-68-vómitos y mareos

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-buenos días jefa- dice Camila apenas aparezco en su campo de vista.

-buenos días Camila, como te fue ayer- sus mejillas se sonrojan logrando que entrecierre mis ojos en su dirección.

-bien jefa, sin ningún problema- dicho esto entre en mi oficina ocupándome de papeleo que tenía que revisar.

-jefa voy a almorzar le traigo algo o vas a salir- la cabeza de Camila se asoma por mi puerta.

-ve tranquila yo voy a salir a comer algo- digo dejando de lado por un momento unos papeles

-está bien-cerro la puerta, volví a organizar los papeles y cogí mi bolso y Salí de allí revisando las redes sociales en mi celular.

-por fin sales – me congelo momentáneamente cuando escucho la voz de Clark- piensas que con prohibirme la entrada en el edificio te vas a librar de mi – esta arrecostado en su carro con unos lentes de sol y un polo y un jeans se veía tan comible de ese modo.- mujer que mis ojos están aquí arriba- dice con una sonrisa pícara acercándose a mí.

-ni se te ocurra dar otro paso- digo con voz fría y él se congela estando a un metro de mí.

-isa por favor enserio te vas a molestar por lo de ayer.- sin importarle nada me abraza, trato de soltarme pero ejerce más fuerza.-dime porque te has enfadado-dice pasando sus manos por mi espalda y cabeza

- tengo hambre- dije para cambiar de tema

-pues entonces vamos por comida.-

La conversación fue sobre los bebes, y siempre que tocaba el tema de lo que sucedió en el restaurante yo rápidamente sacaba cualquier otro tema para hablar, la comida fue bastante bien, aunque algunas personas me miraban raro por la cantidad de comida que teníamos en la mesa, volví a mi oficina y Clark a su oficina.


-señorita tiene que volver a su asiento, en pocos minutos aterrizamos- la voz de una de las azafatas se escuchó al otro lado de la puerta, pero es que desde que empezó al vuelo los vómitos no han parado.

-en un mo...- y hay quedo mi frase ya que otra arcada llego hasta mi boca.

-yo me encargo señorita-la voz de Clark llega poco antes de que este abriera la puerta y entra conmigo al mini baño- ten amor- dijo pasándome uno de los dulces los cuales son capaces de detener un poco los vómitos, me levante y juague mi boca antes de comerme el dulce, me deje guiar por Clark devuelta a nuestro asiento, mi cuerpo estaba tan agotado que deje que Clark se encargara de abrochar mi cinturón.

Sentí el descenso y movimiento mí alrededor pero estaba tan cansada que no quería abrir mis ojos.

-amor es momento de bajarnos- dijo Clark dejando besos en mi cachete y mi cuello,- vamos en el hotel podrás descansar todo lo que quieras.- abrí mis ojos y lentamente, pesadamente me lente de la silla y Salí de allí, un total privilegio contar con un avión privado 

-¿dónde está nana y luna?-

-ya nos están esperando para recoger el equipaje, ¿tu estas bien?- me pregunto con cara de preocupación.

-solo necesito recostarme un poco y ya pasara- después de nuestra primera ecografía los vómitos, mareos y el sueño aumentaron me es muy difícil mantenerme en pie, el sueño me gana y ni hablar de mi barriga esta sí que ha crecido. Entrelazamos nuestros brazos y el me ayudo a bajar, y estaba en lo correcto la nana nos espera con luna en brazos para dirigirnos al hotel de mi familia.

-les damos la bienvenida al hotel zafiro, tienen reserva- nos atendió una linda recepcionista, pero su sonrisa estaba sobre cargada y miraba a su lado izquierdo constantemente.

-claro una reserva de dos habitaciones a nombre de Carla González- dijo mi nana, no podríamos dar nuestros nombres el gerente sabría que lo visitaríamos.

-sus habitaciones son las suite luna 1 y 2- si mis padres tenían ocurrencias demasiado raras para nombrar sus hoteles, el nombre de zafiro, fue por el color de nuestros ojos, y lo de las suite ni la más mínima ni remota idea de porque-aquí tiene desea que les ayuden con su equipaje.- su cuerpo estaba demasiado tenso para su bien-

-por favor.- sonrió la nana para darle un poco de tranquilidad. Un joven llego con un carito para equipaje y allí subió nuestras maletas, él también estaba tenso y fue el que me dio lo que necesitaba, un hombre estaba parado un poco más allá, lo reconocí al instante, fue el que puso problema cuando mi papá me presento como su sucesora, su mirada está bastante seria, pero para eso estaba yo aquí, tenía que saber qué es lo que ocurre con aquel hombre para que los empleados renunciaran tan rápidamente.

-un jefe muy pesado- dije cuando el ascensor cerró sus puertas, el joven no contesto inmediatamente.

-lo normal en un jefe señorita- dijo esquivando la mirada de una de las esquilas del elevador, alce la vista y atravesó de mis lentes de sol vi la cámara de seguridad que había en este y con eso supe que el joven no diría nada más, llegamos a nuestro piso y el joven dejo primero el equipaje de nana y luego el nuestro.

-me podrías conseguir una cuna para la bebe- sabía que se podría porque hicimos el encargo cuando hicimos la reserva del cuarto.

-claro que si señorita en unos momentos se la facilitaremos.-dijo esta vez mucho más relajado

-gracias- dije y la nana salió con él, me acosté en la cama y Clark tenia a luna en sus brazos, la coloco a mi lado.

-será mejor que duermas un poco- dio un beso en mi cabeza y se alejó un poco me quite mis sandalias, gafas y el sombrero y acomode las almohadas como barrera protectora para luna y nos acomode en el centro de la cama, y me deje llevar por el sueño.

CLARKDonde viven las historias. Descúbrelo ahora