James Potter, Sirius Black, Peter Petegrew y Remus Lupin están empezando su primer año en Hogwarts. Pero una chica de cabellos rojos como el fuego, ojos verdes, tez clara y muchas pecas se les une cambiando sus vidas por completo.
Estos siete año...
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- Mueve el culo Lis - Dijo James levantándome de la cama - Hay partido hoy princesa.
- ¿Qué hora es? - Pregunté todavía medió adormilada.
- Son las ocho - Dijo tirándome su camisa y guiñándome un ojo.
Me levanté me puse su camisa y salí del cuarto. Al llegar al mío me cambié con mi uniforme de Quidditch.
¿Sabían que el número de mi túnica es el 7? ¿No? Pues ahora lo saben. Y como Minnie nos ama, nos dejó tener el mismo número de túnica, así que prácticamente combinábamos.
Tomé mi escoba y salí de la habitación, ya las chicas habían salido.
- Vamos preciosa - Dijo James tomando mi mano.
Salimos y nos dirigimos al Gran Comedor.
Sirius ya estaba comiendo junto a Peter y Remus.
- Hace mucho que no hacemos una broma o fiesta - Comenté - ¿Cómo se pondrían los Slytherin si ponemos color rojo y dorado en sus túnicas?
- Creo que se pondrían molestos - Dijo James siguiéndome la corriente
- ¿Qué tal si probamos para ver qué hacen? - Dijo Sirius cómico.
(...)
- ¡Evans, Potter, Black! - Gritó Minnie justo antes de que empezara el partido, haciendo que los tres volteáramos a ver la con una sonrisa inocente.
- ¿Si profesora? - Pregunté sonriendo.
- Los quiero en mi oficina luego del partido - Dijo apuntándonos acusatoria mente.
Se fue y luego nos dirigimos detrás de las gradas para el típico discurso de James. Este es mi primer partido como cazadora, y también es él último de la temporada.
- Bueno, quiero llevarme esa copa de Quidditch, así que patéenle el culo a esos Slytherin - Dijo James - Ahora, Lis, trata de atrapar todas las pelotas como en la práctica.
- Si Cornamenta - Dije haciendo un saludo militar.
Me acerqué a mi escoba y me monté en ella como los demás.
Di una patada y todos al mismo tiempo nos elevamos en el aire.
Los de Slytherin tenían mala cara y sus uniformes estaban de color escarlata y dorado.
Todos los de las demás casas se reían del equipo, creo que hasta Dumbledore se rió un poco.
- Quiero un partido justo - Dijo Madame Hooch - Capitanes dense la mano.
James se acercó a Flint y ambos juntaron la mano, ambos molestos.
Yo estaba en formación al lado de James y el chicos que estaba el frente mío me miraba con odio. Le guiñé un ojo antes de que sonara el silbato y luego me lancé a recoger la Quaffle.
