Narra Ruby:
-Ahora vuelve a presionar la misma tecla, sólo que cuatro veces seguidas. -Indicó Christine.
Estaba en la clase de piano, que la madre de Ashton me daba todos los viernes, pero a diferencia de todos los días, hoy la casa se sentía muy vacía, pues no estaba ninguno de los chicos.
Luego de unos minutos practicando, Christine recibió una llamada de emergencia de su sobrina y luego de disculparse conmigo y aclararme que volvería en menos de diez minutos, salió de la casa, dejándome sola.
Me quedé en la sala un rato, hasta que la curiosidad me venció y terminé subiendo al cuarto de Ashton.
La puerta estaba entreabierta, así que la empujé lentamente y al entrar, me quedé sorprendida por lo ordenada que se encontraba la habitación pues todos sabían que Ashton era muy desordenado.
Contemplé un par de fotos que tenía pegadas en la pared, donde salía con diferentes amigos y familiares, mientras yo no dejaba de sonreír por lo adorable que se veía en cada fotografía.
-Hola, Ruby.
Pegué un salto del susto, me volteé encontrándome con Ashton, con una sonrisa igual a la de las fotos.
-Hola... ¿Qué haces aquí? Creí que estabas en Disney.
-Iba a ir, pero me arrepentí a último momento y mentí con estar enfermo. -Respondió y asentí mientras intentaba calmar mis nervios. -¿Y tú?
-Tu madre salió, así que pensé venir a... -Expliqué, pero me trabe sin terminar mis palabras, pues no tenía ninguna excusa.
-¿A qué?
-No lo sé. -Reí nerviosa y Ashton volvió a sonreír.
-¿Entonces estamos solos? -Preguntó sentándose en la cama.
-Sí... Al menos por unos diez minutos.
-Caundo mi mamá dice diez minutos, se refiere a diez horas. -Rió y tomó su celular, llamando a su madre.
Me senté a su lado, mientras el hablaba con Christine y yo no sabía que demonios hacer, hasta que colgó la llamada y volteó a verme con una sonrisa ladeada.
-Volverá mañana.
-¿Qué?
-Sí, al parecer mi prima tuvo un accidente y debe quedarse con mi tía.
-Oh... Lo lamento.
-Tranquila. -Dijo y dejó su teléfono a un lado. -También me dijo que podías llamar a tu madre para que viniera a buscarte ahora o...que te quedarás a dormir.
-¿De verdad?
-Si es que no te molesta, claro.
-No para nada.
-Podemos ver una película y hacer una especie de pijamada.
-Sería genial. -Dije y sonrió abiertamente.
-Bien, le diré que le avise a tus padres.
-Claro... Iré al baño.
Y tal como dije, fui al baño y al cerrar la puerta, grité en silencio, sin creer lo que acababa de suceder.
Pero debía relajarme, en especial si pasaríamos toda la noche juntos, solo debía preocuparme de ser yo misma y no echar todo a perder con mis nervios.
(...)
Estaba buscando una película en netflix, mientras Ashton buscaba algo de comer en la cocina, pero ya había pasado mucho rato y aún no volvía, por lo que fui a ver que sucedía, encontrándome lo dando pequeños saltos, intentando alcanzar uno de los muebles.
-¿Ash? -Pregunté y se dio la vuelta sorprendido. -¿Necesitas ayuda?
-Solo un poco. -Rió y camine hacia el. -¿Puedes subirte a mi espalda?
Asentí mientras el se inclinaba hacia mí y con un salto me subí a su espalda, sintiendo el aroma de su perfume.
-¿Lo alcanzas? -Preguntó el castaño.
-Si pero... ¿Qué se supone que debo agarrar? -Pregunté y ambos reímos.
-La crema batida, debería estar detrás de los paquetes de pasta.
Y tal como había dicho, allí estaba. La tomé y le dije a Ashton que me bajara, pero al hacerlo, perdí el equilibrio, pero él logró afirmarme a último segundo, quedando a pocos centímetros de mi rostro.
Quería gritar.
Y también saltar...
O hacer ambas acciones al mismo tiempo.
Pero nos separamos rápidamente, entre pequeñas risas nerviosas y ambos fuimos al sofá, para comenzar a ver la película.
(...)
-No entendí. -Habló Ashton, cuando los créditos de la película aparecieron.
-¿Estás bromeando?
-No, enserio. -Rió y rodé los ojos divertida.
-Básicamente podría decirse que el monstruo sólo era parte de su imaginación o como una especie de segunda personalidad. -Explique y al voltear a verlo, Ashton me observaba atentamente, con sus ojos somnolientos y una sonrisa.
-Sigo sin entender, me distraje contigo. -Rió e imite su acción, solo que nerviosa.
Nervios, el sentimiento que había estado presente toda la noche.
(...)
Los excesivos mensajes de Nadia, diciendo que ella y mamá vendrían a buscarme, me despertaron.
Me levanté lentamente, pues además de que aún tenía mucho sueño, no tenía que ropa ponerme y solo debía bajar e irme.
La bocina del vehículo de mi mamá me hizo dejar de admirar a Ashton durmiendo y me levanté rápidamente, pero cuando estaba saliendo de la habitación, sin querer pasé a llevar con mi brazo, una pequeña escultura de legos que se encontraba en el mueble, provocando que todas las piezas cayeran al suelo y con ellas, un gran ruido.
De inmediato Ashton se despertó y apenas me vió, recogiendo todos los legos, se levantó y fue a ayudarme.
-Perdón por despertarte... Y perdón por este desastre. -Dije sin mirarlo al rostro, pues estaba muy concentrada intentado recoger todo.
-Fue un accidente, no importa. -Contestó y sin darle respuesta, continuamos recogiendo.
Hasta que recogimos todas las piezas, me levanté esperando que Ashton también lo hiciera, pero en lugar de eso se quedó agachado, por lo que volví a agacharme, en el mismo momento en que él levantó la mirada, juntando nuestros labios por un mini segundo.
Me separé frenéticamente y antes de que dijera algo, tomé mi celular y corrí por las escaleras.
-¡Nos vemos!