the way you make me feel; Michael Jackson.

Cuarenta y cuatro.

1990, Santa Barbara.

Las chicas se despidieron de mi y cada quien se fue a su respectivo hogar, entré a mi casa venía con 8 bolsas llenas de ropa.

También le traje unas camisa a Michael de color rojo, él ama ese color, y le queda muy bien! Es oro puro verlo vestido de rojo. Subí a la habitación de arriba, y Michael jugaba con Prince, me quedé en el marco de la puerta sin hacer ruido y me quedé viendo como Michael le hablaba tiernamente a Prince, existen cosas tiernas y esto.

Me acerqué por detrás de él y lo abracé, pero ni siquiera se asustó.

—Hola querida, que bueno que llegas. –le di un beso en la mejilla–

—¿Como supiste que era yo? –dije riendo– Pudo haber sido un ladrón o una voladora.

—Tus manos las reconozco, suaves y delicadas. –me dijo riendo–

Me senté al lado de él y Prince nos veía con una pequeña sonrisa, yo empezaba a tocar su pequeña nariz, amo hacer eso. Él tomó mi mano con sus dos manitas y empezó a jugar con mis dedos, reí al ver su carita de concentrado mientras veía el anillo que tenía en mi dedo.

—Sabes? Me gustaría tener 6 hijos. –dijo Michael observando a Prince–

—¿6 hijos? Es demasiado para mi, me dolió mucho cuando tuve a Prince, imagínate 6, uff.

—Lo sé, pero al menos quiero 4 hijos... Imagínate a muchos niños corriendo por la casa jugando con las super soakers y bombas de agua, sería muy lindo.

—Eso lo veremos más adelante cariño, ¿vale? –besé sus labios– Ah, casi lo olvido.

Me levanté de la cama y tomé las bolsas, tomé la camisa (como le digan en su país) y se la enseñé a Michael.

—Sé que te gustan estos tipos de camisa y más cuando son de color rojo, cuando lo vi solo me acordé de ti y la compré. –imagen que está en multimedia–

—Oh por dios! Me encanta, y es casi de mi talla justo como a mi me gustan, gracias!

—De nada lindura.

(...)