Hoy es 13 de octubre, acabo de llegar de la oficina, estoy muy cansado y sumamente ansioso, en solo unos días llegará el "gran día" y Ana será mi esposa, mi nena se acerca a recibirme con una gran sonrisa.
- Hola mi amor, como estuvo tu día.
- Mucho trabajo, estoy muy cansado-. Le digo. Necesitaba dejar listo todo lo posible y entregarle a Ross la dirección de la empresa porque pensamos salir de viaje por unos días luego de la boda.
- Ven cariño, te preparé un baño que te dejará como nuevo.
- Uhh, que rico, pero prefiero que te bañes conmigo.
- Por mi encantada, vamos.
Llegamos a la habitación y mi nena comienza a quitar mi ropa y yo la de ella. Toma mi mano y nos encaminamos a la tina.
- Amor, ¿cómo estuvo tu almuerzo con Isabella?.
- Bien, cada vez me siento más cómodo con ella, estamos comenzando a tener una buena relación. Me contó muchas cosas de sus padres y de mi madre. Ya sé que su nombre completo era Isabellie Marie Johnson.
- Tenía un nombre muy hermoso.
- Si, estoy madurando una idea.
- A ver, cuéntame.
- Bien, Isabella sigue insistiendo en eso de la herencia, dice que tengo que aceptarla, que me corresponde.
- Yo creo que tiene razón.
- Si, esta tarde estuve pensando en eso y llegué a una conclusión.
- ¿Vas a aceptarla?.
- ¡Si!, y voy a usar ese dinero para crear una fundación dedicada a la ayuda de adolescentes en situación de riesgo y embarazo precoz, la llamaré como mi madre para honrar su memoria y apoyar a esas jóvenes que por inexperiencia o ingenuidad terminan en esa situación tan difícil y en ocasiones no cuentan con el apoyo de su familia.
- Esa es una idea maravillosa, estoy muy orgullosa de ti.
- Espero que podamos ayudar a muchas chicas y a sus bebés para tengan mejores oportunidades.
- Eres muy noble mi amor, eres maravilloso y por eso te amo.
- Yo te amo más, mucho más. Mañana es tu cita con la dra Greene, voy a ir contigo, no quiero perder ningún detalle del crecimiento de nuestro bebé.
- Claro mi amor y yo estaré encantada de que estés a mi lado-. Beso sus labios con ternura.
--
Llegamos a la consulta y esperamos por nuestro turno.
- Ana cómo te has sentido.
- Muy bien doctora, me siento renovada.
- Esas son buenas noticias.
Comienza a revisar a Ana, toma su tensión, su peso, mide su cintura, luego le dice:
- Ven recuéstate, vamos a ver como está tu bebé-. Prepara todo y en minutos tenemos la imagen de nuestro bebé en la pantalla. Ella comienza a manipular su equipo y luego afirma.
- Ahora si puedo decirte con toda propiedad que estas de 9 semanas. Tu bebé lleva un desarrollo muy adecuado. Todo está marchando muy bien-. Mi nena me mira con una gran sonrisa.
- Gracias por tan buenas noticias-. Intervengo. - Doctora entonces ¿cree que podamos seguir adelante con nuestros planes de boda?, ¿nos levanta el reposo?, ¿podremos hacer nuestro viaje de luna de miel?-. Comienza a reírse con complicidad.
ESTÁS LEYENDO
Christian Amor
RomanceAnastasia se considera una estudiante excelente, felizmente comprometida aunque su novio nunca le ha propuesto compromiso, ¿qué pasará cuando ella descubra que su novio la engaña y otro hombre aparezca en su vida. Nota: esta es una historia...