-Capitulo 58-

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He escuchado la voz de Camila después de bastante tiempo, la he visto después de mucho, ella nisiquiera se imagina todo lo que la he extrañado, nisiquiera tiene la más mínima idea de que ahora mismo tengo aquí en mi bolsillo, ese papelito que hace mucho tiempo me dio, no se da cuenta de que ahora mismo estoy pensando en ella, no sabe que en el fondo lucho contra mi mismo para no  levantarme y abrazarla, decirle todo lo que todavía siento, rayos, la tengo junto a mi, y no puedo hacer nada.

-Hola Marco, hola Camila.

Ross se sienta al frente de nuestra mesa, en el mismo grupo, al parecer mientras yo estaba encerrado en mis pensamientos el profesor la mandó hacia aquí.

-Roosssss!!!- dice Camila, la presencia de ella la alegra mucho.

-Ross, que bueno que estés aquí- digo completamente neutro.

-Justo el profesor me mandó aquí.

De pronto los tres nos quedamos en silencio, mirándonos sin decir nada, por mi parte no se que decir, Camila, quizás a ella le esté pasando lo mismo que a mi, Ross es muy, muy cuidadosa, siempre pendiente al sentir de los demás, y estoy seguro que si está callada es porque siente que cualquier cosa nos pondría incómodos, en el fondo se lo agradezco, no deseo que mis nervios sean notados por Camila, tampoco deseo tener una conversación incómoda, porque eso es lo que seria en estos momentos, incómodo, me siento apresado, amarrado de brazos y piernas, sin poder decir ni hacer nada, simplemente me giro con dirección a la pizarra, y evito en todo momento voltear y conectar miradas con Camila.

-Bueno alumnos, los grupos han sido formados, les aviso que algunas veces habrán proyectos grupales que ustedes deberán desarrollar en conjunto, claro eso más adelante y previamente a aquello tendremos lo que es la teoría del tema, los trabajos grupales tienen principalmente un fin de práctica, hacer que ustedes al elaborar esquemas o exposiciones se familiaricen más con el tema y cosas por el estilo, bien, dicho eso muchachos, bienvenidos a su tercer año de educación secundaria, ya podemos comenzar con la clase...

Todos están atentos a la clase, y yo lo habría estado de no estar sentado aquí, hago todo lo posible por mantener la mirada en la pizarra, entender y no distraerme a la explicación del profesor, el tema en si no está muy complicado, lo complicado está tener que concentrarse teniendo al amor de tu vida a tu lado, bueno, aunque ya no esté conmigo, es que, yo siento que si, basta.

El profesor da ejemplos, cuenta hechos históricos, explica con gestos, etcétera, luego de dos horas pedagógicas se retira del salón, aún no ha dejado ningún trabajo grupal, bueno, es primer día, más bien es algo poco común que el profesor haya hecho clase, normalmente en el primer día los profesores sólo se presentan y dan su lista de materiales, el profesor de ahora lo hizo, pero fue muy breve.

-Buenas tardes chicos.

La voz proveniente de la puerta del salón hace que todos volteemos y miremos hacia adelante.

-Hola chicos, a ver, para poder comenzar necesito que ordenen sus mesas, si, si, ordenen sus mesas, desarmen sus grupos y coloquen todo en orden, a ver chicos, por ser el primer mes, dejare que ustedes elijan donde y con quien sentarse, al próximo mes ordenaré de acuerdo a la lista y todo lo demás.

Todos nos alegramos y rápidamente Kelvin viene corriendo a la mesa donde me senté con Camila y se lleva mi mochila, la coloca en una mesa adyacente a la de Ryan y Matías, me dirijo lentamente, veo que Camila se va con Ross y se sientan a una esquina del salón, el mismo lugar donde estuvo antes de que el profesor de historia llegue y forme los grupos.

-Listo chicos, bueno, darles una cordial bienvenida a este nuevo año, les deseo todo lo mejor, espero que este año sea de mucho provecho para ustedes, dejen que me presente, yo soy el profesor Segundo Obregón, y espero llevarme muy bien con ustedes chicos, nosotros podemos ser patas y todo lo que quieran eh, ah pero eso si, en los exámenes si compare, ahí si te pones las pilas, jajaja.

Todos echan a reír con el comentario del profesor, se ve que es bien buena onda.

-Yo les voy a enseñar química muchachos, es fácil ah, no te me loquees ni te pongas a volar porque no es tranca, como dices, es "papayita" ya tu me entiendes pues.

Todos ríen en coro, miro en dirección al lugar de Camila y noto que también ríe junto a Ross, me alegra ver su sonrisa, a mi costado esta Kelvin haciendose señas con Matías, seguramente andan planeando algo.
Ahora que veo bien, no veo a Valeria por ningún lugar, ¿qué habra pasado con ella?, ahora que lo pienso más, recuerdo que una vez me dijo algo como que quizá no iba a estar en el colegio para este año, ¿qué habría dicho ella ahora mismo?, conociéndola habría agarrado a Camila de la mano o me habría jalado a mi para que me lleve hasta el lugar de Camila, y no se quedaría tranquila hasta que nosotros dos conversemos.

-Marco, ¿en qué piensas?

Miro a mi amigo.

-En nada, me Di cuenta que Valeria ya no está aquí.

-Tampoco Michell, pero en ella ni te fijaste seguramente.

-Cierto, ella tampoco está.

-Valeria dijo que quizá ya no estaría este año, ¿te acuerdas?

-Tenía un recuerdo borroso, pero ahora ya recuerdo mejor.

-¿piensas hacer algo?

-¿sobre qué?- lo miro.

-Camila.

-Creo que no debo hacer nada Kelvin, creo que debo dejar así las cosas.

-Pero eso no es lo que tu quieres, ¿o si?

-No hace falta ser como Ryan en las matemáticas para darse cuenta que no.

-¿yo que?- dice Ryan mirando.

-Tu nada- le responde Kelvin.

-Esos compadres, oigan mostritos, a ver escuchenme pues, esta bien que estoy feito y todo pero haganme caso pues.

Todos se echan a reír, incluyendo Kelvin y Ryan, yo sonrío, todos miran en dirección a mi lugar, incluso Camila, quien parece sonreír con lo que acaba de pasar, no se que hacer.

Hooola, ¿qué les parece? Marco esta perdidoooo, no sabe que hacer, las preguntas ya le comienzan a llover, ¿el tema?, Camila.

De tu mano por siempre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora