Especial

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(Especial +18: Contenido explicito)

Después de una semana Liam volvió en busca del traje perfecto. Se decidió por algo extremadamente sencillo ya que le había comentado a su novio y tuvieron una pequeña discusión. Todo el día estuvo esperando que sea de noche para verse con Scott. Según el rubio hace mucho no intimaban y quería tener algo memorable ese día. Y que mejor que una pequeña cena y luego una buena ronda de sexo.

Luego de retirar toda la vestimenta se dirigió, prácticamente corriendo, hasta el pequeño supermercado que había en el centro. Tenía ganas de comer carne con un poco de puré de patatas, pero también llevaría para hacer una ensalada porque a Scott le encantaba la verdura lo cual, para el rubio, era extremadamente raro.

Una vez que llegó a su casa se dispuso a cocinar. Le tomó un gran tiempo hacerlo, pero estaba satisfecho con el resultado. Subió prácticamente corriendo para darse una ducha y vestirse lo más provocativo posible pero luego de verse en el espejo se dio cuenta que no sabía el concepto de ''provocativo''. Se colocó un jean, unas zapatillas, una sudadera roja y una remera. Era un estilo casual que prácticamente lo usaba todos los días, pero no dudó más porque recordó que Scott lo conoció de esa forma y se enamoró de todas formas.

Escuchó que el auto de su novio se aparcaba en el garaje y bajó rápidamente con una sonrisa en su rostro. Cuando Scott entró no dudó un segundo más y se abalanzó a sus brazos para darle un gran apretón tratando de demostrarle cuanto lo amaba. El latino se demostró un tanto distante ante la situación, pero luego correspondió el abrazo, aunque no con la euforia que hubiera querido Liam. Se separaron y el rubio le sonrió.

—¿Cómo estás amor? – Preguntó irradiando felicidad.

Scott solo dibujó una pequeña sonrisa en su rostro ocultando un pequeño secreto.

—Bien Liam – Bajó la mirada, pero luego la dirigió al área del comedor – ¿Cocinaste algo? Huele muy bien.

El rubio le tomo del brazo y le dio un pequeño apretón.

—Quería sorprenderte con una pequeña cena, ya sabes, hace mucho no pasamos tiempo juntos ya que trabajas todo el día y me encargaste todo lo de la boda entonces que mejor manera de compensar todo el tiempo perdido que con una pequeña cena como en los viejos tiempos – Scott miró detenidamente a su novio sintiéndose culpable.

Caminaron lentamente hasta el pequeño comedor y se sentaron sin mirarse. Comenzaron a comer y no pudieron evitar exclamar de satisfacción cuando la comida de deshacía en la boca de los dos. Una de las cualidades que tenía Liam era la comida gourmet y a Scott eso le encantaba ya que siempre el rubio le esperaba con comida exquisita lo cual era muy reconfortante cuando llegaba completamente cansado del trabajo. Y él rubio sabía que eso le encantaba a su novio y por eso lo hacía siempre que podía. Y esperaba que esa noche se ponga más contento con la idea que tenía en mente.

Una vez que terminaron de comer Liam se levantó de su silla.

—¿Te acuerdas lo que me dijiste una noche sobre una fantasía sexual que tenías?

Scott se quedó completamente mudo. No podía creer que Liam estuviera tan suelto como en ese momento.

—¿Sobre tener relaciones con algún jugador famoso? – Preguntó incrédulo el de rasgos latinos. El rubio sonrió y se marchó prácticamente corriendo.

Scott se quedó pensando en todo lo que había sucedido ese día. Muchas cosas que le confundieron completamente se hacían lugar en su mente tratando de romper todo el buen momento que estaba pasando con su prometido.

Liam bajó rápidamente la escalera con su antiguo equipo de Lacrosse y una gran sonrisa dibujada en su rostro.

—¿Qué es todo esto Liam? – Preguntó Scott poniéndose un poco nervioso.

El rubio se sentó sobre las piernas de su novio y me agarró la cara con las dos manos un poco temblorosas.

—Hoy haremos tu fantasía realidad amor, solo que no soy famoso.

Y sin pensarlo de vos veces se abalanzó a besar al latino en los labios. Su lengua ingresó en la boca rápidamente expulsando todo el deseo que tenia de hacerlo. Los gemidos comenzaban a escucharse y las notables erecciones de ambos comenzaba a no tener aire.

—Creo que no es momento Liam – Scott se separó rápidamente del rubio, pero él no le hizo caso.

Lo levantó de los brazos y subieron prácticamente corriendo hasta la habitación. Liam le sacó la ropa de arriba a Scott y comenzó a succionar los pezones haciendo que toda la excitación se sintiera por los aires. Besaba los pequeños pero notables abdominales hasta que llego a la pelvis de su prometido. Le bajó rápidamente los pantalones y la erección chocó en su cara dejando un pequeño rastro de líquido pre seminal en su mejilla.

—¿Quieres que me lo meta? – Preguntó con tono seductor.

Pero antes de que Scott responda Liam ya estaba haciendo su gran trabajo con su boca. Chupaba y masturbaba como sabía que le gustaba al latino. Scott sujetaba la cabeza de su novio haciendo que la erección chocara con su garganta.

Le quitó la ropa para estar en iguales condiciones, pero no deshizo la gran mamada que le estaba proporcionando su prometido.

—Vamos a la cama – Liam estaba llevando la situación a su antojo.

Acostó a Scott en el medio de la gran cama y se subió a horcajadas sobre él. Lo masturbó un gran rato hasta que coloco la cabeza del pene en su entrada estrecha. Scott ahogó un suspiro luego de sentir el ano de Liam darle paso. El rubio comenzó a cabalgar como si su vida dependiera de ella agarrando del pequeño a Scott. Lo subió hasta la altura de su cara y comenzó a besarlo fogosamente hasta que sintió todo el semen escurrirse en su entrada.

Abrazó fuertemente a su novio y se tiró al lado de él dejándose ganar por el sueño que lo estaba consumiendo por dentro.

Pero Scott no estaba tan relajado como su prometido. Estuvo todo el día inquieto por la reciente llegada de su ex novio Isaac. Y lo que le perturbaba era haber sentido todas las mariposas explotar en su estómago cuando vio sus ojos ¿Seguía enamorado del joven Lahey? ¿Qué tendría que hacer en estas situaciones? ¿Tendría que comentarle su inquietud a Liam? ¿O guardar el secreto para siempre?

Pero lo peor de todo era que tuvo sexo solo por una razón: Se imaginó a Isaac en todo momento y le perturbaba pensar que nunca estuvo enamorado de Liam.

¡SOLO QUIERO AMOR! (Sterek)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora