-Gracias Víctor por venir, me gusta tu compañía, y me distraes mucho.
-Gracias a ti por recibirme también, esta ciudad es genial.
Sonreí.
Me terminé el café y me despedí de él con un beso en la mejilla. Bajé y me dirigí a la estación para tomar rumbo a Old Trafford.
Otro día más.
Estos días con Víctor me he sentido mucho mejor y me he distraído bastante del tema "Bastian".
Creo que tal vez lo mejor sea dejar esto, quedar solamente de amigos y ya está, lo único que haremos será hacernos daño, y eso no debe ser así.
Abrí el portal y fui por la parte de atrás del edificio, miré al frente y vi como un coche obstruía la salida de detrás.
-Putos ingleses, no saben conducir.
El coche estaba muy limpio, en todos los sentidos y tampoco estaba encendido. Me acerqué despacio y miré por dentro pero no había nada, hasta que algo captó mi atención, un sobre en la luna, miré a todos lados y cogí el sobre para ver lo que había, cogí la nota y me dispuse a leer.
"Se acabó el metro, ya tienes coche
B"
Miré el coche abrumada y me mandé las manos a la cabeza. Miré el reloj entre la impresión y fui disparada al trabajo para no llegar tarde. Me costó un poco acostumbrarme pero al final lo supe llevar bien.
Llegué a mi trabajo tiritando y entré dentro rápidamente para pillarme un café. Después, subí a mi despacho, y llamé a la secretaria para que llamase a Bastian.
-Llama a Schweinsteiger, dile que venga ya.
-¿Urgente?
-Sí.
Colgué.
Al rato oí como subió rápidamente. Pasó y yo me levanté para hablarle.
-Bue...
-¿Cómo se te ocurre regalarme un coche?
-Ah...ya lo has visto, ¿Te gusta?
-Contesta a mi pregunta.
-Lo necesitas, no vas a estar toda la vida yendo en metro.
-Pues si yo quiero voy en metro o andando.
-Pues no me da la gana.
-Vas a devolver ese coche ahora mismo. No lo quiero.
-Sí lo quieres, no lo voy a devolver.
Me senté en la mesa mirándole indiferente.
-Bueno, pues inutilizado se quedará.
Se acercó a mi peligrosamente.
-Como no me dijiste que no necesitabas nada pues yo supuse por mi cuenta...
-No tenía nada que decir.
-Yo sólo echaba de menos hablar contigo, y quedar...
-Eso se acabó.
