Llevados por el deseo. (HunHan)

Capítulo 70: Esperanza.

-Min es una niña genio.- dice la psicóloga.- Está por encima del promedio, sus habilidades mentales y sociales son mucho mas altas que las de los demas niños de dos años. Pertece a ese pequeño 5% de niños sobre desarrollados.

Sehun sonríe todo orgulloso de su pequeña reina.

-En cambio Han...- el rostro de la psicóloga decae un poco y yo solo me preparo para malas noticias.- Él tendra mas problemas a la hora de aprender y ser sociable. Han es un niño especial porque sus sentimientos están mucho mas desarrollados y sus decisiones siempre se basaran en como se sienta.

-¿Y porque tal diferencia entre ambos?.- pregunta Sehun.

-Bueno, lei tu historial médico durante el embarazo y fuiste realmente sentimental.- afirmo totalmente avergonzado.- A parte que Han fue infectado por la toxoplasmosis, tus sentimientos durante ese tiempo fueron captados por él. Es por eso que puede ser un niño "lloron", porque la tristeza era el sentimiento que dominaba en ti.

-¿Entonces lo que quiere decir es que Han será un niño con pocas capacidades de aprendizaje por culpa de la toxoplasmosis?.- la psicóloga asiente a lo dicho Sehun.- Bueno Min estará para él. Lo va a ayudar.

Me reconforto un poco con las palabras de Sehun. Él tiene razón, Min estará ahí, nosotros tambien. Han no estará solo.

Cuando salimos del consultorio de la psicóloga, Sehun nos comunica que tenemos hasta la noche para separarnos momentaneamente.

Así que como hemos estado haciendo, disfrutamos de la tarde en ocasiones familiares. Jugando, comiendo lo que los niños pedian, en el cine. En un día se podian hacer muchas cosas.

Ya antes de irnos de ese centro comercial, Sehun propuso que entraramos a la cabina de fotos. Él cargó a los dos niños para que esten a nuestra altura, mientras yo abrazaba mi vientre. Era una foto hermosa. Todos saliamos con grandes sonrisas en nuestros rostros. Sin embargo lo que mas resaltaba era el brillo en nuestros ojos.

-Amo haber hecho el amor contigo.- susurra Sehun en mi oido. Estamos caminando de la mano, en tanto los niños caminan delante de nosotros.- El haber pecado vale la pena. Miranos ahora, así será dentro de pocos meses.

-Estas muy seguro de que ganaremos.- Sehun sonríe.

-Es porque lo haremos.- acaricio mi vientre una vez mas.

-¿Está todo bien?.- afirmo con mi cabeza.- Lo digo porque has hecho eso todo el día.

Miro mi vientre. Era verdad. Pero no era porque me sintiera mal. Era todo lo contrario. El bebé habia estado inquieto, moviendose y pateando. Es como si siguiera la energía de sus hermanos.

-Solo está emocinado.- bostezo totalmente cansado y sin mas energía.
Felizmente encontramos el carro y subimos de inmediato.

Decir adios, aunque sea momentaneo, es dificil. Y los niños lo sienten, porque ambos se ponen a llorar.

Min no quiere soltarse de Sehun y Han no deja de decirme: Papi, po fao.

Papi, por favor.

Que mi niño, mi pequeño hombresito me diga esas palabras me destrozaba. Por eso estoy mas decidido ha acelerar el proceso.

***

Sehun va a estudiar mientras yo me apresuro a llegar al juzgado. Sin abogado. Solo seré un padre contando su verdad.

El juez de nuestro caso accede a recibirme, luce sorprendido de verme. Yo tambien lo estaría.

-Joven Oh, ¿que lo trae por aquí?.- dice. Mientras con su mano señala el asiento frente a su escritorio.