Me desperté y fui a hacerme un café. Cuando entre a la cocina para hacerme mi café no había café. No puede ser. Abrí el refrigerador y no había nada. La última ves que vine me comí todo y creo que me acabe todo el café. Fui a la habitación donde se quedo Manu y me vestí rápido. Bueno así podré ir por bolillo fresco y unas donas.
—¿a dónde vas?—me pregunto Manu con la voz ronca y con los ojos todavía cerrados.
—al supermercado por el desayuno. —le respondí.
—te acompaño. —me dijo y se levanto de la cama y se empezó a cambiar. Fui por mi celular que deje en la cocina y vi que apenas son las ocho de la mañana. En el camino le hablaré a Steven para que me pase a mis hijos antes de que los deje en la escuela. —ya.—dijo Manu. Bajamos y nos fuimos al garaje por la camioneta. No puedo estar mucho tiempo en este lugar sabiendo lo que puede pasar. Al subirnos arranque rápido y salí de la calle para irnos a la pequeña cuidad que está a unos quince minutos del departamento.
—Manu puedes márquele a Steven por favor.—le pedí.
—si, ¿cuál es tu código?—me pregunto.
—el mismo de hace cinco años. —le respondí. Manu me pasó el celular y Steven contestó al quinto sonido.
—¿bueno?—dijo al contestar.
—hola Steven ¿cómo estás?—le pregunte.
—muy bien ¿y tú?—me respondió.
—bien gracias—le respondí.
—¿pasa algo?—me pregunto.
—no solo quiero hablar con mis monstritos. —le respondí.
—bueno cualquier cosa me llamas. —me dijo.
—si. —le respondí. Escuche como en el fondo se escuchaban a Chris y Ali discutiendo. "Dejen de discutir que su mama quiere hablar con ustedes y Ali ve por favor por Matías" escuche decir a Steven en alemán.
—hola mamá.—me saludo Chris y se escuchaba muy molesto.
—hola amor ¿qué paso?—lo salude.
—Alice no quiere entender que Manuel no vino a arreglar las cosas si no a empeorarlas y Matías no nos deja de preguntar cosas sobre él ya que él cree que es su papá. —me respondió y Manu escucho todo ya que está conectado al radio del coche.
—Christian en primera Manuel no vino a empeorar las cosas sino va a tratar de que todo sea mejor y eso es lo que también espero y ni te atrevas a decirle a Matías que el no es su papá por él si es su papá así que por favor te disculpas primero con Alice y si le dijiste a Matías que él no es su papá no podrás ir a tu partido de futbol el sábado y sin peros Christian. —le dije.
—pero mamá es mi pr...—no lo deje terminar la oración por qué lo interrumpí.
—te dije que sin peros Christian, ahora pásame a Matías y Alice. —le dije y solo recibí por parte de él un molesto gruñido.
—¿mami?—me pregunto Matías desde la otra línea.
—hola mi amor ¿cómo estás?—lo salude.
—muy bien mami. —me respondió feliz. —oye ¿mami cuando regresas con papá? Te extraño. —me dijo.
—regresó mañana y te recogeré con tu papá del kínder y te traeré a ti y a tus hermanos de sus chocolates favoritos. —le dije.
—está bien mami te pasaré a Ali. —me dijo. Estacione la camioneta y la apague.
—hola mamá. —me saludo desanimada en español.
—hola cariño no dormiste bien ¿verdad?—le dije.
—no podía dejar de pensar que papá está vivo y que regresó, solo espero que en serio venga para que todo sea mejor y que a Chris se le pase su enojo y también espero que Jacob no sobre reaccione por cómo a estado en el último tiempo, eso me preocupa mucho. —me dijo.
—yo también espero lo mismo cariño. —le respondí.
—¿Aria puedo hablar con ella?—me pregunto Manu y yo asentí.
—te voy a pasar a alguien. —le dije a Ali y le di mi teléfono a Manu. Entramos al supermercado y yo fui directamente a la panadería y estaban recién sacando los panes espere a que sacaron todos los panes mientras yo fui por lo demás y Manu iba detrás de mí hablando con Ali hasta que colgó.
—Ali es idéntica a ti en su formar de ser. —me dijo y me abrazo por atrás como extrañaba que lo hiciera y me hiciera sentir esas malditas mariposa en el estomago.
—Manu quiero que sepas que Jacob y Tessa ya no son como antes. Cuando Jacob se enteró que estabas muerto se destrozo al igual que Tessa pero le afectó más a Jacob que a Tessa por qué él y ella los primeros meses que estuvimos en Holanda se dormían conmigo en la cama en la esperanza que regresaras después de que Jacob cumplió los mueve años perdió la fe y empezó a cambiar, Tessa en ese momento ya había perdido la fe hace unos meses. Un día Jacob me dijo que si su papá volvía no sabía que si iba a estar enojado o feliz por qué los dejo y cada ves que Matías, Christian y Alice tocaban ese tema él se iba del lugar si se podía ir pero a mí solo me quedaba desviar las preguntas y Jacob me prometió una cosa que nunca más dejará que me vuelva a poner así de triste y si el causante es una persona que todas está viva él personalmente irá a darle la paliza de su vida. —le explique en español para que nadie entenderá sobre lo que estaba hablando. —dejaste a todos destrozados y Chris me hico la misma promesa pero en otras palabras ya que tenía cinco años cuando me lo prometió y Jacob cavaba de cumplir los diez años cuando me lo prometió. Ellos también ya muy pocas veces enseñan el cariño que le tienen a las personas. —le dije y fuimos al pan. Empecé a escoger el pan y ponerlo en una bolsa para después ir a la caja. Manu ya no comentó nada solo me abrazo y me plantó un beso en la mejilla.
—yo pago amor. —me dijo y sentí escalofrío y las malditas mariposas en el estomago cuando me dijo amor. Manu pago y nos fuimos de regreso al departamento.
—sabes que te llevare hoy en la tarde a mi restaurante favorito y luego de eso te enseñaré la cuidad para regresar antes de anochezca, pero nos llevamos lo que necesitamos de todas formas por si nos tardamos más de lo debido. —le dije a Manu.
—como quieras. —me dijo y tomo mi mano para después besarla.
Al llegar al departamento dejamos la camioneta en el garaje y subimos para desayunar en la sala mientras nos poníamos al corriente de todo. Por suerte deje unas cosas aquí y me las puse hoy. Me puse unos pantalones de vestir negros, una camisa blanca y unas botas negras. Perfectas para poder esconder lo que tengo en los tobillos. Manu se puso lo mismo que traía ayer pero le dije que cuando estemos en la cuidad le iremos a compara ropa para que tenga algo que no le pese tanto como las cosas que dejó Steven.
*****
Manu se compro chaqueta negra con gorro ya que hoy no a parado de nevar, una playera azul marina, un sudadera plan a con rosas, unos jeans decolorados y se quedó con sus converse negros desgastados. Ahora vamos en camino a la camioneta. Al llegar dejamos las cosas en la cajuela y nos empezamos a poner las armas y los chalecos antibalas.
—¿Aria Wallter?—me llamo una voz ronca a mis espaldas.
—mierda Manu cierra la cajuela y ponte rápido la chaqueta. —le dije al reconocer la voz. Tuvo que ser Thomas uno de mis viejos amigos y la ultimas que lo vi casi lo quería matar por haberle contado a medio mundo que consumía alcohol y fumaba. Claro me tuve que aguantar después todo lo que causó el idiota. Solo espero que no pase nada—te pido que hables lo menos posible por tu bien Manu solo lo saludas y te subes a la camioneta para que yo me suba y salgamos de ahí lo más rápido posible de aquí por si pasa algo. —le dije rápido en español mientras lo veía a los ojos y lo tome de la mano.
—Thomas Keiser que sorpresa.—dije en alemán girando sobre mis talones. Apreté un poco más el agarre con la mano de Manu y él me rodeó con la otra por la cintura.
—tranquila. —me susurró al oído.
—hasta que apareces—dijo y yo solo apreté mi mandíbula para no insultarlo. —después de casi once años sin vernos y mira te has puesto. —me dijo y escaneo mi cuerpo note que Manu quería dar un paso hacia adelante pero no lo deje.
—¿que quieres?—le dije sería y le hice una señal a Manu para que se subiera a la camioneta.
—solo charlar. —me dijo.
—no tengo tiempo para charlar ahora Thomas me tengo que ir por qué tengo cosas que hacer. —le dije.
—oh vamos quédate a charlar con el que al parecer es tu novio para ponernos al corriente de estos diez años. —insisto.
—no enserio no puedo Thomas tengo cosas que hacer y mañana sale mi vuelo a Italia para cosas del trabajo así que prefiero hacerlo otro día. —le dije y vi que Manu nos estaba viendo por el espejo.
—que lastima por que este Michael, Maximilan, Yannik y Nicholas vienen en un rato a verse conmigo. —me dijo y varios malos recuerdos me vinieron a la cabeza al escuchar esos nombres.
—lo pero no puedo fue un gusto en verte Thomas. —me despedí.
—esta bien quedaremos para otro día querida. —me dijo y me dio un beso en la mejilla. Me subí a la camioneta asqueada por qué mi mejilla quedo llena de baba.
—vámonos ahora Manu—le dije sería mientras me ponía el cinturón de seguridad.
—¿qué paso?—me pregunto mientras salí del estacionamiento.
—él era de las personas que estaban conmigo en esa bandilla de drogas en la que vendía y él estaba muy celoso por mí por qué yo era más joven que él mucho mejor en el trabajo y pues relevo que yo vendía droga y tomaba y que también fumaba y como un mes después nos mudamos a Estados Unidos ya que mi papá se entero y le ofrecieron un mejor puesto aya. —le resumí todo.
—¿enserio me quieres llevar para aya?—me pregunto preocupado. —no debes hacerlo si no quieres. —me dijo y se escuchaba preocupado.
—si pero solo te llevaré al unas cuantas calles y ni se te ocurra bajarte del coche cuando estemos aya. —le respondí y prendí el radio para poder relajarme.—metete en este callejón y vete hasta el final de él para que nos podamos terminar de alistar.—le dije y él se metió en el callejón como le dije se fue hasta el final de el. Me baje y fui directamente a la cajuela a ponerme el chaleco antibalas. Me puse el las pistolas en los lados de mi cadera y me volví subir a la camioneta pero esta ves al asiento piloto. Espere a que Manu se subiera y arranque. Solo espero que Thomas no nos siga.
****
Al llegar a los callejones que nunca más en mi vida quise entrar me fui con cuidado y luego mi celular empezó a sonar. Conteste y vi que es la maestra de Jacob y de Tessa.
—hola señora Ríos lamento haberla interrumpido pero pasó algo con Jacob. —me dijo cuando conteste. Yo lo primero que hice fue darme la vuelta para salir a la autopista.
—¿qué le pasó señora Keiser?—le pregunte.
—él tuvo en accidente cuando fuimos al lago y él se quiso adelantar con sus amigos pero se callo y se lo llevó el lago hasta donde pudo y sus amigos lo sacaron, él se fracturó la muñeca y también el tobillo y tiene unos cuantos rasguños y se abrió la cabeza y está algo grave. —me dijo preocupada.
—¿en qué hospital está? yo iré para aya. —le dije con la voz algo molesta.
—esta en el hospital de Ámsterdam. —me respondió.
—llegaré en unas horas ya que no estoy en el país. —le dije y colgué.
*fin de la llamada*
Mierda, mierda, mierda tuvo que pasar ahora. Solo espero que Jacob no aya te ido uno de sus ataques de agresividad.
—¿Aria que paso?—me pregunto Manu y yo apretaba cada ves más el acelerador.
—Jacob tuvo un accidente y está algo grave me dijo su maestra. —le respondí.
—¿cómo que tuvo un accidente?—me pregunto preocupado.
—no se me dijo que se quiso adelantar con sus amigos y que se callo y la corriente del lago que quería atrevesar se lo llevó hasta que Jacob pudo detenerse en algo hasta que lo sacaron sus amigos. —le respondí y empecé a escivar los pocos coches que había.
*****
Al llegar al estacionamiento del hospital aparque la camioneta y me baje rápido. Entre trotando y fui a la recepción.
—¿en qué le puedo ayudar?—me pregunto.
—busco a Jacob Ríos Wallter. —le respondí.
—¿usted es familiar?—me pregunto.
—si soy su madre. —le respondí.
—está en el sexto piso habitación 666—me respondió y salí corriendo a las escaleras de emergencia y Manu venía detrás de mi. Empecé a subir las escaleras hasta llegar al sexto piso.
—mierda Aria se suponía que yo era el deportista. —me dijo y yo solo lo ignore y empecé a buscar la habitación de Jacob. Al llegar a su habitación frene y entre a la habitación. Su maestra estaba con él en la habitación.
—hola señora Ríos que bueno que pudo venir tan rápido. —me saludo.
—¿me puede explicar bien como pasó todo?—le pregunte preocupada.
—su amigo Isaac me contó que ellos se estaban atravesando el lago y él se quitó los zapatos para después atravesar el lago, pero la corriente estaba fuerte y Jacob no quiso buscar otro camino sé quería ir a las fuerzas por ahí ellos le decían que no era seguro y que el agua estaba helada pero él no los escucho y se resbaló y se lo llevó la corriente hasta que pudo resistirse en una roca y dos de sus amigos fueron por él. —me explico rápido.
—okay gracias señora Keiser. —le agradecí.
—los dejare yo me tengo que regresar con los demás estudiantes. —me dijo y yo asentí. Me senté en la silla que está junto a la cama en la que Jacob está acostado. Manu se quedo afuera de la
—ya llegue cariño. —dije y tome su mano que no está lastimada.
—¿mama?—dijo y se escuchaba muy cansado.
—aquí estoy cariño. —le dije.
—¿por qué traerá tus armas y el chaleco antibalas mama?—me pregunto.
—no estuve aquí en el país y donde estaba no es muy seguro. —le respondí.
—fue divertido. —me dijo cambiando de tema y se reía ligeramente.
—¿qué le ves en esto divertido Jacob Ríos Wallter?—le pregunte por cómo se reirá y estaba todo a dolorido en la cama del hospital.
—pues de que por idiota quise camine por el lago y la corriente estaba muy fuerte. —me respondió divertido.
—Jacob no le veo lo divertido en eso. —le respondí sería.
—oh vamos mama no me digas que tú no hiciste estupidez parecidas a las mías o hasta más chidas.—me respondió divertido.
—si y muchas. —le respondí al recordar algunas. —oye Jacob tengo que hablar sobre un tema contigo y es sobre uno en específico. Ayer vi...—ya no pude terminar mi oración por qué Manu entro a la habitación.
