-Yo…acepto. -Digo sin mas alternativas.-Mubarak, Mubarak. -Se escucha en fondo.
-Felicidades. -Cuelga y me da un abrazo que sólo transmite amor.
-Jazakillah Khairan. -Digo con un gran vacío en el alma pero no tan notable. -Ya regreso, voy a abrir la puerta. -Asiento pérdida en mis pensamientos.
No tenía más alternativa que esa, si rechazaba, Zayd se enfurecería demasiado, la reputación de el ante el pueblo de su tío, quedaría mal. pero y ¿mi padres?...cuando mis padres se den cuenta de que estoy casada y sin su consentimiento, ¿qué haré?, ¿qué les diré?, ¡CON QUÉ CARA LOS ENFRENTARÉ!.
Suspiro hondo y cierro los ojos, necesito paz, tranquilidad y un poco de aire libre. Necesito huir de todos, de Zayd, de Farah, de mis padres. ¡De todos!.
-¿Estas bien?. -Me doy cuenta que tía Najima había salido del cuarto.
-¿Cuándo salió del cuarto?. -Pregunto confundida.
-Hace unos minutos, fui a abrir la puerta, te avise pero al parecer no prestaste atención.
-Disculpe.
-No es necesario, bajemos para servir el almuerzo.
-¿Mi marido ya regreso?, que rara me siento diciendo marido. -Digo divertida.
Ríe. -No, todavía no llegan pero se que cuando regresen querrán comer de una vez.
-Esta bien, vamos.
Entramos a la cocina y una niña un tanto pequeña entra y toma asiento en unos de los taburetes.
-Ella es Nadia, tiene 8 años…como sabrás es mi hija.
-Assalamualeikum. -Muevo la mano varias veces junto con una gran sonrisa.
-Waleikumsalam cariño. -Devuelvo la sonrisa. -Soy Zaida y soy la esposa de tu primo Zayd.
-Mubarak, ¿cuándo se casaron?.
-Hace unos minutos. -Digo reída.
-Mubarak nuevamente. -Sonríe.
-Jazakillah Khairan.
Arreglamos la mesa y en eso llegan, se lavan las manos y toman asiento.
Le sirvo la comida a Zayd y a Nadia.
-¿No vas a comer?.
-Zaida hija no te preocupes, toma asiento y almuerza. -Asiento y obedezco.
Minutos más tarde.
Ayudo a tía Najima a lavar los platos, mientras platicamos de los gustos de Zayd.
-Es un poco exigente pero creo que como eres su mujer te lo dejara pasar.
-Uff yo no puedo lidiar con gente exigente, porque para cada cosa hay un tiempo.
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Segundo Plato
RomanceZayd: un hombre poderoso que lastima con palabras y hiere con miradas, muy bueno para los negocios. Sabe amar pero circunstancias del pasado lo hacen ser egocéntrico, egoísta y malo. Zaida: una joven hermosa, con una familia complicada y muchos pr...