Privilegios Ilegales

Capítulo Final. <80>

—Vistos para sentencia. Despejen la sala. —Mi brazo ya se encontraba abajo. Miraba atentamente al Juez esperando mi sentencia. Lamentándome el que realmente jamás hubiese podido salvar nada. La evidencia que tenían incriminándome era más que suficiente, sabía que iba a perder el caso... ¿Qué podía protestar ante fotos y vídeos?, ¿qué podía protestar ante "Ella podría tener relaciones con cualquiera de sus fans, cualquiera aceptaría", "Ella pudo haber tratado con más menores por la posición en la que está", la audiencia había sido otra ruina en este juicio. Sabía que en el fondo, se me estaba dando la maldita oportunidad de defenderme sólo para generar controversia. Para generar un texto con cada palabra que salía de mi puta boca, para la muchedumbre.

—La acusada Karla Camila Cabello Estrabao se declara culpable, será sancionada a 6 años de prisión por estupro con una menor de quince años. Con evidencia de al menos dos veces manteniendo relaciones con una menor y se estima, más de un mes de relación. —Mi boca cayó al suelo. Había cooperado. ¿¡CÓMO MIERDA PODÍAN DARME SEIS AÑOS DE PRISIÓN!?

—U-Usted n-no puede... ¡USTED NO PUEDE...!

—Se cierra la sesión.

POV Lauren

Estaba escondida justo donde Dinah como me lo había dicho, habíamos esperado hasta muy noche para entrar. Ella aún no me había dicho absolutamente nada de Camila pero dijo que me tendría una sorpresa si la acompañaba, asique suponía que se trataba de ella.

Dinah hizo una seña rápida, lo había conseguido, el policía que la vigilaba salió a afuera, podía pasar. Caminé entre el oscuro pasillo y entré a la habitación.

—Gracias. —Susurré. Dinah me guiñó un ojo con una media sonrisa y salió de la habitación, no sin antes susurrarme un: "diez minutos".

Tragué saliva al ver la celda de espera, era pequeña. No contaba con casi nada dentro, Camila estaba tumbada en el piso durmiendo... Maldición, todo esto era mi puta culpa. Caminé hasta que quedé frente a las rejas y llamé su nombre en un grito ahogado.

—¡Camz...! —Llamé. Pero ella ni se inmutaba. Podía notar sus ojeras y sus ojos hinchados. Mierda, no me gustaba que llorara—. ¡Camz! —Casi grité. Su cabeza se elevó e inmediatamente nuestras miradas se conectaron casi de manera automática. Tres días sin ver sus preciosos ojos. Tres días sin tocar su cálida piel... Tres días sin tenerla a mi puto lado.

—¡L-Lauren! —Rápido se levantó del piso y corrió hasta quedar del otro lado de las rejas—. ¿¡C-Cómo estás!? —Preguntó con desesperación. No pude si quiera contestar cuando sus brazos se asomaron entre los barrotes y tomaron mi cara uniendo nuestros labios—. Te extrañé... —Susurró mientras sus delicadas manos acariciaban mis mejillas.

—También yo Camz...

—Aguarda... ¿Cómo le hiciste para entrar aquí?

—Dinah... Uno de sus primos trabaja aquí y bueno... Él dijo que intentó explicarte el plan pero simplemente lo mandabas a la mierda... —Dije tímida. Camila soltó una pequeña risita mientras limpiaba una de sus lágrimas.

—Es verdad... —Hubo unos segundos de silencio.

—Sa... Salió todo bien... ¿Verdad? —Pregunté ansiosa con una sonrisa en la cara.

La enorme sonrisa que tenía en la cara se desvaneció cuando sus ojos de cristalizaron.

—N-No... No es cierto...