-Capítulo 3-

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Han pasado unos dos meses desde aquella vez que hablé con Camila, la verdad es que me parece simpática, pero yo dije algo al iniciar la secundaria, y es que quiero estar sólo, y pues, por ella comienzo a sentir algo, pero no, no quiero... Además hay algo, he notado como la molestan con un tal Darío, creo que porque es su novio de primaria algo así entendí, en estos dos meses me di cuenta de eso y prefiero no meterme, no quiero generarle problemas a ella ni nada por el estilo...

-Heeeey Marcoooouuu. Dice Rodrigo mientras viene corriendo. -Hay un partido ahora con el 1ero C vamoooss.

Accedí a la invitación ya que no había profesor, jaja jajaja, bueno así hubiera habido igual iría jajajajaajaja, cuando llego al campo veo a Camila conversando con Darío, se les ve entretenidos, al parecer el también va a jugar...

Camila me ve y se va, imagino que al salón...

Unos minutos más tarde...

Mi salón ganó el partido, hice dos goles y estoy muy contento, no se porqué pero me alegra haberle ganado a Darío

-Buen juego Marco, te luciste.

-Gracias Rodrigo jajajajaja

Al llegar al salón veo a Camila sentada pensativa, me acerco a hablarle pero automáticamente nos empiezan a molestar, ¿que no puede uno hablar ni nada?

Basta, quise hablarle al menos ya que no lo hago mucho, pero creo que no funciona...

-Marco, ¿podemos hablar?. Camila suena preocupada, seria, me da mala espina...

-Si, no te preocupes.

-No me gusta que me molesten contigo, no somos nada para que lo hagan.

Sus palabras fueron frías, pero su mirada me refleja tristeza...

No se que decirle, me parece raro lo que me dice, no voy a negar que me agrada mucho, pero sólo quería que hablemos, ¿por qué me dice esto?

-Si, tienes razón, no tienen porque molestarnos, no somos nada, ¿que sugieres?

Sólo atiné a decirle eso, que mas podía hacer, creo que nada :(

-Que dejemos de hablar.

Su frase fue contundente, si eso quiere, eso tendrá... Aunque me duela un poco.

-Perfecto, como quieras, adiós Camila.

Me dirijo a mi asiento, Rodrigo habrá notado mi rostro desencajado, o no lo sé.

-Hey, ¿que pasa?

-Nada, sólo que, ya nada me une a Camila.

-Marco, a ti ella te gusta, comienzas a sentir cosas por ella, no veo necesidad de que se alejen, Darío es su pasado, se hablan, pero y ¿si tú también le gustas a ella?

Esto que Rodrigo dice me calma, pero ella misma me pidió eso, maldita sea, no es mi amiga, ni mi enemiga, diablos, la odio, por ser tan linda y no querer hablarme, no le hablaré más.

-Quizá tengas razón, pero ella quiso eso, y yo no puedo hacer nada Rodrigo, las cosas están así.

-Bueno, pero cambia de cara amigo.

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