→ Especial VII: 1/2

793 80 15
                                    

Hi!

El de hoy es un especial bien sensual de lemmon GureShin para celebrar los 1k de votos :3

Como muchos lo pidieron, pos no pude negarme n.n

Disfruten uwu

//♥//♥//♥//♥//

Guren y Shinya estaban en la mesa de la cocina, el mayor leía el periódico tranquilamente mientras el más bajo simplemente lo miraba con aburrimiento y su cara recostada en sus brazos.

Gureeen...llamó con desgano el albino.

¿Qué?contestó el aludido sin mirarlo siquiera.

Gureeen... —volvió a llamar.

Dime qué quieres, Shinya —espetó el azabache girando la cara para mirarlo con su ceño fruncido.

ya lo sabessusurró con voz coqueta en el oído ajeno.

Te dije que no dijo volviendo su vista al periódico.

Pero yo quierohizo un puchero.

Pero no podemos.

Pero yo quiero.

Dije que no y deja de insistir —suspiró sobando el puente de su nariz con una mano.

Gureeen...el aludido lo ignoró—. Gureeen...

Ya callate, como quieras —terminó aceptando mientras dejaba el periódico en la mesa y se ponía de pie.

¡!festejó poniéndose de pie también.

Shinya a veces era tan exasperante, casi como un niño mimado; después de aquel berrinche, había obligado al azabache a ir a comprar mermelada y tostadas sólo para que lo ayudase a cargar toda la cantidad de aquellos elementos que compraría.

Para Guren eso era estúpido, es decir, en la casa habían más de veinte criadas que lo ayudarían gustosas.

En ese momento, el ojizafiro iba de allá para acá seleccionando mermeladas y tostadas en el pasillo correspondiente mientras el ojiamatista lo miraba apoyado sobre un carrito de compras.

Y esta y esta también, oh y esta, y la de allá...murmuraba el albino mientras miraba y agarraba un frasco tras otro.

Calmate, los frascos no saldrán volandopidió suspirando.

Callate —gruñó—. Y este, este igual, de este ya tengo en casa, pero es mejor tener reserva...

Realmente Guren no supo cuando, pero cuando lo notó, el carro de compras estaba lleno hasta el tope de cajas de rotadas, frascos de mermeladas y otras golosinas que quizá y eran para su pequeño Yuu; cansado, el ojiamatista empujó el carrito hacia la caja para pagar mientras el ojizafiro desfilaba enfrente suyo.

Mi mayordomo [MikaYuu] |Terminada|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora