Capítulo 99

412 39 4
                                    

Narra Martina.

Salgo de hacer unas compras,y decido ir a tomarme un café,ya que hace un frio horrible en Madrid.

Hoy tenía cita en el dentista,por tanto me pedí el día libre,algo que por supuesto me iban a conceder.

Me pido un capuchino,y me lo voy tomando mientras sigo paseando por el centro comercial.

Hacía mucho que no tenía un ratito para estar sola,fuera de mi despacho o de casa. Y la verdad que lo necesitaba.

Aquí me olvido de todos los problemas,no pienso en nada solo en mi.

Decido irme ya a casa y hacer un poco de yoga.

Voy hacía el ascensor para bajar al garaje,y me encuentro a la persona que menos quiero ver en éste momento.

Intento girarme e intentar que no me vea,pero es inútil cuando le veo sonreír y venir hacía a mi.

-Hola Martina- Me saluda y sonrió falsamente.

Va a darme dos besos,pero le paró ofreciéndole la mano.

-Hace mucho que no nos vemos- Asiento levemente.

-Desde que recogimos las pruebas- Susurro.

-Necesito hablar con vosotros- Suspiro.

-Esteban,no tenemos nada que hablar contigo- Bramo.

-Necesito vuestro perdón,se que he sido un hombre horrible,y quiero cambiar y recuperar el tiempo perdido- Sonrió de lado y niego.

-Esteban lo hecho hecho está,Ángel jamás te perdonará tantos años de engaños- Pone mala cara. -Y a mi me abandonasteis en un orfanato,tuve una infancia horrible por culpa de que eres un cobarde- Se me quiebra la voz,pero soy fuerte y no rompo en llanto.

Que esté señor quiera ahora perdón por nuestra parte me parece tan gracioso. Pero lo que más me divierte es que quiera recuperar el tiempo perdido.

¿Pero que se cree? ¿Que vamos a olvidar años de horror por que nos pida perdón? Es tan hipócrita que seguro que si lo ha pensado.

-Yo no quise abandonarte,fue tu madre-

-No me cuentes más historias Esteban, el daño está hecho,lo pase fatal. Y mientras vosotros sin una pizca de remordimiento de vuestra parte,no quiero absolutamente nada. Para mi los dos seguiréis siendo unos desconocidos,mis únicos padres son Joan y Eva- Hablo con rabia y le doy la espalda dispuesta a irme.

-¿Entonces también vas a obviar que Ángel y tu sois hermanos?- Oigo antes de entrar en el ascensor.

¿Y ahora me va ha atacar? Esto debe de ser una broma.

-Que no quieras reconocerlo es una cosa,pero la realidad es la realidad- Da un paso hacia mi. -Yo soy tu padre Martina,mi amante es tu madre y Ángel es tu hermano,eso es así y será así toda la vida,así que asumelo, porque te guste o no,esa es la realidad-

Lo miró con asco,vuelvo a darle la espalda,y está vez si me meto en el ascensor.

Si su objetivo era pisotearme,lo acaba de conseguir.

Eres El Único Mal Que Me Hace BienDonde viven las historias. Descúbrelo ahora