—ya no puedo esperar más afuera con este olor a medicamentos y desinfectantes. —me interrumpió.
—¿qué hace él aquí?—me pregunto y pude ver en la mirada de Jacob que no está feliz sobre la aparición de su papá.
—Jacob tranquilízate por favor no quiero que tengas uno de tus ataques de agr....—ya no pude terminar por qué él ya se quería lanzar arriba de Manu. Me levante de la silla de inmediato y agarre a Jacob. —tranquilízate por favor te vas a lastimar más Jacob. —le dije y lo tome entre mis brazos y lo rodeó para que no se fuera encima de Manu. Poco después entró una enfermera y le dio una inyección que segundos después lo durmió. Manu lo volvió a poner en su cama y salimos. —¿por qué entraste así?—le pregunte un poco molesta.
—por qué quería ver a mi hijo. —me respondió elevando su tono de voz. —tu ni siquiera eres su madre no sé por qué te pones así como si fuera tu hijo y tú lo hubieras cargado nueve meses en tu vientre, no no hiciste nada de eso. —me dijo todavía con el tono de voz un poco elevado.
—por lo menos fui más madre que tú fuiste padre para él Manuel tú no estuviste casi seis años de su vida y me dices que no soy su madre. Sé que yo no lo estuve cargando nueve meses en mi vientre pero por lo menos yo no lo dejaría así de destrozado como tú nos dejaste Manuel por tu supuesta muerte. Tú perdiste casi todo al irte y con casi todo digo casi todo Manuel. Jacob empezó a tenerte un odio por habernos dejado y no sólo él sino también Max, Tessa y hasta Christian. Él y Tessa lloraban en mis brazos hasta quedarse dormidos y no sabes cómo cambiaron al entender que no regresaras al igual que yo Manu yo ya no soy casi nada cariñosa solo lo soy con los niños y ya. Sabes que será mejor que te vallas a un hotel a descansar hasta que se tranquilicen todos. —le dije y entre a la habitación de Jacob. Manu no me dijo nada solo se fue sin decirme nada.
*****
Al próximo día dieron de alta a Jacob por la mañana y nos regresamos a la casa. Él está ahorita en silla de ruedas y tendré que ir por Tessa y los demás a las escuelas.
—¿mama me puedes hacerme algo de comer? Por qué la comida del hospital estaba asquerosa. —me pregunto Jacob cuando entramos a la cocina.
—sí ¿que quieres?—le respondí.
—unos panqués con huevos revueltos, tocino, jugo de naranja y pan francés. —me respondió sonriente.
—bueno ¿algo más?—le respondí. No entiendo cómo puede comer tanto y quedar en forma y luego tanta chatarra.
—me puedes traer una almohada para mi brazo y pie por favor.—me dijo y yo asentí.
Después de haberle hecho todo lo que quería desayunar Jacob le ayude a que se bañara en la bañera y lo ayude a vestirse.
****
Dana me estuvo ayudando con Jacob y a hacer la comida ya que Will y Steven tuvieron que trabajar hoy y regresan hasta las tres de la tarde. Por suerte Theo está muy cansado de que Dana salió con él un rato a la cuidad después de haber dejado a los niños en la escuela.
—¿quieres que valla por los niños?—me pregunto mientras yo terminaba de hacer la comida.
—no yo iré y cuando los niños salgan a jugar después de la comida tenemos que hablar.—le dije agarrando las llaves de mi querido tesla.
—si. —me dijo.
—¿a dónde vas mama?—me pregunto Jacob.
—iré a recoger a tus hermanos y a recoger a Tessa. —le respondí.
—iré contigo. —me dijo y se fue hasta la entrada del garaje para después ponerse frente la puerta de el asiento copiloto y abrió la puerta para después subirse solo a la camioneta. Guarde la silla de ruedas en la cajuela ya que no le podía decir que no fuera por qué ya se subió a la camioneta. Encendí la camioneta y al salir vi a Manu acercarse al portón así que cerré detrás de mí y encendí la alarma. Salí a toda velocidad de la calle y me fui primero al kínder de Matías.
—espérame iré rápido por Matías. —le dije a Jacob bajándome de la camioneta pero él creo que ni me puso atención ya que está en su celular. Fui rápido por Matías y regrese a la camioneta.
—hola Jac. —lo saludo Mati a Jacob cuando se subió a la camioneta para que lo pusiera en su asiento.
—hola Mati ¿como estas?—le respondió Jacob.
—muy bien. —le respondió.—¿y tú?—le preguntó poco después.
—bien o eso supongo. —le dijo. Después de haberle puesto el cinturón de seguridad y acomodado bien a Matías me subí al asiento piloto y salí hacia la escuela de Christian y Alice.
—mama me habías dicho que ibas a venir con papa a recogerme. —se quejó Matías. Mierda me había olvidado de eso.
—lo siento se me olvido. —le respondí.
—entonces ¿podemos invitarlo a cenar?—me pregunto.
—si. —le respondí. El resto del camino Jacob y Matías hablaban sobre temas que no entendía hasta llegar a la escuela de Chris y Ali. Me estacione a fuera y vi cómo ellos ya venían corriendo para acá. Les abrí las puertas y ellos se subieron.
—hola—saludaron los dos desanimados al unísono.
—¿por qué ya regreso Jacky?—me pregunto Ali refiriéndose a Jacob.
—por qué tuve un divertido accidente y me fracture el tobillo izquierdo y mi muñeca derecha y algunos que otros raspones. —le respondió Jacob divertido y yo solo negué en silencio. De la escuela de Chris y Ali me fui a la que van Jacob y Tessa y una cuidad que queda cerca del pueblo en el que vivimos que se llama Leiden.
*****
Al llegar fui rápido por Tessa y le ayude a subir sus cosas a la cajuela.
—después de que te llevaron en la ambulancia fuiste el centro de atención cuando hablaban. —le dijo Tessa a Jacob.
—que bueno así seré más popular en la escuela. —dijo feliz y yo lo vi con una cara de pocos amigos.
—mama Mati se durmió. —me informó Ali.
—si déjalo está cansado. —le dije.
******
Al llegar le ayude a Jacob a bajarse y subirse en la silla de ruedas para luego bajar todas las mochilas y otras cosas que tenía en la cajuela y también a Matías. Entre y deje las cosas donde deben de estar.
—mama es mi tío William. —me dijo Chris dándome el teléfono de la casa. Chris y los demás consideran a los guardaespaldas como sus tíos.
—¿qué paso?—dije cuando tuve el teléfono.
—este el señor Ríos quiere pasar ¿lo dejo pasar?—me dijo serio.
—ya que Mati lo quiere ver y le tiene que dar muchas explicaciones a Tessa y a los demás. —le dije. —ah y por favor dile que me espera afuera en la puerta del garaje. —le pedí.
—si esta bien. —me dijo y colgó.
*fin de la llamada*
Camine hacia el garaje ya que todavía me faltaban de sacar cosas. Abrí la puerta y Manu ya estaba ahí esperando.
—solo te deje entrar por qué Matías te quiere ver y esta Tessa así que por ella también no esperes mucho Manu ya que ahora tiene quince años. —le dije sería.
—¿te ayudo con las maletas?—me pregunto mientras bajaba la maleta.
—yo puedo sola. —le respondí y cerré la cajuela. Camine hacia adentro y deje la maleta en el cuarto de servicio ya que todo ahí debería de estar sucio. Subí a la habitación de Tessa.
—¿puedo?—pregunte tocando la puerta.
—si pasa. —me respondió.
—oye al rato después de tu entrenamiento con Steven o Will con el que te toque hoy puedes sacar lo que está sucio y limpio de tu maleta para que lo meta a lavar por favor. —le pedí.
—si. —me respondió. Baje y me fui a la terraza. Me senté en una de las bancas y empecé a ver cómo la nieve caía.
—¿estás bien?—me pregunto Dana sentándose junto a mí.
—si. —le respondí. —¿cómo te enteraste que Manu estaba vivo?—le pregunte.
—fui a tu departamento en Nueva York en el que se están quedando Mic y todos ellos y había visto una figuran conocida pero no era de ellos así que me acerque con un tacón de aguja listo para llegar a la entre pierna de esa persona y cuando se volteó vi que era Manu. —me explico.
—¿y por qué no me dijiste?—dije.
—por qué él quería venir a verte por su cuenta y él quería hacer todo lo posible para poder regresar y estar otra ves con ustedes. —me respondió.
—pues nada le salió como él quiso.—le dije.
—ya lo sé pero él tiene buenas intenciones. —me dijo.
—iré a descansar un rato te encargo a los niños y se necesitas ayuda por favor dime pero así o así Will y Steven ya no deben de tardar en llegar. —le dije.
—no dormiste anoche ¿verdad?—me dijo viéndome fijamente.
—no nada ya que no podía dejar de pensar en la discusión que tuve con Manu y quería quedarme despierta por si pasaba algo con Jacob. —le respondí. —luego te explicaré lo que pasó y a quienes vi. —le dije y me fui a mi habitación. Me subí y escuche pequeños pasos detrás de mí.
—¿mami puedo dormir contigo?—me pregunto Matías.
—si vente. —le dije y lo tome entre mis brazos. Entre a mi habitación y me puse algo cómodo. Me puse unos pantalones de correr holgados y una playera holgada. Después le ayude a Matías a quitarse su prótesis y nos acostamos en la cama.
******
Después de un largo rato haber tratado de dormirme pude dormirme un rato pero me desperté por una pesadillas y por qué Matías me ponía todo el tiempo sus pies en mi cara, asi que me levante y baje. Abajo están Will, Kevin, Steven y Dana hablando.
—¿cómo dormiste?—me pregunto Will.
—mal. Primero no podía dormir y luego cuando al final me había dormido tuve una pesadilla y Matías no dejaba de ponerme sus pies en mi cara. —le respondí. Fui a la cocina y vi que ya no había nada en el refrigerador. Subí a mi habitación y me cambie rápido para salir al supermercado. Baje y fui por mi bolsa.
—¿a dónde vas?—me pregunto Steven.
—al supermercado a comprar comida para la semana pero antes iré a comer un Döner ya que no hay nada. —le respondí.
—no vas a salir ahorita Aria. —me respondió.
—Steven por favor como quieres que le haga su desayuno a los niños y el tuyo. —le dije. —Will te encargo a los niños no me tardaré más de dos horas y si me tardaré más les aviso. —les dije y me fui al garaje.
—¡ya se fue tu amante! —grito Kevin.
—no es mi amante idiota es mi esposo. —le respondí. Fui al garaje y me subí a mi tesla y salí rápido antes de que ellos me siguieran. Salí por el Portón y ahí iba Manu caminado. Baje la ventana y me pare donde él está. —súbete. —le dije cuando la ventana ya estaba abajo.
—no prefiero irme caminado. —me respondió.
—súbete hace frío y quiero hablar contigo. —le dije. —tú puedes manejar. —le ofrecí.
—¿tu camioneta tesla?—me pregunto.
—si mi camioneta tesla. —le respondí. Me baje para irme al asiento copiloto, cuando iba a rodear la camioneta Manu me tomo de la muñeca y me acerco a él. —Manu hace mucho frío déjame subirme a la camioneta y ahí hablamos. —le dije ya que me estaba muriendo de frío y mi chaqueta la deje en la camioneta. El abrió su chaqueta y me hico acercarme más a él.
—siento haber actuado como un imbecil ayer. —me dijo. —lo siento Aria enserio lo siento sé que te herí con las palabras que dije. Yo sé que no fui un buen padre, esposo y hermano y rompí promesas que hice como estar contigo en los buenos y en los malos momentos y hi...—no lo deje terminar por qué estampe mis labios contra los suyos.
—te perdono y ya no quiero más explicaciones. —le dije después del beso. —ahora subamos a la camioneta por favor. —le pedí por que ya enserio sentí que me iba a morir de hipotermia.
—ya vamos. —me dijo y me fue a abrir la puerta. Me subí y me puse mi chaqueta por qué tenía tanto frío. —sí que te estabas muriendo de frío. —comentó y arranco. —wow está camioneta sí que acelera rápido. —dijo sorprendido.
—si hasta tiene una función en la que la puedes poner en automático y se maneja sola. —le dije y le puse la función automática.
—así podré hacer esto. —dijo y tomo mi rostro y me empezó a besar. Fue un beso tierno y lento para después morderle ligeramente el labio a Manu.—extrañaba que hicieras eso. —me comentó. Yo puse mi mano en su pierna. —¿a dónde vamos?—me pregunto.
—primero a que coma algo y luego a hacer las compras semanales. —le respondí.
—¿a las cinco de la tarde?—dijo ya que estaba completamente obscura la tarde ya que estamos en pleno invierno.
—en San Diego y Nueva York salimos a las siete de la noche y aquí tengo que salir antes por qué cierran todas las tiendas y supermercados a las ocho de la noche. —le respondí. —apárate aquí ya llegamos. —le dije y me baje de la camioneta rápido cuando se paró.
—¿qué hacemos en este restaurante?—me pregunto vino el lugar con cara de asco.
—no te quejes por tiene el mejor Döner del mundo. —le dije y lo tome de la mano para entrar al restaurante y pedir lo que siempre pido.
—¿qué es un Döner?—me pregunto confundido.
—un pan turco o árabe no sé con carne, ensalada y un delicioso aderezo adentro. —le respondí.
—hola señora Ríos ¿que quiere hoy?—me pregunto Javier el que siempre está aquí y siempre me atiende.
—dos ordenes de las que siempre pido por favor Javier. —le respondí feliz.
—en seguida se las traigo. —me dijo y mientras yo le pagaba. Fuimos a una mesa y esperamos a la comida.
—¿y fuiste a la universidad en estos años?—me pregunto Manu.
—si y estudie administración empresarial. —le respondí.
—¿cómo lo hiciste teniendo a los niños contigo? —me pregunto.
—fue difícil al principio pero entre Steven, Kevin y Will me ayudaron con los niños. —le respondí y mi celular empezó a sonar. Vi que es Filip. —voy a contestar. —le dije a Manu levantándome de la mesa y salí.
—hola señora Wallter. —me saludo.
—hola ¿qué paso Filip?—dije.
—necesito que revise unos archivos de los hoteles que tiene y tiene que venir a la inauguración del nuevo hotel que abrió en Miami. —me comentó.
—¿cuándo es la inauguración del hotel?—le pregunte.
—es el espere ahorita le digo. —me dijo y escuche que empezó a buscar algo en la computadora. —es el 20 de febrero ósea en cuatro semanas. —me informó.
