Capítulo 31

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—¿Qué haces aquí? —la pegué a la pared.

Estaba esperando a Ian.

¿Te digo algo? Te equivocaste de dirección, estas en mi casa. Respóndeme si no quieres que llame a la policía.

—Él me dijo que lo esperara aquí. Después él me iba a decir que hacer. Es un maldito psicópata gracias a ti.

—¿Por qué debería de creerte? Después de todo lo que me hiciste... ni Chavez lo haría.

—Soló créeme. Yo te explicaré, pero primero llévame a una clínica —gimió de dolor. La exagerada entonces.

—¿No te bastó con lo que nos hiciste?— la pegué aún más fuerte a la pared.

Pasaron minutos para que ella decidiera responder:

Soy una contratada —suspiró. Se quitó el pasamontañas y sacó un papel de su bolsillo—. Ahora, ¿me llevas a una clínica para que te cuente todo y luego me acompañas a renunciar? —sonrió.

No sabia si concentrarme en estar impactada o en maldecir a  Modest! con su vaina de arruinar vidas, mamaguevada sea.



[...]




—No sé qué hiciste con él y tampoco quiero saber —había convencido a Elisa que distrajera a Ian mientras yo agarraba a Raquell, porque sabía que ellos irían a mi casa.

—Nah, no hice nada, solamente saqué mi Diosa Canales interior —rió—. Lo importante es que no lo dejé que me tocara.

—Raquell me dijo que estuvo bajo control psicológico por su locura hacia otras personas. Ahora yo entro en esa lista de otras personas —estábamos caminando rápido hacia la casa porque el tren que agarramos era el incorrecto. Bueno, al menos no estábamos en Caracas.

—Ya todo tiene sentido —se pegó una cachetada.

—¡Lo mismo dije yo! Su empeño por separarme de Harry no era nada normal, su empeño por recordarme casi todos los días que me conquistaría tampoco era proveniente de alguien normal.

—¡Mi arma! ¡Dejaste a los mariscos esos encerrados en esa mierda! —corrió a la entrada del departamento, subió las escaleras rápidamente y abrió la puerta con la llave.

—Bueno, para mi defensa no sabía que ellos estaban aquí —entré y vi a Niall llorando como carajito en el suelo y a Liam y Elisa abrazados.

Dafaq

—Bueeeno. Niall, ven y abrazame —abrí mis brazos y él se levantó para abrazarme.

Creí que morirías sin haberte casado con Harry.

—Bájale mínimo a tu corazón de gorda fangirl, amigo —le dí golpes en la espalda y lo aparté de mi—. ¿Qué con ustedes? —me les acerqué a ellos que aún seguían abrazados— Bueno, ya. Elisa, nos vamos.

—Estas celosa, Val, es todo— dijo Liam cruzado de brazos.

Sí vale. Ni con Harry me daba el lujo de... tengo que superar eso —agarré a Elisa y la arrastré hasta la puerta.

Espera, que Liam nos lleva.

Iría a terminar mi contrato con Modest!, Yajaira me enseñó a tener dignidad y era mejor renunciar a que me despidieran.

Soy Valentina, mongólica, pero con dignidad.


[...]




—Manos pal techo usted esta es detenio' guevon —entró Niall al cuarto—. ¿Cuando es con la mujer como se dice?

Valentina »h.sDonde viven las historias. Descúbrelo ahora