sombreaba un nuevo dibujo de ellos. Mientras, Zayn había empezado a colgar los otros dibujos, que había enmarcado, en las paredes. En cuanto terminó se volvió hacia __ y le encajó un beso largo y fogoso. El menor sonrió al ver todos sus dibujos sobre la pared, y lo atrajo hacia él. Zayn se le sentó a horcajadas, y no sabía por qué pero encontraba que esa posición era muy excitante.
__ lo besó, y fue subiendo por su mandíbula hasta llegar a la oreja, donde jugueteo con el lóbulo sacándole sonrisitas. Mordió detrás de esta donde sabía que Zayn tenía su punto débil, y al instante sintió como el cuerpo del mayor se derretía sobre él. Fue bajando por su cuello, solo rozándolo con la nariz, haciendo que su respiración chocara contra su piel, disfrutando de ver los estremecimientos de su novio que ahora le ronroneaba sensualmente en el oído.
Empezó a acariciarle el pelo, y a los pocos minutos sintió como Zayn se relajaba completamente, y su respiración se volvía más pausada. Sonrió al escuchar un leve ronquido ahogado por su propio cuello, acomodó la cabeza de Zayn sobre su hombro y siguió acariciándolo, dejándole besos en los labios de vez en cuando, y sonriendo cada vez que el ojiverde pronunciaba su nombre dormido.
Al comenzar ese año, nunca se hubiera imaginado encontrarse en esta situación. Estaba dispuesto a tener un novio antes de su último año, pero nunca creyó que lo encontraría en el lugar menos esperado, y que este fuera alguien como Zayn. Simplemente agradecía el poder haberlo conocido, y que el morocho lo viera como un hombre del cual podría enamorarse, y no un adolescente que estaba teniendo sus primeras experiencias.
Mucho menos se imaginaba que iba a conseguir algo más que un primer beso. Hacer el amor con Zayn había ido mucho más allá del placer, hacer el amor con Zayn los había conectado a límites sentimentales insospechados, no solo había sido la unión de sus cuerpos sino también de sus almas, y no podía estar más feliz de que por una vez el sentimiento fuera correspondido.
Tal vez muchos pensarían que estaba con Zayn por la fortuna de los Malik, o por su fama en Dalton, o simplemente porque estar saliendo con alguien mayor y con más experiencia le garantizaba un amante increíble, pero no. Los que pensaran eso no conocían a Zayn, no lo veían usar un pantalón de jogging que tendría más de cinco años, gastado y algo descolorido, cuando sabía que se podría comprar ropa de perfecta calidad. No veían su vergüenza cada vez que alguien lo reconocía y le pedía un autógrafo, no veían su cara de sorpresa por tal gesto. Y tampoco sabían que lo que ambos más disfrutaban era estar en compañía del otro, simplemente observándose, sonriendo cada vez que sus miradas se encontraban. No sabían que Zayn podía pasar horas mirándolo batallar con sus tareas, y que hasta a veces lo ayudaba por el simple hecho de pasar más tiempo con él. No veían como __ podía cerrar los ojos y escucharlo cantar, perderse en esa voz aterciopelada, en como en cada nota el sentimiento era puro.
Hacer el amor solo era un gesto de posesión, de pertenencia. Como si se necesitasen recordar mutuamente que se pertenecían, y no se les ocurriera nada mejor que hacerlo dándose placer.
El castaño cerró los ojos y acomodó su cuerpo, para que el morocho quedara completamente encima de él.
Era en esos momentos cuando Zayn era el que se dejaba dirigir, cuando dejaba que __ fuera el que lo sostuviera, que hacía que no pudiera más que amar la forma en que confiaba en él y se entregaba.
El sueño le ganó finalmente, y lo único que atino fue a abrazarlo más fuerte, antes de quedarse dormido.