CAPITULO XXXVI
—¡Buenos días hermana! —saltaba Cecilia sobre la cama.
—¿Qué pasa? ¿Qué pasa Ceci? Ya estas grande para estas cosas.
—Lo sé, pero quería saber si puedes verme aún.
Un silencio aguardo la habitación mientras Abigail la veía fijamente.
—¡Dime Abigail! ¿Me puedes ver? —preguntaba Cecilia con un tono de voz elevado por emoción
—Perfectamente Cecilia, ya ni siquiera veo borroso —gritó de felicidad Abigail— ¡no pensé que estuvieras tan grande!
—¿Qué son esos gritos? —preguntaba doña Elia entrando a la habitación.
—solamente quería saber si Abigail veía y sí, dice que me ve perfectamente —dijo Cecilia abrazando a su hermana.
Doña Elia se quedó sin palabras, estaba muy contenta de que su hija pudiera ver de nuevo, ya había sido mucho tiempo de no hacerlo; Abigail se quedó observándola fijamente y pudo notar el pelo canoso de su madre, habían pasado dos años que no la veía y el rostro de doña Elia ya tenía más arrugas de las que recordaba.
—¡Eres muy hermosa mamá! —dijo Abigail abrazándolas a las dos— ¡Son muy hermosas!
Durante la semana todo se fue poniendo al corriente, Estefania había decidió pasar su dieta en casa de su mamá pues su esposo era hijo único y sus padres vivían lejos, así que la mejor opción era la casa de su madre, Abigail estaba preparándose para ir a visitar a su tía Eva, les había pedido a todos que no dijeran ni una sola palabra al respecto, la comunicación con su tía no era muy cordial desde que dejo a Damian así que pretendía llegar de sorpresa para hacer las paces con ella.
Pero en su corazón también deseaba encontrarse con aquel que era el amor de su vida, su corazón se llenaba de emoción con tan solo pensar que posiblemente lo encontraría en el pueblo al lado del lago como ya había pasado la primera vez y durante su viaje no dejo ni un solo minuto en pensar en Damian, ¡su Damian!
Cuando llego a casa de doña Eva no la encontró.
—Seguramente esta con la señora Cortez —pensó, dirigiéndose al lago.<<—Me da gusto volver a verte Abigail
—¡Oh lo siento! ¿Quién eres?
—¿Acaso no me reconoces?
—¿Debería de hacerlo?
—Sí, hace unos cuantos días atrás te salve de que te perdieras.
—¿Te gusta venir al lago por lo que veo?
—Y a ti te gusta fastidiar a todas las personas ciegas que vienen por acá por lo que escucho.
—¡pues sí! No vienen chicas como tú por acá tan seguido, Ok, ok, comprendo no me piensas hablar, de acuerdo lo haré yo.
—¿Oye enserio no tienes nada más interesante que hacer que estar fastidiándome?
—Sí si lo tengo, pero resulta que tú eres más interesante que todo lo que tengo que hacer.
—Tú vida es muy aburrida por lo que escucho entonces.
—¿Por qué lo dices?
—No pienso tener ninguna conversación contigo así que mejor vete, según recuerdo el lago es lo suficientemente grande como para que te puedas sentar en otro lado.
—Sí, pero solamente de este lado estas tú.
—Me tengo que ir
—¿Por qué te desagrado?
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DE LO MÁS PROFUNDO
Romance*Sin editar Hay una línea muy delgada en lo que pudo ser y lo que será. Abigail es una mujer joven que ha pasado la peor desilusión de su vida luego que su prometido la engañara a pocos días antes de su boda, y pareciendo que la vida se ensañó con e...