Dark Wolves (Theo Raeken)

Capítulo 42(1)

Miraba a la ventana del Jeep mientras Stiles conducía de vuelta a casa de Scott, poco a poco se acercaba la noche. He estado en silencio todo el camino desde que me contó la historia Stiles, ahora no sé si puedo confiar en él, hasta en el último momento fue un cabrón usando algo tan importante como la amistad para llegar a ser el mejor, sabía que era competitivo, pero no sabía su nivel de competitividad.

Stiles acariciaba mi mano, que se encontraba en la palanca de cambio de marcha para que pudiera conducir. Me estaba apoyando desde que me lo contó y vio mi reacción, nada más terminar me abrazó y ha estado sujetando mi mano desde que bajamos las escaleras. Ahora volvíamos para que pudiera hablar con Scott.

Él frenó en frente de su casa y soltó mi mano para abrir mi puerta, luego volvió a cogerla y acariciarla para darme tranquilidad, pero no funcionaba. Entramos en la casa y se encontraban los mismos de antes, pero ahora había dos personas más.

- Jackson...- Stiles miró a uno de ellos que le sonrió.- Señor McCall.

- Hola Stilinski.- el hombre que había le saludó y luego me miró a mi.- ¿Cómo te llamas?

- Thalia, señor.- dije sabiendo que era el padre de Scott.

- Encantado.

- Lo mismo digo.- el chico que se llamaba Jackson me saludó y sonreí levemente, o eso intenté, porque me salió una mueca.

- Creo que tienes que hablar con alguien, Thalia, después nos presentaremos mejor.- Stiles me miró y sonrió dándome fuerza, yo solo asentí y solté su mano.

Fui al salón, donde se encontraba Scott. Me senté en la otra esquina del sofá donde él no estaba. Tenía sus manos entrelazadas entre si y tenía la espalda encorvada con sus antebrazos en las rodillas, estaba cabizbajo, así que decidí hablar yo.

- Scott, yo...lo siento, no debería haberte gritado ni mucho menos atacado, pero con la Gran Luna cerca no...

- Está bien.- levantó su mirada seria y me observó.- Siento ponerme así con ese tema es solo que...

- Está bien.- dije ahora yo, tragando saliva y notando el nudo de la garganta tan molesto.- Creo que siempre le tiene que pasar eso a un alfa, aunque sea uno verdadero.

Él soltó una pequeña carcajada silenciosa que hizo que subiera su pecho mientras sonreía hacia mi dirección. Apreté mis labios y luego relamí el inferior, haciendo que se dé cuenta de que ahora mismo, mi mundo se estaba cayendo.

- Ven aquí.- abrió sus brazos y me tiré hacia ellos abrazándolo con fuerza.- Está bien, tranquila, todo está bien, sea lo que sea que haya pasado se solucionará.

Acariciaba mi espalda mientras escondía mi rostro en su cuello, mojando su chaqueta de lágrimas. Sollozaba como una niña pequeña agarrándome fuerte a él, sentía ahora el sentimiento que Hayden y Liam sentían hacia él, Scott era como un padre para todos.

- ¿Estás bien?- se separó de mi y acarició mi rostro limpiando un par de lágrimas, negué con la cabeza rápida y me volvió a abrazar.- Tranquila, Thalia, todo se solucionará...

Me fui tranquilizando mientras me abrazaba y sabía que Melissa, Stiles, Chris y Lydia miraban desde el marco de la puerta como era nuestra reconciliación, que para mi será la mejor. Después de que me separé de él, limpió un par de lágrimas más y del resto me encargué yo mientras me levantaba cogidos de la mano. Fuimos a la cocina y allí el padre de Scott se presentó mejor, después tuvo que irse a la comisaría junto el padre de Stiles por un robo. Cuando él se fue, me contaron la historia de Jackson, así que supongo que su padre no sabe nada de lo sobrenatural.

- Y se fue a Londres.- terminó Scott.

- Gracias a dios.- susurró Stiles y sonreí escuchándole.

- Así que fuiste novio de Lydia...- él asintió.- Que pena, ya está cogida.- Stiles sonrió y Lydia me miró asombrada.

- Creo que tú y yo nos vamos a llevar bien.- dijo.

- Eso espero, Jackson.

- Ahora lo que todos se preguntan.- dice Stiles.- ¿Por qué has vuelto ahora?

- Derek me llamó hace unos días, pero no pude venir en ese momento, ahora estoy aquí preparado para ayudaros.

- ¿Sabes luchar?- preguntó Scott.

- Derek me enseñó antes de irme.

- Thalia.- Malia me llamó.- Creo que es hora de despedirse.