De tu mano por siempre

-Capítulo 17-

...
Quiero moverme y no puedo!! El cuerpo me pesa, ¿que rayos?.

Al fin abro los ojos, tengo la frente mojada por sudor, mi piel, esta como de gallina, mi cuerpo me tiembla, esa voz, esa risa, aún resuenan en mis oídos. Que pesadilla para más horrible, ¿por qué? ¿quién era el de esa voz? Me daba mucho miedo, esa risa, tan malévola, refiriéndose así de Camila, diciendo que ella no me quiere, pero no puede ser, ella misma me lo dijo, ¿por qué he tenido que soñar eso? Maldita sea ni siquiera podía moverme, mi cuerpo me pesaba, era como si alguien estuviera deteniendo me, ¿Camila, estará bien? No la he visto hoy, no se nada de ella...

Ha pasado un rato desde que desperté, Johan sigue durmiendo a gusto, al parecer ni ha notado el sacudón que di en la cama.

Decido volver a dormir, me persino y cierro los ojos.

A la mañana siguiente:

No he sentido en que momento mis papás han llegado, sólo que para cuando me levanto están dormidos ya, mi madre me ve levantado y se levanta.

-¿qué hora es?

-Las 9 ma.

-Tengo mucho sueño, ¿Johan?

-Lo llevé al colegio, llegó tarde, pero ahí esta, ah, y cogí plata para comprarle fruta y refresco para su lonchera.

-Gracias hijo, estoy cansada.

-¿A qué hora llegaron?

-A las 6 creo.

-Jaja jajaja, duerman.

Me retiro y voy a mi cuarto, me hecho en mi cama y me pongo a pensar, otra vez en la maldita pesadilla que tuve ayer, bueno, hoy por la madrugada.

Comienzo a alistar mis cosas, mi mamá ya se levantó y ha ido al mercado, son casi las 11 ya y tengo que alistar un polo de cambio, hoy es jueves y tengo educación física!!! Mi curso favorito jajajaja, ojalá y hoy la profesora nos deje jugar fútbol, es mi deporte adorado, siempre estoy jugando, normalmente los fines de semana, no estoy en un club porque las tarifas son muy altas la verdad, pero como quisiera formar parte de uno, creo que el talento lo tengo, rayos.

Rato después :

Ya estoy en mi salón de clases, estoy algo aburrido, Kelvin y Jhosep aun no llegan, y con ellos siempre converso, me acerco a la puerta y veo a Rodrigo, decido acercarme.

-Hola Rodrigo, ¿cómo estás?

-Habla, bien, hablamos.

-¿Un partido en el recreo?

-Normal, cada uno en su salón.

-listo.

Ya no somos los amigos de antes, cualquier se da cuenta, pero de verdad que no creo que sólo el hecho de estar en salones distintos haya hecho que el esté así. Hay algo más, pero no sé que.
Veo a Camila llegar.

-Hola Marco.

Me besa en el cachete.

-Hola Camila.

Se da cuenta de que miro hacia el salón de Rodrigo.

-¿Pasa algo?

-No, nada.

Miento.

-No te creo, estás raro.

Me encanta cuando me observa de tal modo que sabe cuando estoy y cuando no estoy bien.

-Me conoces.

-Claro que si Marco. Pero ya, vamos dentro, ya llega el profesor.

Muchos nos dicen que debemos oficializar o algo así, que nos vemos lindos juntos, que cuando hablamos los ojos nos brillan y cosas así, pero no sé si ella quiera, me refiero a eso de ya tener una relación.

Cuando Kelvin llegó le dije lo del partido de más tarde, se emocionó bastante y me pidió que me esfuerce al máximo para golearlos, a lo cual acepté rápidamente, siempre quiero ganar, odio perder.

Antes de irnos a jugar le pedimos a la profesora de educación física que por favor nos preste un balón, al final accedió.

-¡Marco!, ¡vienen rápido ah!

Fiorella grita fuerte y todos la oyen, hoy hay un compartir para la tutora por su cumpleaños creo, algo así oí.

-¡yaaaaa!

Estamos listos para jugar, por mi salón están Kelvin, Max, Axel, Aaron, Matias y yo.

Empezamos a jugar, Rodrigo lo viene haciendo muy bien, su equipo no esta mal, ya quiero los campeonatos este año, podemos ganarlo, estoy seguro.

El equipo de Rodrigo juega bastante bien, pero bastante sucio también, voy corriendo con el balón, Rodrigo me patea horrible y caigo al suelo.

-¡Hey! ¡que chucha te pasa!

Escucho que Kelvin se abalanza hacia Rodrigo mientras Matias me levanta, el golpe fue fuerte.

-¡Que rayos tienes!

Me dirijo a Rodrigo, mirándolo fijo. Tengo unas ganas enormes de meterle un par de puñetes en toda la cara, pero todavía lo considero amigo.

-No hice nada, se cayó solo.

-Dejalo Kelvin, esta loco.

El partido no continuó bien, las faltas y los insultos por parte del equipo de Rodrigo no pararon.

*no olviden dejar sus votos!!*