—quiero que lo muevas dos días por qué caí en el cumpleaños de Jacob, así que en quiero que me mandes el jet grande para ir con todos los niños y quiero que rentes dos camionetas una para Max y otra para mí. Te llamo mañana para decirte cuales quiero que rentes. —le dije.
—pero no puedo mover más la inauguración del hotel. —me contradijo.
—Filip tú moverás esa fecha quieras o no. Y ahora quiero que contrates otra ves a los guardaespaldas que tenía el señor Schumacher y con mejor saldo y más privilegios para ellos y su familia, cuando tengas el contrato quiero que me lo envíes por correo y si hace falta algo lo agrego para que tu vallas o que alguien de la empresa valla a sus respectivas casa y que ellos estén en el aeropuerto de Miami cuando valla listos con sus camionetas y lo de siempre. —le dije.
—si señora Wallter ¿algo más que necesite?—me respondió.
—no es todo Filip te llamo mañana por lo de las camionetas y tú ya sabes que camioneta tienen que usar ellos. —le dije y colgué.
*fin de la llamada*
Entre otra ves al restaurante y me senté en la mesa. Guarde mi celular en el bolsillo de mi chamara y vi que Manu me estaba viendo.
—¿pasa algo?—le pregunte viéndolo a los ojos y otra ves sentí las malditas mariposas en mi estomago. Maldito Manu que me provoca cosas en el cuerpo.
—nada solo que me gusta cómo separas el trabajo con los niños. —me respondió y puso su mano en mi mejilla y eso hizo que mi piel se pusiera de gallina.
—no siempre puedo separar el tiempo. Hay días en donde tengo mucho trabajo y no puedo hacer nada con los niños y ellos luego se enojan conmigo por qué no hice nada con ellos. —le dije. Vi que Javier ya venía con la comida.
—aquí tiene su comida señora Ríos y ....—no terminó su oración por qué no sabe cómo se llama Manu.
—Manuel Ríos. —le respondió Manu.
—¿eso no familiares o que son?—nos pregunto.
—no ella es mi esposa. —se me adelanto Manu.
—bueno que disfruten su comida. —nos dijo y se retiró.
—gracias. —le dijimos al unísono.
—¿no sabía que tú tenías esposo?—me pregunto Manu sorprendido. Yo le di una mordida a mi comida.
—no ellos solo sabían que era viuda, pero ellos creían que yo tenía algo con Steven ya que casi siempre salíamos juntos con los niños pero nunca hubo algo ya que él es como mi hermano mayor. —le respondí antes de que saque malas conclusiones.
—¿y acá como está la situación con los paparazzis?—me pregunto Manu.
—es muy tranquila. Solo cuando voy a Estados Unidos soy perseguida por los paparazzis y más cuando se suponía que moriste empeoró esa situación. —le respondí.
Al terminar de comer nos fuimos al supermercado a hacer mi compra semanal para la casa.
*****
Manu no paro de abrazarme o algo parecido en el supermercado. Ahora estamos en camino a la casa y vi que apenas son las siete de la noche. Mi celular empezó a sonar y es Steven.
—¿qué paso Steven?—dije al contestar.
—¿donde estás?—me pregunto.
—ya estoy a cinco minutos de la casa no te preocupes. —le dije.
—no date la vuelta y vete al aeropuerto yo te alcanzaré ahí lo más rápido posible con los niños. —me dijo y colgó.
*fin de la llamada*
—Manu date vuelta y vete al aeropuerto ahora. —le dije a Manu asustada.
—¿qué paso?—me pregunto preocupado mientras se daba la vuelta.
—no lo sé Steven me dijo que me dirá la vuelta y que valla al aeropuerto y que aya le iba a alcanzar con los niños. —le respondí todavía asusta. Mierda Thomas. Nos pudo seguir hasta acá. Supe que no era buena idea ir.
—Aria todo sal....—no lo deje terminar por qué lo interrumpí.
—no digas que todo saldrá bien cuando no sabemos la gravedad de la situación. —le dije. —párate aquí yo quiero manejar. —le dije desesperada. Se paró y yo me pasé al asiento piloto. Cuando Manu se subió empecé a manejar rápido por la autopista.
—no manejes tan rápido. —me dijo.
—no me digas que tengo que hacer. —le dije.
******
Cuando llegamos al aeropuerto Steven llegó unos minutos después.
—el jet debería llegar en unos minutos—nos dijo Steven.
—¿Steven que fue lo que pasó?—le pregunte y lo tome del brazo para alejarnos un poco de los demás.
—Thomas y .....—no dijo quién más.
—Steven dime por favor que no estuvo esa persona frente el portón de mi casa. —le dije con un nudo gigante en mi garganta.
—si Aria fue J y Thomas. —me respondió y me iba a abrazar pero yo di un paso atrás.
—dime que no te vieron salir con mis hijos y aparte se suponía que J estaba muerto. —le dije elevando un poco mi tono de voz.
