__________López
Jueves por la tarde y tenía qué comprar algunas cosas que necesitaba para la excursión de Mañana.
Me encontraba en la fila del supermercado esperando mi turnó.
Un niño pequeño se encontraba delante mío y al parecer éste estaba nervioso y asustado porqué su mamá no llegaba, al parecer su jefa lo había dejado en la fila esperando.
Lo entendía perfectamente, sabia cómo se sentía, era lo peor del mundo.
El niño se volteó y me miro.
— ¿No quiere pasar? —me preguntó.—Claro. —acepté.
El me dejo pasar y yo pagué mis cosas.
La cajera me entrenó mi cambio y éste se cayó al suelo.
Vieja pendeja.
¿Porqué diablos entregaban el cambió arriba del tiket? Sólo hacen qué el dinero se te caiga al suelo. ¿A qué juegan? ¿Quién les hizo tanto daño?
{ * * * }
Me tiré en mi cama, era de noche y tenia qué publicar cualquier estupidez en facebook.
"Si quiero la luna yo misma me la bajo" —publique.
Los likes empezaron a llegar y con ellos un comentario.
"Primero baja de peso marrana"
Me enpute, ¿Quién carajos había sido el idiota?
Mire al perfil y mi boca se abrió.
Era mi madre.
"¿Ahora qué te hice aparte de haber nacido?" —respondí al comentario.
"Te amó hija." —comentó otra vez.
¿Pero qué rayos le pasaba?
¿Si sabía usar facebook pero whatsapp no?
Si no podía ser peor un whatsapp me llegó y al parecer era de mi madre.
+44433300011
«Hola hija ya c usar wasap.»
Escribiendo....
Escribiendo....
Escribiendo....
Escribiendo....
« jeje »
«Su mensaje no pudo ser enviado, favor de enviar la palabra "Pene"»
Enviado a las 8:45 pm.
«Pene»
Enviado a las 8:50 pm.
Comencé a reírme, hay no.
Podre de mi madre, pero esto le pasaba por haber comentado comentado mi estado en facebook.
{ * * * }
Era viernes.
Todos estábamos cómo locos, los autobuses no llegaban y no había otro transporte en el cual irnos.
—Tranquilos todos. —dijo el profesor. .— ¿Y si no vienen no iremos de excursión? —pregunté.
—Nos se salvara de todos modos señorita López.
Rodee mis ojos. Lo odiaba.
— ¡Hay vienen! —grito alguien.
Efectivamente hay venían los autobuses.
Todos comenzaron a subir a los autobuses.
Me quede hasta al último con Lupita.
Cuándo todos habían subido nosotras lo hicimos.
Caminamos por el pasillo y pude notar qué Mario y Petra estaban sentados juntos hasta el fondo comiéndose la cara.
Qué asco, doy gracias al cielo qué antes no me dio cáncer de ojos.
Petra se veía horrible, no sabía que estaba más culero, si el clima o petra.
Mario se separó de petra y está se molesto un poco, el noto qué yo los estaba mirando y rápidamente desvíe mirada. Qué oso.
Lupita se sentó con Joel dejándome sola la maldita.
La mire mal y está me dedicó una mirada de disculpa.
—morenita —dijo alguien y me voltee pensando que era el, pero no, era Gael—. Ven sientate conmigo. —dio unas pequeñas palmaditas al asiento vacío a su lado.
—Oye, yo sólo le puedo decir así. —reclamo Mario desdé atrás.
Gael se giró al asiento de atrás el cuál era el de Mario.
—Púes ya no eres el único. —dijo Gael encogiéndose de hombros.
—No le vuelvas a decir así. —le dijo Mario.
— ¿O sí no qué? —lo retó Gael.—Buscate otro apodó. —dijo Mario.
Me acerqué a ellos.
—Si Gael...buscate otro, ese esta horrible. —le dije—cómo la persona qué me lo puso.
Mario abrió su boca y gael comenzó a reír.
—A ti parecía no molestarte. —dijo Mario.
—Antes, ahora ya no me gusta.
—Si, antes, cuándo iba a tu casa a...—no lo dejé terminar, la iba a cagar cabrón.
—A pedirme la tarea, cuándo eras mi amigo. —dije.
De repente el autobús arrancó asiendo qué perdiera mi equilibrio y cayera sobré Mario.
Su rostro estaba a centímetros del mío. El aprovechó para susurrar;
—Me vale verga qué no seamos nada, mis celos siempre van a estar hay, MÍ morenita.