¡SOLO QUIERO AMOR! (Sterek)

Capitulo 21

Cuando pude relajarme inmediatamente pedí poder ver a mi hijo. Según mi padre el día que sufrí el ataque y estuve sedado por un día completo Liam se hizo cargo de Dylan. Luego Lydia lo llevó a su casa y lo trataban como si fuera su propio hijo. Agradecía tenerlos como amigos, pero también quería que me devuelvan a mi hijo el cual vino encantado de la casa de su tío Jackson que jugó todo el tiempo con él a la pelota y los videojuegos, cosa que yo muchas veces no hacía porque trabajaba y era una especia de ama de casa, pero con pene.

Mi pequeño entró rápidamente a la habitación del hospital y se echó a mis brazos como si hubieran pasado años que no lo hiciera. Me acariciaba la cara y me susurraba cuando te amaba en el odio lo cual me llenaba el alma completamente. Era como el sentimiento de tenerlo en mi panza cuando era un bebé. Deseaba con todo mi corazón que no crezca nunca. Quiero que mi bebé siempre dependa de mi así nunca quedaré solo.

—Derek está afuera papá – Dylan me susurró en mi oído –. Y el tío Theo también.

Mi cejo se frunció automáticamente.

—¿Tío Theo? – Pregunté ignorándome olímpicamente el hecho de que Derek estaba afuera de la habitación. Él solo sonrió.

Yo le acaricie la mejilla.

—Y dime Dylan ¿Desde cuándo te llevas bien con Theo? Nunca lo habías visto y ahora lo llamas tío.

—Es que cuando la tía Lydia fue a buscar un café él se quedó jugando conmigo y me divertí mucho. Me preguntó cosas sobre ti y sobre mí, y como es tu amigo le respondí todo. Le conté que iba al kínder, que nunca me dejas comer comida chatarra, que juegas conmigo a los videojuegos y toda esa clase de cosas. Y nos invitó a su casa para que los tres juguemos con su Wii ¿No te parece espectacular?

Yo solo suspire tratando de calmar los nervios de mi hijo. Theo había despertado la fiera de los videojuegos y no iba a parar hasta tener el control de la Wii en su mano. Realmente se metió en la boca del lobo con Dylan.

—Te prometo hijo que algún día iremos a la casa de Theo y le obligaré a que te haga jugar con su consola – El me abrazó fuertemente por el cuello – Y no me abraces solo porque estoy cumpliendo tu capricho hijo.

Él se río fuerte.

—No lo hago por eso pa, es que realmente te extrañé.

Pasamos media hora hablando de todo lo que hizo en la casa de Jackson y Lydia, controlé que le dieron de comer y si dormía las horas suficientes hasta que unos suaves golpes nos sacaron de nuestra burbuja. Una persona abrió la puerta y pude ver que era Parrish. Sus ojos azules brillaban como si fuera el mismísimo cielo. Cuando me vio sonrió y yo le devolví el gesto. Siempre lo aprecié, pero nuestra relación no va más allá que una amistad.

—¿Puedo pasar? – Preguntó mirando a Dylan.

Yo le palmeo la espalda a mi hijo.

—Pequeño, busca a tu tío Theo y dile que te mire un rato y que llame al médico así veo cuando me pueden dar el alta.

Dylan bajó bruscamente de mis piernas y salió corriendo hasta la puerta chocando involuntariamente con las piernas de Parrish. Se disculpó para luego empujarlo suavemente y salir al pasillo. Jordan me sonrió y se acercó lentamente hasta donde estaba mi camilla. Se sentó muy cerca de mis piernas, mucho para mi gusto lo cual me incomodó un poco. Apreciaba a Parrish, pero no de la forma amorosa.

—¿Cómo estas mi pequeño Stiles? – Preguntó dulcemente lo cual me perturbo un poco, pero decidí no darle importancia – Te veo mucho mejor – Puso su mano sobre mi pierna comenzándola a acariciar –. Casi mato a Derek ya que por su culpa terminaste aquí.

Yo le miro confundido.

—No quiero hablar de Derek – Le digo despacio, casi en un pequeño susurro ahogado.

Pero era verdad, no quería saber nada del pelinegro. Sentía mucho odio porque todavía escuchar su nombre me hacía mal. Y él seguramente estaba muy contento con la zorra de Jennifer.

—Pues parece que él no entiende de tus pedidos porque está aquí desde que tu padre se fue a la estación. No quiere hablar con nadie y solo se dedica a mirar con odio a Raeken y en pocos momentos mira fijamente la puerta como si estuviera a punto de cometer alguna locura. Pero como siempre yo estaba esperando el momento para darle un tiro en la espalda – Sonrió mostrando todos los dientes. Su sarcasmo me dio mucha risa –. Además que le prometí a tu padre que yo cuidaría de ti. Cuando lo quiso echar la primera vez casi lo llevó a prisión, pero descuida que yo estoy aquí para protegerte.

La pequeña sonrisa que tenía en mi rostro se borró cuando Parrish apretó fuertemente mi pierna haciendo que duela un poco.

—Creo que te estas confundiendo Parrish – Le digo mientras que trataba de correr su mano de mi pierna el cual estaba comenzando a doler más y más.

Él me tomó de la cintura y se acercó peligrosamente hasta mi rostro.

—Siempre te deseé Stiles y sé que tú también lo haces.

Me dio un beso a la fuerza y no me permitía que pueda correr mi boca. Le pegué un pequeño mordisco en el labio, pero esto lo excitó más.

—Veo que te gusta la forma ruda pequeño – Me dijo tratando de sonar seductor –. Así que lo haremos de esa forma.

—Parrish ya te dije que no – Quería zafarme, pero me sentía muy débil, además que él generaba mucha presión en las partes de mi cuerpo.

—Se que me deseas tanto como yo, no te hagas el difícil.

Me movía para todos lados, pero podía sentir la erección del policía chocando contra mi cuerpo. Comenzaba a sentir repulsión ¿Parrish se iba a atrever a violarme?

Comencé a largar pequeños gritos, pero él me apretó los labios haciendo que el silencio se haga presente.

—Vamos Stiles, solo déjame hacerte mío.

—NO QUIERO – Grité fuertemente.

Apoyó sus labios bruscamente sobre mi boca haciendo que me partiera la encía. Gemía del dolor y comencé a tener asco de la situación.

—Te follaré hasta que me pidas que frene – Me dijo haciendo que mi cuerpo se estremezca.

—Por favor para Parrish.

El solo se rio de forma cínica.

—Te romperé el culo Stiles.

—CREO QUE DIJO QUE NO – El grito se escuchó por todo el hospital para después ver como Derek entraba corriendo dando el primer golpe en la mejilla de Parrish.