the way you make me feel; Michael Jackson.

Cincuenta y dos.

1991, Santa Bárbara.

Selena se quedó en la tarde conmigo en casa, Michael tuvo que salir para hablar con Frank sobre lo del asunto del nuevo disco.

Prince estaba jugando en el suelo con sus juguetes, mientras Selena y yo hablábamos en el sillón.

—Quiero confesarte algo, pero jurame que no le dirás a nadie. –me vio a los ojos–

—Lo prometo, no sé lo diré a nadie.

—Vale.... Estoy saliendo con Chris. –dijo con una gran sonrisa– Desde el año pasado... Pero tenía miedo de decírselo a alguien, y sé que mi Papá no aceptará la relación y eso es lo que más me preocupa..

—¿Chris Pérez? –le pregunté–

—Sí,... Estoy tan enamorada de él. –dio un suspiro mientras miraba a otro lado–

—No tengas miedo, nadie se dará cuenta de esto, el secreto está entre nosotras, bueno y también con Chris. –dije riendo– Mejor pongamos un poco de música y bailemos.

Saqué el álbum "Ven Conmigo" y lo puse, y mi canción favorita sonaba y las dos nos pusimos a cantar.

—Baila, baila esta cumbia un ritmo, ritmo sin igual. Nadie se quede sentado todos vamos a bailar... Baila, baila esta cumbia, mueve, mueve la cintura, todos las manos en alto y griten, griten con locura. –cantamos a todo pulmón–

Nos tomamos de las manos y empezamos a bailar cumbia, Selena es muy talentosa, la admiro mucho. Prince nos veía sin saber lo que estábamos haciendo, yo lo tomé en mis brazos y empezamos a bailar, él se reía a cada rato, esta canción es buenísima, si fuera por mi este álbum lo escucharía por todo el día. Reíamos y cantábamos al mismo tiempo, nos cansamos y caímos rendidas al sofá, las canciones de Selena te hacen sacar tú bailarina interior y toda tu energía.

—Estoy pensando en sacar una nueva linea de ropa. –dijo Selena con emoción–

—¿De veras? Tendrás éxito, porque tú estilo es único y a toda la gente le encanta.

—¿Tú crees? –me miró con ilusión–

—!Claro! Solo debes echarle ganas y lo conseguirás, te lo aseguro y si necesitas ayuda aquí estoy yo para ayudarte. –le sonreí–

—Muchas gracias ____ –me abrazó fuerte–

—De nada, sabes que siempre puedes contar conmigo en lo que sea, y estaré ahí para ti siempre.

(...)