—eso espero por qué salí por la parte de atrás y luego me fui por camino que solo nosotros conocemos para ir con los niños a un día en el bosque o en el campo. —me dijo.
—supe que era mala idea. —dije en susurro.
—¿tienes idea a donde iremos?—me pregunto Will acercándose a nosotros.
—si a México ahí compre una casa y a parte está rico el clima aya en invierno. —le respondí por qué el año pasado que fuimos en invierno y hacía calor pero no hací como para estar todo el día en traje de baño. —que el jet llene su tanque y nos vamos aya compramos ropa. —les dije.
—¿y yo que haré?—me pregunto Max. Mierda si es cierto el tiene que ir a la universidad.
—haré que te manden todos los apuntes y trabajos que tienes que entregar para que no tengas que repetir este semestre y es necesario pagaré para que dejen y puedas entregarles todo a los maestros después por qué en cuatro semanas iremos a Miami a la inauguración de mi nuevo hotel. Y se es necesario nos quedaremos en Miami y haré que te hagan una transferencia hacia una de las universidades de allá. —le respondí.
—entonces yo me quedaré acá. —me dijo serio.
—no por qué la situación es grave. —le dije y lo tome del brazo para que no se fuera hacia una camioneta. —por favor es por el bien de todos y así ya tendrás lo que quisiste irte a vivir a Miami por favor solo no te vallas no quiero que algo te pase Max. —le pedí.
—¿y a parete de eso que gano?—dijo serio. Nunca en mi vida quise decir esto pero será necesario para que él se quede y no le pase nada.
—puedes comprarte el coche que quieras. —le dije y ahora me siento como una mujer rica que le quiera dar todo a sus hijos.
—y que yo pueda terminar mis estudios en Miami al igual que los demás aya. —me respondió satisfecho. Este fue un golpe bajo.
—terminaras este semestre en la universidad que vas y de ahí te tranferie a Miami. —le dije él estrechó su mano para cerrar el trato. Nunca quise hacer algo como esto pero es para el bien. Estreche mi mano y cerré el trato con él.
—¡háganse a un lado el jet ya aterrizó!—grito Steven. Nos fuimos donde están los demás y el jet entro.
—que el tanque se llene y nos vamos a México. —dije. —¿dónde está Kevin?—pregunte buscándolo con la mirada.
—no está aquí salió con una chica como media hora después de que tú te fuiste. —me respondió Will.
—él no sabe de lo que está pasando iré por él. —dije y salí corriendo. Qué buen Will se trajo su camioneta BMW. Me subí y arranque. Le marque a Kevin y hasta el sexto sonido contesto.
—Kevin no te vallas para nada a la casa ¿tú dónde estás ahora?—le dije alertada y preocupada la ves. Por favor di e que lo estás en la casa.
—en el supermercado y ya me iba para la casa. —me respondió normal.
—ahí quédate yo iré por ti y por favor te lo pido no vallas a la casa. —le dije.
—¿por qué no quieres que valla a la casa?—me pregunto divertido.—oh ya se adelantaron mi fiesta de cumpleaños unos seis meses—me dijo muy feliz.
—no luego te explicaré ahora quiero que te quedes donde estás y te llamaré cuando llegue. —le dije.
—si esta bien. —me dijo y colgó.
*fin de la llamada*
¿Por qué tengo amigos tan idiotas? Bueno no digamos que estoy mejor a veces pero bueno.Será mejor que me concentre más en el camino que en mis pensamientos. Esquive varios coches hasta tener todo libre y acelere más y esquive los pocos coches que me impedían avanzar.
*****
Después de solo hacer quince minutos de camino en ves de una hora llegue al supermercado y alcance a ver a Kevin ahí parado viendo algo en su celular.
—¡súbete!—grite con la ventana abajo y él se subió de inmediato.
—ahora quiero que me expliques que es lo que está pasando. —me dijo algo molesto mientras se ponía el cinturón de seguridad.
—no te lo explicaré ahora. —le dije algo molesta y tome rumbo la autopista. Para solo llegar al aeropuerto y irnos de aquí.
******
Al llegar al aeropuerto estacione la camioneta y nos bajamos. Fui por mi laptop y iPad y cargadores a mi camioneta para después ir al jet.
—Aria. —me llamo Manu a mis espaldas. Cuando ya iba en camino al jet.
—no quiero hablar ahora. —le dije molesta. Me subí al jet ya todos estaban adentro solo faltaban Manu y Kevin. Por suerte los niños ya estaban durmiendo y Max también. Me senté y abrí mi laptop.
—¿qué paso?—me pregunto Will.
—no quiero hablar. —le respondí todavía molesta.
El resto del vuelo no ha le con nadie.
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Desde ese día [sin corregir]
Teen Fiction-wow cuanta tensión-susurro Mic y yo me reí. -tío Mic. -dijo Jacob poniéndose de pie y fue a saludarlo al igual que Tessa y Max. -¿dónde estabas?-me pregunto Manu mientras se paraba del sillón. -en mi despacho charlando con Mic. -le respondí. -e...