Preámbulo

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De camino a SIP paso por el hospital, mi alma se encoge de tristeza al ver el estado de derrota en que se encuentra Brat, a pesar de que Angie ha dado pequeños indicios de recuperación como intentos de abrir los ojos y ha movido algunos dedos, los doctores han dicho que  necesita otras cirugías, les informé que posiblemente hoy tengamos noticias de su familia y eso les dio un poco de tranquilidad. Ella me preguntó por Christian y se extrañó muchísimo de que no estuviera con mis custodios.

- Están por allí de encubiertos, es una nueva estrategia que se le ocurrió a Christian porque le insistí que los retirara, ya estoy cansada de andar todo el día con ellos, me siento vigilada, cualquiera diría que él desconfía de mí.

- Ana no seas injusta, él solo quiere protegerte y no lo culpo, después de lo que te pasó es completamente comprensible su actitud.

- Es cierto pero creo que de esta manera me siento más cómoda, por momentos puedo olvidarme de ellos y pensar que soy una chica común y corriente viviendo su vida en libertad.

- Te entiendo, Ana sé que esta situación nos tiene a todos muy tensos pero, ¿qué has pensado?, ¿cuándo crees que podamos decirle todo a Christian?.

- Tal vez en unos días, ahora mismo está bastante complicado con unos negocios que está cerrando, eso lo tiene un poco tenso, no creo que sea un buen momento.

- De acuerdo, yo tampoco estoy en un momento muy adecuado para abordar ese tema tan álgido.

- Debo irme, te llamaré más tarde.

- Claro querida, que te vaya bien-. Y me abraza con cariño besando mi frente.

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Llego a SIP y de inmediato Claire se levanta de su puesto y camina a mi lado.

- Buenos días Ana.

- Buenos días.

- ¿Y eso?, ¿dónde están tus "acompañantes"?, ¿Y ese milagro que no vienen despejándote el camino?-. Me preguntó y sentí un leve sarcasmo en su voz. ¡uhhh!.

- Ya no los volverás a ver, Christian y yo hemos terminado, me cansé de su control constante y de qué me tuviera vigilada día y noche.

- Te entiendo, debe ser muy estresante.

- Lo es, por eso ahora me siento libre y dispuesta a comenzar una nueva vida.

- Me alegro por ti. Mira aquí tienes la correspondencia y a las 10 hay una reunión y tienes que ir y llevar tus notas sobre los manuscritos que has evaluado.

- Gracias Claire.

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El día ha transcurrido con normalidad y he logrado mostrarme bastante tranquila y despreocupada, he revisado con cierta frecuencia mi correo para ver si tengo noticias de Christian pero solo me llegó un correo de esa arpía vanagloriándose:

"Ja ja ja, estoy muy feliz Anastasia, he alcanzado una meta pero mi objetivo es recuperar a mi amo y creo que sin ti entorpeciendo mi camino lo lograré, él no sabe estar solo, muy pronto necesitará una sumisa y yo estaré allí para él, seré su primera opción, estuve con él por mucho tiempo pero dañé nuestra relación pidiéndole más, no volveré a cometer ese error y se quedará conmigo para siempre, será mío, solo mío. Ya verás es solo cuestión de días y él volverá a mí, no te preocupes, te mantendré informada, ja ja ja ja..."

Leer ese correo me produjo náuseas, la sola idea de que él vuelva con esa loca me descontrola, eso no es posible, él ha estado conmigo todo este tiempo sin que tengamos intimidad, ¿acaso ha estado "aliviándose" por allí con cualquier mujerzuela?, no, no, no puede ser, no puede volver con ella, no puede dejarse enredar, solo quiere desesperarme, sólo quiere hacerme dudar de él, no puedo permitirlo. El temor me ahoga, camino de prisa y me encierro en el baño y dejo que la angustia se drene por mis ojos. Soy una idiota, sé que está loca, ¿por qué permito que sus palabras me hagan daño?, ¿acaso no confió completamente en él?, ¿él seria capaz de engañarme? Y peor aún, ¿engañarme con ella?.

Christian AmorDonde viven las historias. Descúbrelo ahora