De tu mano por siempre

-Capítulo 93-

Estoy realmente muy cansado, el partido ha sido muy interesante, al final hemos ganado por dos goles a cero, el primero fue de Kelvin, le mandaron un centro y el, no se cómo, pero logró dar un cabezazo y hacer el gol, fue gracioso porque hizo un gesto de "¿cómo rayos lo hice?", nos echamos a reír y a celebrar juntos, el segundo fue mío, de tiro libre, luego de practicar tanto esos tiros, me salió uno, al mismo estilo de CR7, el primero en saltar sobre mi espalda fue Kelvin, los demás chicos también celebraron junto a mi, echo de menos mucho a Anthony, Raúl, Jack, hacen falta, sobre todo por el gran sentido del humor que tenían, al final del partido, el profesor entró al campo y junto a nosotros formó el "corazón", nos felicitó por el buen resultado y dijo que ésta es una buena y gran forma de empezar la temporada.

-Qué buen partido el de hoy. -dice Rodrigo, que está parado a mi lado frente a la puerta del colegio.

-Gracias. -digo con un gesto de manos.

-Fue un tiro libre estupendo. -dice devolviendo el gesto e ingresa al plantel, yo aún no lo hago porque estoy esperando a Kelvin, se tarda mucho en bajar de auto.

-Kelvin, rápido. -digo acercándome.

-Ya estoy. -dice y baja del vehículo.

-Vamos, que necesito ir a darme una ducha. -digo y comienzo a entrar al colegio. Miro en dirección de mi salón, está cerrado, deben estar en clase, aunque ya casi va a ser recreo, ¿o no?, diablos, es horrible no tener un reloj ahora mismo, no sé que hora es ni nada.

-Rápido Marcoooo. -dice José sonriendo y pasando trotando a mi lado.

-Dale. -digo sonriendo y comienzo a trotar a su lado.

Luego de unos segundos más estoy ya dentro de la ducha, comienzo a dejar caer el agua sobre mi Y que se lleve todo lo sucio que estoy por el partido, me he ensuciado mucho esta vez, me he caído varias veces producto de las infracciones que cometía el otro equipo, realmente un baño relaja todos los músculos.

-Marco, te espero aquí. -escucho decir a Kelvin desde afuera.

-Ya salgo. -digo y unos segundos después abro la puerta.

- ¿tu polo?, no me digas que no has traído. -dice Kelvin al ver que he salido con medio cuerpo desnudo.

-Nada que ver, está en mi mochila. -digo acercándome y sacando de allí mi prenda.

-Menos mal. - dice Kelvin sonriendo.

-Listo, vámonos. -digo sonriendo.

Kelvin y yo salimos de los baños, junto a los compañeros de equipo, cada uno se va yendo a su salón pero antes se despiden de todos con un choque de manos y unas risas más.

-Estoy muy cansado mano. -me dice Kelvin tomándose la cabeza.

-A mi me duele todo. -digo tomándome la cintura.

-Jajajajaja, pero hemos empezado bien. -dice riendo.

-Ya rugiste hermano. -digo abrazandolo por los hombros y así caminamos hasta el pie de las escaleras.

Cuando llegamos ahí vemos que la puerta del salón esta abierta, Ryan nos ve desde arriba y avisa seguramente a los chicos para salir a recibirnos, quiero que salga Cami y lanzarme a sus brazos, a pesar de que solo me fui unas horas ya la hecho mucho de menos.

-Marcoooo, ¿Cómo les fue? -Dice Ryan chocando las manos conmigo.

-Hemos ganado. -digo riendo.

-Y nosotros hicimos los dos goles. -dice Kelvin haciendo un dos con los dedos.

-Felicidades mongolos. -dice Ross sonriendo y abrazándonos.