Cuando dejes de tener miedo empezarás a disfrutar. La felicidad se encuentra en los pequeños momentos rodeado de los tuyos, en verles crecer y mejorar, y en darles la mano y ayudarles cuando lo necesiten. Recuerdo cuando me decías que me querías, cuando me decías que yo era la única, cuando me mirabas con esa sonrisa, recuerdo todo aquello perfectamente, al igual que me decías a mi que me querías se lo decías a miles más. Pero la culpa no es tuya, no, la culpa es mía por ilusionarme cada día, por creerte cada palabra que me decías, por las veces que me dijiste ''te quiero'' sin sentirlo y yo me lo creía, la culpa fue mía por buscar la felicidad en una persona que no era la indicada, que no me quería hacer feliz si no, hundirme, y lo consiguió. Consiguió hundirme, hacerme daño, pero perdí el miedo a ser feliz de nuevo y ya ni si quiera me acuerdo de él, solo espero que sea feliz y que no dañes a más personas con tus sonrisas o con tus palabras que dices sin sentir lo más mínimo. Espero que un día te arrepientas de hacer echo daño a tanta gente, que recapacites y de verdad, empieces a querer a los que quieren lo mejor para ti.
