Capítulo 17

954 65 10
                                    

Frené en la arena viendo como el viento formaba un pequeño torbellino de arena cerca de nosotros que luego desaparecía. Los dos coches de mis betas se colocaron a mi lado y esperamos a que no se volviera a levantar la arena, ya que si lo hacía podría volcarnos.

Arranqué de nuevo y mis betas también, yendo como siempre detrás de mí. Faltaba poco, ya estábamos en el desierto de verdad, ahora solo tenía que rugir para que ellos aparecieran. Escuché mi estómago hambriento y cerré los ojos concentrándome en otra cosa. Después de eso, decidí frenar y salir del coche, notando la arena en mi cara y ropa rota.

Los coches donde iban mis betas frenaron al lado del mío y bajaron todos, colocándose detrás de mí. Di unos pasos hacia delante mientras mis ojos se tornaban rojos y me agaché, apreté en mi mano la arena y miré hacia delante.

- Ya sabes que hacer...- escuché a Jack, que estaba en frente de mi.- Se un alfa.

Respiré relajada y asentí con la cabeza, tomé aire y rugí mientras mis ojos brillaban y sentí los de mis betas también. Pronto el viento volvió a levantar la arena y entre ellos volvió a aparecer Zeus, que la verme sonrió y vino hacia mí para abrazarme.

- ¿Estás bien? Te llevaron a Beacon Hills y no supimos de ti.

- Sí, estoy bien.- dije separándome de él.

- Hueles a sangre.- dijo Dalila abrazándome.

- Tuve un accidente, pero me he curado.

- ¿Qué tal estás Thalia?

- Bien, señora.- dije sonriendo a Anne.

- Te has traído a toda la manada.

- No toda, falta Ted, como siempre.- dije sonriendo.- Ya lo saben.

- ¿Lo aceptan?

- Sí, solo me quieren a mí, no les importa si rompo las leyes.

- Eso sí que son buenos betas.- Zeus sonrió.- Estás sucia y tienes hambre.

- Demasiados días en el bosque, meditando.- dije sin decirle nada de aquellas pesadillas.

- Venir todos, te bañaremos y te daremos otra capa de líneas.- Anne se acercó a mí y acarició mi rostro.- Te cambiaremos de ropa, parecerás de los nuestros de nuevo.

Asentí y miré a mis betas, ellos entraron en los coches y yo también, siguiendo de nuevo a los perros salvajes hasta su guarida bajo tierra. Frenamos y entraron todos antes que yo en aquel agujero.

- Los Calavera han ido de expedición.- dijo Zeus informando mientras caminábamos.- Volverán esta noche y aún hay habitaciones para todos, pero como venga alguien más, dormirá en el suelo.

Reí y todos los perros salvajes llevaron a mis betas a sus habitaciones mientras yo iba con Zeus y su familia a la sala de reuniones de nuevo. Cuando pasé la entrada recordé aquel día, en el que yo lloraba y Scott me miraba para luego irse, fue el día antes del accidente.

- Preparan tu bañera, tu ropa y lo demás ahora mismo, así que puedes quedarte aquí y te traeremos algo de comer.

- Gracias Anne.- ella se fue y me senté en una de las sillas con los hermanos.- ¿Qué tal desde que me fui?

- A la pista del perro salvaje mujer.- dijo Dalila alegre y posó sus manos emocionada en la mesa.- ¿Sabías que fue con la que se iba a casar Zeus?

- ¿Qué?- miré a Zeus confundida.- ¿Te ibas a casar?

- Gracias hermanita.- él sonrió irónicamente y suspiró.- Sí, lo iba a hacer, cuando te fuiste tenía que tener pareja así que la elegí a ella, era fuerte e inteligente, pero cuando íbamos a casarnos, le dije que no podía hacerlo.

Dark Wolves (Theo Raeken)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora