El castaño dejó a Margaret sobre el sillón, antes de ser arrastrado por Zayn escaleras arriba. El morocho lo empujó con brusquedad contra el colchón. __ se mordió el labio y lo miró con lujuria. El mayor sonrió con deseo, y gateo sobre él, hasta que sus rostros estuvieron a la misma altura.
__ lo atrajo por la nuca y lo besó furiosamente, atrapando su lengua con los labios, y succionándola hacia su boca. Zayn gemía, mientras trataba de sacarle el chaleco al menor. La prenda gris cayó a un costado de la cama, y el ojimiel coló sus manos por debajo de la remera. El castaño se arqueo contra su toque, y enredo las piernas alrededor de su cintura.
Ambos gimieron roncamente cuando sus erecciones se frotaron por encima de la tela. El morocho empezó a mover la cadera, haciendo perder la cordura al menor. Quería que el momento durara lo más posible, quería degustar la piel de __ con parsimonia.
Le retiró la remera, haciendo lo que en un momento había hecho __ con él, dejándolo con los brazos levantados sobre su cabeza, con ambas muñecas juntas, sin poder desatarse. El menor gimió por el simple hecho de verse totalmente a disposición de su novio.
Zayn le pasó la lengua por los labios de forma lenta, y fue bajando, tomándose tiempo para lamer la quijada, el cuello, y finalmente descansando su boca en su pecho. Una de sus manos acariciaba uno de los pezones de __, mientras este movía su cadera contra él.
- Demasiada...ropa...- dijo entre jadeos.
El morocho no le hizo caso y lamio uno de sus pezones. __ echó la cabeza hacia atrás, hundiéndola en las almohadas. El morocho parecía incapaz de soltar su pequeño botón rosado, y lo degustaba como si de un caramelo se tratase. El vaivén de sus caderas estaba volviendo loco al menor, que no podía pensar con claridad.
- Zayn....por favor....- le rogó. Necesitaba que su miembro tocara la piel morena.
- ¿Qué quieres? – preguntó, antes de empezar a torturar el otro pezón.
- Hazme el amor...ahora.
- ¿Con qué?
__ cerró los ojos, mientras sentía que su erección crecía. Se zafó de su agarré, y sus manos fueron a parar al pelo revuelto del otro.
- Te quiero adentro mío. – gimió.
Zayn separó su boca de su pecho, y se acercó a él lentamente, haciendo que sus labios rosaran ligeramente su oído, antes de susurrar con la voz ronca:
- Eso no fue lo que pregunté – lo besó hasta sacarle cada gota de aire. - ¿Qué parte de mí quieres dentro tuyo?
El menor tragó con dificultad, incapaz de responder. Llevó sus manos hasta la camisa salmón, que cubría el pecho del otro, y la abrió de un tirón arrancándole los botones. Zayn unió sus bocas de forma salvaje, mientras se deshacía de la incómoda tela. Ambos jadearon cuando sus pieles entraron en contacto, produciéndole una descarga eléctrica.
- Quiero tu miembro dentro de mí.
El morocho sintió como esas palabras iban directas a su erección, y se tuvo que contener para no arrancarle el pantalón y hacérselo en ese instante. Quería volver loco a __, quería que no pensara en nada más que en él. Le gustaba jugar, y hoy no iba a ser la excepción.
- No... - jadeo al sentir la mano de __ sobre su trasero.
- Zayn... fóllame...
El autocontrol del mayor se esfumó con esa palabra. Se sacó el pantalón, y el bóxer con brusquedad. Pero trató de hacer sufrir al otro, tardando más de lo necesario en desabotonarle el jean. __ se retorcía, y elevaba sus caderas en busca de contacto.
El morocho se deshizo del pantalón y el bóxer del chico, quedándose ambos completamente desnudos. Sin ningún miramiento engulló la excitación de __ con la boca, haciendo que el ojiazul gritara de placer, y comenzara a mover las caderas incontrolablemente, hundiéndose en la boca caliente de su novio. Zayn no tenía pensado hacer que __ se viniera en su boca, por muy tentadora que le sonara la idea, y tampoco quería dejarlo al borde del orgasmo. No, quería que su lengua memorizara cada parte de lo que le pertenecía, quería no poder sacar su sabor de la boca, quería ver la cara de placer del menor al disfrutar de sus succiones.
El morocho agarró la cadera de __, sosteniéndola contra la cama, haciendo que sea imposible moverla. __ bajó la vista, y se sintió endurecer aún más con la imagen de la cabeza de Zayn bajando y subiendo sobre su miembro. Su lengua lo saboreaba con lentitud, sin apurar las cosas, ambos disfrutando del momento.
__ llevó sus manos hasta sus cabellos y los tironeo con ligereza, como sabía que al morocho le gustaba que hiciera. Zayn sonrió, e hizo que sus dientes le rascaran la piel sensible, obteniendo un temblor, y el gemido más erótico jamás escuchado. Soltó su miembro y subió a sus labios, rozándolos, tentándolo.
- ¿Te gusta cómo te lamo?
- Sí...
- Te lo vuelvo a preguntar ¿Qué quieres dentro de ti?
- Tu lengua.
Eso era lo único que necesitaba oír. Hizo que el menor se volteara, quedando en cuatro, y le recorrió la espalda con las manos, masajeando sus nalgas antes de separarlas, descubriendo ese lugar prohibido que tanto adoraba.
Dejó que su aliento chocara contra la piel, haciendo estremecer al chico, su lengua comenzó un recorrido por la piel blanca, acercándose a su entrada, solo rozándola, disfrutando de los sollozos de expectación del menor.
Siguió torturándolo, hasta que no pudo aguantar más y le dio una lamida a su entrada. __ gimió, y se empujó contra él. El morocho lo empezó a lamer con ganas, empujando de vez en cuando, tratando de hacerse paso en esa estrechez, dilatándolo con su saliva. El menor sentía que sus brazos apenas podían sostenerlo de tanto que temblaban, el placer que Zayn le estaba causando era más de lo que podía soportar su cuerpo.
El morocho apretó sus labios contra la entrada del ojiazul y aplicó una succión suave.
- ¡Zayn! – chilló __, separando más sus rodillas.
Cuando la lengua del ojimiel apretó contra su entrada, y se hundió en su interior, gimió y dejó caer su cabeza contra las almohadas.
Zayn cerró los ojos, dejándose llevar. El rimming era un acto sumamente íntimo, y él estaba encantado de que __ lo disfrutara. El menor se estaba presionando contra él con insistencia, incitándolo a penetrar más profundo con su lengua. Zayn meció su lengua dentro del menor, dibujando círculos, jadeando al escuchar los gritos de placer de __.
El castaño no resistió más, y se acomodó como pudo, llevando una de sus manos hasta su erección, masturbándose mientras Zayn lo lamía.
- No. – El morocho se separó de su trasero, obteniendo un gruñido de protesta de parte del otro.
Le apartó la mano de su miembro, y volvió a acostarlo de espaldas. Tomando él su erección y empezando a acariciarlo con lentitud. Se estiró, y abrió el primer cajón de la mesita de luz. Sacando un preservativo, que se apresuro a colocarse, y una potecito de lubricante. Se esparció el líquido frío por su propia excitación, jadeando ante el contacto. __ se sentó en la cama, y lo besó con deseo, mientras una de sus manos bajaba hasta el miembro de su novio y lo masturbaba.
De un movimiento rápido, el castaño quedó entre las piernas de Zayn, quien había quedado con la espalda pegada a la cama y con las pupilas completamente dilatadas. __ se arrodillo a horcajadas sobre él, bajando su rostro hasta hacer que sus labios se rozaran, y sus alientos se entremezclaran.
Lentamente fue bajando su cuerpo, haciendo que el miembro de Zayn tocara su entrada dilatada, el mayor cerró los ojos, y lo tomó de las caderas, mientras __ se penetraba lentamente.
- _-___... - jadeó.
La piel del trasero de __ tocó la del morocho con un sonido erótico, haciendo gemir a ambos. Era la primera vez que __ estaba en esa posición y ninguno de los dos necesitaba palabras para expresar el puro placer que sentían. __ sentía a Zayn dentro de él, llegando más profundo que lo que había logrado llegar antes, rozando su próstata de manera perfecta, mandándole temblores por todo el cuerpo.
Apoyó las manos sobre el pecho del mayor, y muy lentamente se deslizó hacia arriba, dejándose caer con brusquedad, sin poder evitar gritar de éxtasis cuando el morocho pegó contra su punto con fuerza.
Zayn apretó su agarre en las caderas, y lo ayudo a subir y bajar sobre él. Los jadeos habían pasado a gemidos entrecortados y estos no tardaron en convertirse en gritos. El sonido de las pieles chocar solo los enloquecía más, haciendo que Zayn no pudiera evitar subir la cadera cada vez que __ bajaba.
El mayor le acarició el pecho con una mano, bajando, hasta encerrar la erección del ojiazul y empezar a moverla por su longitud al ritmo de las embestidas. Los muslos de __ ardían por el esfuerzo pero no quería detenerse. Zayn lo tironeo hacia abajo, pegando ambos pechos. Con un solo movimiento quedó encima del castaño, y comenzó a entrar y salir de él de forma casi salvaje. __ se retorcía debajo de él, con el tobillo obligaba a Zayn a ir más profundo, mientras la otra pierna se enroscaba en su cintura.
