Sesenta y seis.

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1992, Santa Bárbara.

Llegué a casa con algunos regalos para Michael, no dejé que nada arruiné los regalos que le daré a mi bebé, compré algunos chocolates que a él le encantan demasiado, también un reloj muy lindo, no soy muy buena comprando regalos para Michael... Y otras cosas más, y además de que hoy en la madrugada sale mi vuelo a Bremen, él no sabe que yo llegaré a donde está, es una sorpresa y le dije a Frank que no hablara. Tenía la pequeña maleta lista, sólo me quedaré por dos días, no mucho.

—Es hora de ir a dormir, tenemos que levantarnos temprano para ir donde Papi.
–subí a mi habitación–

Le puse su pijama y le di su biberón para que se fuera a dormir, al igual yo me cambié para irme a dormir, me acosté y me cubrí a mi a y Prince con una manta. Le di un beso en su mejilla y me quedé profundamente dormida.
Y poco más tarde mi teléfono empezó a sonar, lo contesté rápido para que Prince no se despertara, miré el reloj que marcaba las 12:03AM.

Habla ____ Jackson ¿qué se le ofrece?
–respondí con sueño–

—!Gianna ya dio a luz! –escuché la voz de Dominick muy emocionado–

—¿Enserio? Oh dios. –sonreí–

—Estoy tan feliz, se parece mucho a Gianna, es tan linda... Me gustaría que vinieras pero debes tomar un vuelo a las 2, mejor sigue descansando.

—¿Qué? No! Al carajo con dormir, tengo que estar en el momento más importante en tu vida!

—Pero... ¿con quién dejarás a Prince?

—Maggie podrá cuidar de él, ¿en qué hospital están?

—En el (inventen uno)

—Queda cerca, en unos minutos estaré ahí, nos vemos.

Colgué el teléfono y bajé a la habitación de Maggie, toqué la puerta dos veces y al rato salió ella.

—Lamento estarte molestando a estas horas, pero quiero que por favor cuides a Prince mientras voy al hospital, Gianna acaba de dar a luz.

—No se preocupe señorita Jackson, yo lo cuidaré. –me respondió amablemente–

—Muchas gracias... No tardaré en regresar.

Ella asintió y se dirigió hacía mi habitación, no quedaba tiempo de arreglarme, sólo me puse mis pantuflas y mi abrigo. Salí de la casa y me subí al auto.

(...)

Llegué al hospital, rápidamente bajé del auto y entré, Dominick me estaba esperando y con alivio me miró.

—!Qué bueno que ya estás aquí! –me dio un abrazo–

—Felicidades! –besé su mejilla– Serás un grandioso padre.

Caminamos hasta la habitación donde estaba Gianna, entré con cuidado y ella estaba con la bebé en brazos.

—Hola. –me dijo en un tono de voz bajito mientras tenía una gran sonrisa–

—Oh dios, es tan hermosa. –admiré a la bebé– ¿Cómo se llamará?

—Mia Alessandra Leonetti. –dijo Dominick– Me encanta ese nombre.

—Es muy precioso el nombre, ¿puedo cargarla? –le pedí a Gianna–

Claro.

Me senté en una silla al lado de Gianna, puso con cuidado a Mia en mis brazos, y el recuerdo de Prince en mis brazos recién nacido se me vino a la mente, ese fue el día mas feliz de mi vida, y de repente la puerta se abrió y pudimos ver a Selena.

—Hola. –dijo hablando bajito– Lamento llegar un poco tarde, pero aquí estoy.

Se acercó a mi y admiró a la bebé.

—Es muy preciosa, que cosita tan tierna.
–dijo sonriendo–

—Gracias, me han dicho que se parece a mi. –dijp Dominick con ego–

Sí, claro. –dije con sarcasmo–

—Solo falta que Selena sea madre, ¿tú y Chris para cuando? Ya son esposos, deberían tener hijos ¿no?

—Estamos pensando en eso... Pero ya sabes, quisiera seguir con mi carrera musical.

—Entiendo, pero algún día vas a tener hijos.

—Yo quisiera tener 10 hijos. –dijo Dominick–

—¿Estás loco o qué? –Gianna empezó a reír–

—Está igual que Michael, él quiere 6 hijos.
–me reí–

—¿Para qué quiere 6 hijos si ya tiene 2? Bueno, el segundo que viene en camino.
–preguntó Dominick confundido–

—¿Y tú para qué quieres 10, entonces?
miré a Dominick con cara de "¿wtf?"

Y discutimos por un rato sobre eso, porque en realidad ¿quién tendría 10 hijos? Aunque Katherine tiene 9, pero es demasiado, no aguantaría tener tanto hijo.

the way you make me feel; Michael Jackson.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora