-Capítulo 68-

187 20 4
                                    

Camino lentamente con dirección a mi casa, tengo una enorme sonrisa dibujada en mi rostro, me siento muy bien, me siento... Vivo!

¿Dijo que hablaríamos mañana?, si, lo dijo, eso quiere decir que, ¿quiere hablar conmigo?, ¿me dirá que quiere regresar conmigo?, me ha dicho que me ama, entonces eso significa que si, que quiere regresar conmigo y que me extraña, o al menos eso espero.

Vamos Marco, no dudes, ¿qué otra prueba quieres?

No lo sé, creo que no estaré tranquilo hasta que tengamos una conversación entera y exclusivamente dirigida al tema, "nosotros".

Si antes dudaba que ella te ame ahora estoy muy seguro, ya hablarán.

Es increíble, necesito tanto hablar con alguien que hablo sólo, como quisiera que esté aquí Eznaider o mi prima, alguien.

-Mostro!!!!!

Esto tiene que ser brujería, alzo la mirada y tengo a Eznaider frente a mi, paseando a Stitch, así se llama su perrito, mi sobrino jajaja.

-Mostroo. -me acerco y lo saludo con un ligero abrazo y un choque de manos, luego me agacho y cargo a Stitch, éste me lame toda la cara, a mi no me molesta.

-Parece que te he invocado, justo estaba deseando que estés por aquí.

-Mmmm, ¿qué ha pasado?. -dice mirándome. -Traes una sonrisa que... Ayyyy no, no me digas Mostro que tu y ...

-Casi nos damos un beso.

-Pero, Marco ella... Osea mostro, te había dejado todo triste y tu estabas mal, manito yo no quiero que eso te vuelva a pasar porque ahí si te juro que le tiro piedras a su casa jajajaja.

-Jajajajaja, esta bien, es que lo que pasa es que hoy...

Le cuento todo lo que pasó hoy a Eznaider, este me escucha atentamente haciendo gestos, por ratos se ríe, y se ríe a carcajadas cuando le cuento que me atacaron tres tipos, pero luego cuando le digo que llegué hasta direccion se pone serio, finalmente me queda mirando sin decir nada.

-Di algo oe.

-Van a volver, es que es obvio mano, de hecho que van a regresar, ya ni deberías preguntar jajaja, si hoy se acercaron así, es porque bueno si te extraña también, pero vayan despacio, primero conversen.

-Eso es lo que quiero hacer.

-¿y?...

-Me dijo que mañana.

-Mmmm, veamos, mañana es... Viernes, aaah, de razón jajajaj.

-¿Qué cosa?

-Que ellaaaaa quizá quiera hablar contigo mañana porque sabe que ya no se verán hasta el lunes y no se va a avergonzar mucho porque sabeeeeeee que al día siguiente cada uno estará en su casita, bueno, eso depende porque quiero que vayamos al play, ¿se puede?

-Que vicioso.

-Asuu

-Jajajajaja mentiraa, si si vamos normal.

Eznaider sonríe.

-Espero que todo vaya bien contigo manito.

-Gracias mostro, ahora voy a casa, cuidate.

-Nos vemos el sábado, nos vamos al play.

-Si manito, nos vemos el sábado.

Me despido de Eznaider y comienzo a apresurar el paso con camino a mi casa, sigo teniendo esta sonrisa en mi cara, llego a la puerta, la abro y comienzo a subir por la escaleras, cuando llego a la sala veo a mis padres sentados, entonces recuerdo que todavia tengo el labio golpeado y paso rápidamente luego de saludarlos,voy directo al baño para poder verme, noto que aun está algo hinchado, Ojalá no se den cuenta, porque sino tendré que responder muchas preguntas más, y no quiero eso, solamente quiero estar yo y mis pensamientos.

-Marco, vamos a cenar hijo. -dice mi madre asomandose a la puerta del baño.

-Si ma, ya salgo, solo me estoy lavando la cara.

-Esta bien.

Cenar, es muy temprano aun, que raro, salgo de los servicios y me dirijo a la mesa, mi mamá ya ha servido los platos, me siento y comienzo a comer, evito en todo momento alzar la mirada para que no vean mi labio.

-¿Qué tal el colegio?

-Todo bien ma, estuvimos jugando en educación física y despues de eso full clases.

-Que bueno.

Unos minutos después ya hemos acabado de cenar, cojo mi mochila y me voy a mi cuarto, me tiro sobre mi cama y cierro los ojos.

<<¿quieres ser mi enamorada?
Las luces del aula se apagan, pero logro escuchar perfectamente que dice que si, si quiere ser mi enamorada, sin embargo yo quiero que me repita esa respuesta, con su voz dulce, angelical...>>

-Marco...

Abro los ojos y veo a mi madre bajo el umbral de la puerta de mi habitación, giro un poco el rostro para que no vea mi labio.

-No es necesario que trates de ocultar lo labio, lo vi desde que llegaste, ¿qué pasó?

A mi mamá no se le escapa nada realmente, se da cuenta de todo.

-Bueno ma, lo que pasa es que...

Al igual que con Eznaider, le cuento todo lo que pasó a mi madre, ella simplemente escucha atentamente sin decir nada....

-----------------------------------------------------------
Horas después:

Mis ojos se abren repentinamente, tengo mucha sed, me toco el labio, ya no está hinchado, al parecer ya se esta sanando, voy hacia la cocina en busca de un vaso con agua, camino bajo la oscuridad del pasadizo que separa mi cuarto de la cocina, camino adivinando la posición de las cosas para evitar chocar contra algo, por fin llego y tomo un gran vaso con agua, me conozco a la perfeccion y si no puedo dormir es porque estoy nervioso y ansioso por algo, y claro, ese algo tiene nombre, apellido y una maldita sonrisa que enamora, es imposible no vivir embobado con alguien como Camila, y sobre todo si te dice "te amo".

Regreso rápidamente a mi cama y me dispongo seguir durmiendo, cierro los ojos y suspiro profundo.

-Marco, ¿tu crees que ella te ama de verdad?

-Por supuesto Mariel, sino no me lo habría dicho.

-Yo te amo de verdad.

-Mar, esto ya lo habíamos hablado antes.

-Lo sé, pero dime que puedo hacer, siento que esto no es justo para mi, y nisiquiera para ti, yo te quiero demasiado, tu lo sabes, lo he demostrado, es injusto que tu sigas amando a alguien que no le importó nada en su momento y se fue dejándote mal.

-Mar.

-Si tu me dieras una oportunidad.

-Mar, basta.

-Lo siento, creo que mejor me voy.

Parpadeo y de pronto Mariel ya no esta delante de mi, cuando comienzo a buscar por todos lados el escenario se torna de color negro, no puedo ver nada, tampoco escuchar, todo está en silencio, no entiendo nada de esto.



Aquiiiiii les dejo uno mas, espero que les gusteeee, muchas graciasssssss.

De tu mano por siempre Donde viven las historias. Descúbrelo ahora