Penúltimo capitulo.
_______________ López
2 semanas ¡2 semanas en las que no dirigía palabra alguna con Mario!
Solamente pequeñas miradas que le daba cuando estaba descuidado.
Su rostro se había mejorado, los rasguños y moretones ya no eran visibles.
Cuándo regresó a la preparatoria una pequeña posibilidad de que me buscara se había formado dentro de mí, pero cuando lo sentí pasar de largo y sin mirarme mi corazón se rompió por completó. Pero era lo que yo quería, lo que le había dicho. Qué no me buscara, y eso posiblemente le había molestado.
Ver a algunas chicas a su lado me hacían querer arrancarles las tetas para que ya no siguieran de atrevidas pero al parecer el no mostraba atención a ellas y eso había causado una felicidad estúpida dentro de mí.
También se acercaba el baile de fin de curso al cual no tenía ni las más mínimas ganas de ir pues todos estarían besándose, abrazándose, bailando y yo, bueno yo como siempre comiendo. Y no tenía ganas de caer en depresión por ello, ya bastante tenía con alejarme de Mario.
No les miento, unos tres chicos me habían propuesto ir con ellos pero yo prácticamente los mandaba a la verga, pero por la sombrita para que no se pusieran más prietos de lo que ya estaban. Digo, yo por eso estoy morena, ya tantas veces que me han mandado y uno que ni bloqueador solar se lleva.
Esto sonara raro o estúpido quizá, pero cuando alguien del sexo contrario—a los chicos me refiero—se me acerca siento como si algo los alejara, y pensaba que ese algo era Mario, era bastante estúpido pensar eso ,tal vez era porque era fea u olía mal.
No puedo negar que no lo necesitaba, pero por más que lo extrañara no podía tenerlo de vuelta.
Petra chingos se veces se había acercado a Mario pero éste hacia como si ella no existiera, ella le hablaba y el la ignoraba, ella pasaba por su lado y el pasaba de largo, ella hacia todo por llamar su atención pero él no parecía importarle.
Tenía ganas de arrancarle ese pelo rubio que tanto presumía, pero ella y yo sabíamos que eran extensiones baratas.
Pobre chica.
— ¿___________________?—alguien me saco de mis pensamientos.
Sacudí mi cabeza regresando a la realidad, Soraya se encontraba a mi lado. Extrañada de ella aquí fruncí mi ceño.
— ¿Qué quieres? —pregunte.
Yo no me andaba con rodeos.
—Vengo a decirte que Petra planea regresar con Mario.
—Me vale tres kilos de verga, dos para llevar y tres para comer aquí.
—Lo digo enserio. —se cruzó de brazos.
—Yo también. —también crucé los míos.
Soltó un largo suspiro, agachó unos segundos su rostro para después subirlo y mirarme cara a cara.
—Mira, —hizo una pequeña pausa. —no vengó a pelear contigo, sólo quería informarte acerca de lo que planea Petra, ella quiere a Mario de vuelta pero solo lo quiere por su dinero _____________, ella es una interesada de lo peor.
Analicé su cara para asegurarme de que no estuviese diciendo mentiras, pero en realidad decía la verdad.
Su cara se veía bastante seria.