Just Friends [Zayn Malik & Tu]

Capitulo 109- I'm not your problem

Zayn:

Esto fue una mala idea.

Harry no fue lo suficientemente grosero como para decirme que no viniera, sin embargo, jamás llego a decir lo contrario. Incluso los chicos intentaron no hablar sobre la fiesta de Harry cuando yo estaba presente y él no. Casi como si pensaran que no era de mi incumbencia. Que tenía prohibido asistir. Y digamos que de cierta forma así era. Y a mí me daba igual. Además, no tenía muchas ansias de asistir a una fiesta desde lo sucedido el viernes pasado. Porque no hay nada mejor que un montón de policías queriendo arrestarte para evaporar de tu cabeza cualquier clase de idea relacionada con salir a divertirte por un rato, ¿no? Y es que esta ciudad esta tan limitada, que infringir la ley parece ser lo más divertido que podrías hacer para pasar el rato. Y aunque en el pasado eso de cierta forma me atraía, ahora no me divierte tanto la idea de sorprender a mis padres al llamarlos desde una estación policíaca. Así que no. No me decepcioné al no ser cordialmente invitado a la fiesta de Harry.

Hasta ahora.

No me mal entiendan. No intento buscar problemas. O por lo menos eso me digo a mi mismo mientras estaciono mi auto a un par de calles de la casa de Harry. Verán, mis intenciones son buenas. Realmente buenas. O me intento convencer de que lo son. Como sea. No busco problemas. Solo vine a checar algo.

O más bien a alguien.

-Soy un idiota- murmuro, pero ni siquiera eso logra detenerme, ya que aun así me bajo de mi auto.

No hablare con nadie. No hare contacto visual con nadie. No me quedare más de quince minutos. Solo repasare la casa con rapidez y una vez que la encuentre, una vez que sepa que ella se encuentra aquí, una vez que la vea divertirse como una adolescente común y corriente, me iré. Porque sabré que ella se encuentra bien. Que está segura. Que es feliz.

Como si eso fuera a pasar, pienso con amargura.

Ella no está bien, está dañada y, sobre todo lo demás, es infeliz. Y supongo que esto, toda esta situación, me hace ver un poco masoquista porque a pesar de que me destroce verla de esa forma, no puedo dejar de buscarla. Todas las mañanas la miro caminar ese pequeño tramo entre la puerta de su casa y su auto para manejar hacia el instituto. Todos los días me estaciono a una distancia cercana, pero prudente, de su auto. Todos los días camino por los pasillos del instituto que ella más frecuenta. Siempre con la esperanza de encontrar un cambio en su expresión impasible, en su postura rígida, en sus ojos tristes.

No se asusten. No soy un psicópata, acosador o un masoquista. Solo soy yo. Y ella es ______. Y yo estoy dolorosamente enamorado de ella.

Es por eso que hoy no pude evitar notar su ausencia. En la mañana su auto no se encontraba frente a su casa, lo que me hizo preguntarme si había madrugado. Entonces, llegué al instituto y busqué su auto por todo el maldito estacionamiento. No lo encontré. Entonces, pensé que talvez todo se había arreglado. Talvez no había cometido un error al contarle a Valeria sobre lo sucedido en la fiesta del viernes. Talvez las cosas entre ellas se habían arreglado. _______ probablemente admitió haber cometido un grave error al acudir a las drogas en lugar de sus amigas. Ellas hicieron las paces y _______ aun no llegaba a clases porque se encontraba en casa de Valeria, ya que la recogería para asistir a clases, como solía hacerlo. Porque ellas siempre llegaban a último momento cuando eso sucedía, ¿no? ______ me contó sobre todas esas veces que recibieron regaños de parte de sus profesores por llegar tarde a clases. Talvez eso sucedía en ese momento. Talvez solo se les hizo tarde. Entonces timbraron y fui yo el que llegó tarde a clases, esperando toparme con ella. Todo está bien, me decía, ellas seguramente se saltaron las clases porque tenían muchas cosas que contarse. Entonces llegó el receso y no pude evitar sentirme preocupado al encontrarme a una Valeria mucho más pálida de lo normal, sin maquillaje y con ropa tan deprimente como unos pants y chamarra grises. Lo cual era claramente alarmante, ya que ella siempre parece el resultado los arcoíris y un montón de brillantina combinados. No necesitaba preguntarlo. Con verla fue suficiente para saber que todo se había ido a la mierda. Logreé llevarla a un pasillo vacío para preguntarle sobre ______. La simple mención de su nombre fue suficiente para que sus ojos azules se llenaran de lágrimas. Solo entonces me di cuenta de lo hinchados que estaban.