Narra Lauren:
-¿Hace cuanto debió llegar? -Pregunté cansada, apoyada en el aisneto.
-Hace tres horas. -Respondió Carson de la misma manera,a lo que dí un suspiro.
Llevábamos casi cuatro horas esperando a Jordyn, cuyo avión aún no llegaba y no podía contestar, ninguna llamada.
Hasta que el celular de Carson comenzó a sonar y al leer el nombre de Jordyn, lo agarré antes que el, contestando.
-Carson. -Dijo la rubia, al responder.
-Lauren. -Corregí y ambas reímos. -¿Dónde estás?
-Por eso llamaba, el imbécil del conductor del bus, tomó un camino equivocado. -Explicó, dejándome atónita.
-¿Bus?
-Sí, como le dije a Carson. -Respondió obvia y volteé a ver al chico. -Espera, ¿Dónde creíste qué venía?
-Te habló luego. -Dije y colgué la llamada, lanzándole el teléfono a Carson.
-¿Que te dijo? -Preguntó confundío y reí irónica.
-Que tomó otro atajo, porque viene en bus. -Contesté enfadada y el abrió los ojos de par en par. -¡¿Como pudiste confundir un aeropuerto con un terminal de buses?!
-No sé, yo...
-No, cierra la boca. -Interrumpí, tomando mis cosas. -Pasé horas contigo y todo por tu maldito error, Lueders.
-Lo dices como si fuera lo peor del mundo.
-¡Lo es! -Exclamé alterada y todas las miradas de los demás, voltearon a verme. -Me voy.
-¿Qué? -Preguntó comenzando a seguirme. -Estamos a cuarenta minutos de tu casa, déjame ir a dejarte.
-Tomaré un taxi. -Respondí y el negó, poniéndose delante de mí.
-Por favor.
(...)
-Gracias. -Dije, cuando llegamos a mi casa.
-Espera. -Pidió, detuviendome. -¿Saldremos con Jordyn mañana, de todas formas?
-No sé, tal vez yo hable con ella a solas. -Conteste y el asintió, cabizbajo. -Buenas noches, Carson.
-Buenas noches. -Respondió y finalmente me bajé del auto.
Entré a mi casa, intentando ocultar mi enfado de mi rostro, pero cuando estaba por subir las escaleras directamente, me encontré a Hayden, mezclando algo, en la cocina.
-¿Qué haces? -Pregunté, acercándome.
-Oh, hola. -Respondió y me enseñó su masa. -Estoy preparando un buddin.
-¿Y desde cuando te gusta cocinar?
Dejó el bowl a un lado y se acercó a mí, tomando mis manos y sonriendo más de lo normal.
-Me compraron una cama. -Anunció y sonreí abiertamente.
-¿Y te gustó?
-¡Es la mejor cosa que me ha pasado en mi vida, Lau! -Respondió y reí.
-Me alegro, Hayden. -Contesté y el sonrió.
Soltamos nuestras manos, delicadamente y luego de una última sonrisa, subí a mi habitación.
(...)
Kenzie💕: Ya lo sabes ¿verdad?
Lauren💙: Sip.
Kenzie💕: Necesito que lo hablemos, lo antes posible.
Me quede pensando unos segundos, mientras veía la habitación de Johnny, hasta que dí un suspiro.
Lauren💙: Puedes venir a mi casa?
Kenzie💕: No será una mala idea?
Lauren💙: Todo saldrá bien.
Kenzie💕: Bien, te veo en media hora.
Dejé mi celular en la cama y me levanté, llendo al cuarto de mi hermano.
-Hola. -Saludé, entrando.
-Hola. -Respondió, sin despegar la vista de su libreta. -¿Como te fue con Jordyn?
-Llegará mañana. -Suspiré. -Fue todo una estúpida confusión.
-Lo siento. -Sonrió de lado y asentí.
-¿Y qué haces?
-Escribo una canción... Para intentar volver con Kenzie. -Contestó y yo me senté en la nueva cama.
-Oh... ¿Entonces no estas enfadado con ella?
-¿Debería estarlo? -Preguntó confuso y negué, repetidas veces.
-No, solo preguntaba... Porque acabó de invitarla a casa. -Dije rápidamente y se quedó mirándome, fijamente.
-¿Hiciste qué?
-Es mi mejor amiga y necesita hablar sobre una ruptura de amor, ¡No es mi culpa que tú estés involucrado, en esa ruptura, Johnny!
-Lauren, yo soy tu hermano. -Dijo, dejando la liberta. -Viste lo mal que estaba ayer y hoy estoy motivado escribiéndole, no puedo verla ahora.
-No tienes que verla. -Dije.
-¡Vivimos en la misma casa!
-¡Pero no en los mismos cuartos!
-¡SIGUE SIENDO LA MISMA ATMÓSFERA!
-¡TODO EL MUNDO COMPARTE LA ATMÓSFERA, VICENT!
-¡BUENO NO ES MI CULPA, NO PONER ATENCIÓN EN CLASES!
-¡ERES UN INÚTIL!
-¡Hey! -Exclamó Hayden, apareciendo. -¿Por qué demonios están discutiendo?
Era un momento serio, pero ver a Hayden con un delantal de flores y actuando como su fuera nuestra mamá, no ayudaba a mi enojo.
-Invitó a Kenzie. -Dijo Johnny, mirándome indignado.
-Oh... Bueno, no esperaba esa respuesta. -Admitió Hyaden y rió, a lo que rodé los ojos.
-No es tan terrible, estaremos en mi habitación y se irá en tres horas.
-Tres horas, es un eternidad.
-Lo es para ti, que pasas aquí encerrado.
-¡Estoy encerrado, escribiendo una canción para ella! -Chilló y cuando estaba por contestar, Hayden se interpuso entre ambos.
-Basta. -Ordenó. -Ninguno tiene razón, pero la chica ya está invitada, así que haremos lo que debemos hacer.
-¿Qué?
-Ninguno saldrá de su cuarto. -Explicó. -Caundo Kenzie llegué, Johnny tendrá la puerta cerrada, cuando a kenzie entré, el podrá abrirla, cuando Kenzie quiera ir al baño, la cierras, cuando vuelva a entrar, la abres y cuando Kenzie se vaya tu la ci...
-¡Entendimos! -Exclamamos, Johnny y yo, al unísono.
-Genial, ahora cada uno váyase, donde acordamos y déjenme terminar la comida en paz.
Johnny y yo nos matamos con la mirada, una vez más y finalmente salí de la habitación, para dirigirme a la mía.
¿Por qué saldría mal? Johnny estaba exagerando.