Unieron sus labios con desenfreno, probando el sabor del otro, compartiendo saliva, y gimiendo cada vez que sus lenguas se encontraban. Luchaban por el control del beso, ambos perdidos en el vaivén erótico de sus caderas.
- Más duro...Zayn...
El morocho sentía las gotas de sudor resbalarle por el pecho, y perlarle la frente, pero se obligó a utilizar sus últimas fuerzas en complacer a su novio.
El menor coló una mano por entremedio de sus cuerpos alcanzando su erección, y empezando a masturbarse con rapidez. Ambos sentían que sus cuerpos iban a estallar por tantas sensaciones juntas. Zayn empujó varias veces más, pegándole fuertemente a su próstata, y haciéndolo llegar al orgasmo con un grito entrecortado. Las paredes interiores de su entrada se contrajeron placenteramente contra la dureza del ojimiel, quien llegó al clímax gimiendo el nombre de __.
Sus caderas siguieron moviéndose, impulsadas por las continuas olas de éxtasis. El mayor colapsó contra el menor. Se abrazaron, hasta que sus respiraciones agitadas y sus corazones volvieron a la normalidad.
- Wow... - fue lo único coherente que pudo procesar el cerebro de Zayn.
- Sí...wow.... – contestó el castaño, sin palabras.
Zayn salió del menor con cuidado. Se deshizo del preservativo y volvió a acostarse sobre el cuerpo de porcelana. __ llevó sus manos automáticamente al pelo del otro, mientras este jugueteaba con su cuello. La verdad es que se había vuelto un hábito. El pelo de Zayn, era el vicio que calmaba a __ después del sexo, como para el morocho lo era su cuello.
Sus labios se volvieron a juntar, esta vez con más lentitud. Disfrutando del tacto suave de sus lenguas. Ninguno de los dos tenía palabras para explicarse en ese momento.
- Fue como, bueno....wow. – dijo el morocho, agarrándolo al menor por la cadera y haciendo que este quedara sobre él.
__ rió, y apoyó sus manos a cada lado de la cabeza de Zayn.
- Si, lo sé. – Acortó la distancia, hasta rozar sus labios, como a punto de robarle un beso. – tu lengua es muy...juguetona.
Zayn sonrió con perversidad, y lo apretó más contra él.
- Y tu trasero es muy... - unió sus bocas, mordiendo su labio inferior. – suculento.
__ no pudo evitar ruborizarse.
Se abrazaron sin ganas de moverse de la cálida cama. La lluvia había empezado a caer en el exterior. Debían de ser no más de las tres de la mañana, pero ninguno de los dos tenía sueño. El menor bajó, dejando a Zayn solo en la habitación. El morocho cambió las sábanas con una sonrisita, y se limpio lo mejor que pudo, luego se acostó nuevamente, saboreando el tacto de las sábanas frescas sobre su piel. Acostó su cabeza sobre las almohadas y se le escapó un pequeño gemido de satisfacción al sentir como el aroma de coco, y vainilla del castaño se les había impregnado.
Sus ojos fueron a parar a su cómoda, donde tenía el dibujo que le había regalado __. El menor lo había hecho el mismo, tenía su toque personal, el dibujo rebozaba de sensualidad, y como le había dicho a él, había disfrutado al hacerlo, claramente estaba pensando en él cuando había plasmado cada trazo.
El ojiazul se merecía un regalo que tuviera los mismos sentimientos que él le había trasmitido, pero no sabía qué podía ser.
El castaño subió las escaleras con Margaret acostada sobre uno de sus brazos y una taza de té en la otra. Se notaba de lejos que Zayn acabada de tener el mejor orgasmo de su vida, porque si no estaba completamente seguro que Zayn Jr. ya estaría feliz otra vez al ver a __ completamente desnudo con cara de angelito, el pelo revuelto y una marca, que no se acordaba haberle hecho, en el hombro.
El menor dejó la taza de té sobre la mesita de luz, y se metió a la cama. Margaret se acomodó entre ellos, metiéndose debajo de las mantas. Zayn sonrió y pasó una de sus manos por la cintura de __.
- Estaba llorando, al parecer no le gusta la lluvia. – le empezó a acariciar el pelaje dorado.
Zayn solo se lo quedó mirando con una sonrisa de enamorado. __ era lo más adorable que había conocido en toda su vida. Realmente era un ángel, no solo por cómo se veía, sino por como actuaba. Era su ángel.
«Mi ángel...»
Sonrió con complicidad. Ya sabía cuál iba a ser su regalo.
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The love not always is easy - Zayn Malik y tu (NOVELA GAY)
RomanceEl Amor No Siempre es Facil ¿Qué pasa si una materia empieza a arruinar tu vida?¿Qué pasa si necesitas un profesor particular y te enampras de este?¿y que pas si este profesor esta enamorado de otro? ____ ____ deber afrontar estos echos para darle u...